Los días pasaban, Arielle actuaba como siempre, como si no estuvieras consiente de que las organizadoras estaban al corre por la proximidad del día de la ceremonia.
—Señorita Arielle, hoy tiene la prueba de los vestidos, y después la degustación de los pasteles. —¿Hoy? No, imposible, no tengo tiempo para eso, que se encargue Enmanuell. Las organizadoras se miraron entre ellas, era la primera vez que trataban a una novia tan desinteresada en su boda. —Ella es rara, toda novia está en las nubes soñando y deseando que llegue pronto su gran día de su boda. —manifestó Liza, una de las organizadoras viendo cómo Arielle subía a su auto y se alejaba. —¿Qué hacemos Jaret? Sin ella no avanzamos en nada. Todo lo demás está a medias y con el vestido y la prueba de postres y pasteles, estamos en cero. —Ya liza, hagamos nuestro trabajo, iremos a escoger unos vestidos los traeremos, pero primero, vamos a seleccionas los postres nosotras mismas. Arielle subió a su auto, salió en busca de Rachel, pues últimamente no estaba disponible para sus salidas, llegó muy cerca de su casa y la vio salir muy animada del brazo de Doménico. —¿Rachel y Doménico? Esto es extraño, a menos que. ¡Ay! no Enmanuell está viendo traicionado por Doménico. ¿Será que le digo? Esto es terrible. Enmanuell tiene que saber. Arielle marcó el número de Enmanuell recibiendo respuesta de inmediato. —Ari ¿Dónde estas.? Te necesitan para la degustación del banquete. —Deja que se encargue las organizadoras, ¿Dónde está tu? —En el hotel donde será la recepción con mi madre te estamos esperando. —Enmanuell tu y yo quedamos....—sus palabras fueron interrumpidas por él. —Ya lo sé.. —¿Quieres escucharme? Acabo de ver a Doménico siento infiel —¿Qué estás diciendo? ¿Cómo que infiel? —Si, infiel y con una mujer. Arielle no mencionó el nombre de Rachel, pues como la supuesta relación de Enmanuell y Doménico era secreta, era de imaginar que Rachel no sabía nada del tema. Arielle salió de ahí y fue al hotel donde estaba Enmanuell. Enmanuell la miró entrar, vio como su hermosa sonrisa y sus cabellos violeta jugaban al viento. "Que hermosa es, estaremos casados un año, y en todo ese tiempo puede pasar que ella se enamore de mi." Eran los pensamientos de Enmanuell al ver que Arielle se acercaba a él. Salió a su encuentro, mientras ella caminaba sonriente. —Cariño, ya era hora de que estés aquí. Te extrañé. —expresó Enmanuell con gestos muy cariñosos que a ella no le pareció una actuación de su parte. —Bájale dos rayitas a tu intensidad, tu madre esta lejos. —Disculpa, solo quería ser cariñoso con mi futura esposa. —Al parecer, no te importan los cuernos que te están poniendo. —Ese asunto lo arreglaré después, ahora vamos a nuestro asunto. Arielle y Enmanuell pasaron la tarde probando y eligiendo el menú que servirían en la boda. Los días siguieron pasando, Rachel no daba señales. hasta que Arielle nuevamente fue por ella. Llegó a la residencia de los Parisi y nuevamente estaba Doménico Serra con ella. —¡Ari! Que bueno que estás aquí. —Pues ya que me tienes en el olvido, vengo a ver que te pasó. Teníamos la prueba de los vestidos, de los pasteles y tu nunca apareciste. —Ay mi Ari, perdóname, es que salí unos días de viaje en yate. Y como andas en tus preparativos no te invite —Déjame adivinar con quien. Doménico. ¿Cierto? Rachel grito de la emoción mientras se colgaba del cuello de Doménico. —Si, somos novios. —dijo Rachel abrazándose a Doménico mientras el se aclaraba la garganta. Y a su mente vino las palabras de Enmanuell. Enmanuell, después de dejar Arielle en su residencia fue en busca de Doménico a su departamento, llegó al edificio, bajó del auto y subió al ascensor , marcó el número de piso y subió. Las puertas metálicas se abrieron y Doménico estaba a punto de salir nuevamente. —Manu, que haces aquí hermano. —Tenemos que hablar, vamos adentro o vamos a un bar. —Al bar. —eligió Doménico y subieron nuevamente al ascensor para bajar e irse al club. Llegaron se sentaron en la barra, y el bar tender les sirvió un vaso de whisky a ambos. —Dime, ¿Qué es eso urgente que tienes que decirme? —preguntó Doménico bebiendo un sorbo de bebida. —¿Qué hacías en casa de Rachel? ¿Acaso tienen una relación? Doménico se carcajeo y bebió el resto del contenido en su vaso. —Tu sabes que nosotros no mantenemos una relación estable jamás, es solo algo pasajero. ¿Acaso quieres con ella? Por no no hay problemas. —No se te ocurra estar de cariñoso con ella frente a Arielle. —Le dije a Arielle que tú y yo tenemos una relación. —¿Qué carajos está diciendo? Vociferó Doménico bebiendo nuevamente todo el contenido del vaso. Lo dejó sobre la barra y miró fijamente a Enmanuell. —Contéstame Enmanuell. ¿Por qué carajos dijiste que te gustan los hombres.? —Para que Arielle acepte casarse conmigo, era la única forma de que ella acepte ayudar a este pobre incomprensible hombre a quien su padre le obliga un matrimonio. —¿Y tenías que decir semejante mentira.? Hacerle creer que somos pareja. ¿Acaso te volviste loco? —reprochó Doménico bebiendo otro vaso más. Y continuó —¿Te estás escuchando.? Que eres gay y seguro yo tu pareja. —Así es. —Le hubieras dicho la verdad de lo que querías. —Entonces no hubiera aceptado. —¿Por qué no? —Arielle es perfecta, no cree en el amor romántico, no funcionó el querer cortejar la, entonces le expliqué que necesito un matrimonio por conveniencia sin estar aparentando amor a la futura esposa. El que ella sea así, la convierte en la candidata perfecta. Por qué no espera amor, vive su vida, yo continuo con la mía, y en un año nos divorciamos. Doménico lo miró fijamente haciendo un gesto de negación. —En verdad no sé cuál es más loco, si tú por decir ser gay para que Arielle te acepte esas condiciones de cada quien por su cuenta solo para seguir con cuanta mujer se te presente, o ella por ayudarte. ¿Y no te has puesto a pensar que en un año pueden pasar muchas cosas. Como por ejemplo enamorarte de ella? Enmanuell se quedó pensando y recordó cuando la vio entrar al salón de degustaciones, su cabello de colores, se sonrisa y el contoneo de sus caderas al caminar —Ella se va a Moscú, no compartiremos mucho tiempo juntos, y ese será el pretexto para el divorcio en un año. Doménico suspiró profundo haciendo un gesto de negación, bebió otro shop y salieron de ahí sin imaginar que todo su secreto era escuchado por Paul uno de los amigos de Felicia. Quien la llamó y contó lo que escuchó de Enmanuell y Doménico. —Gracias Paul, te debo una, gracias por la muy buena información. Colgó la llamada y sonrió mientras caminaba por su habitación ideando la forma de como hacer para terminar con esa boda. —Así que no la amas. Yo sabía que tu no podías amar a otra mujer. No quieres compromiso más que el de un papel firmado, pues eso tendrás, pero no con otra, por que yo seré esa mujer, y después veremos mi amor. — una sonrisa maliciosa se dibujó en sus labios, se cambió y salió para ir en busca de Arielle, tenía que decirle la verdad para descartar esa idea de matrimonio. Salió en su auto y fue al departamento de Enmanuell. Subió, entro y buscó las invitaciones. Encontró la foto de Arielle y la miró fijamente. —Así que tu eres la escogida, pues fíjate que no ayudaras a tu amiguito, no querrás hacerlo cuando te enteres de que no es gay, y que te escogió por que no le interesas como mujer. Felicia salió del departamento, subió a su auto y fue en busca de Arielle. Llegó a la universidad donde estaba con su grupo de amigos riendo. La observó por largo tiempo idea do la manera de hacerle llegar en mensaje que tenía para ella. Una nota, porque no tenía su contacto. Encontró con quien enviarla, la entregó y vio cuando la recibió. Salió de ahí y volvió al departamento de Enmanuell, lo llamó. Ella quitó su ropa mientras hablaba con el. —Manu, te deseo, necesito de ti, mis manos no son suficiente mira como estoy. —habló jadeante tomo una fotografía y la envió. —¡Mmm! Estás rica voy enseguida. —Enmanuell colgó la llamada. En la mansión Giordano. —Hijo, no sé pero la actitud de Arielle no me parece de una mujer que desea casarse, todo le da igual, es su boda, no la de otra persona. —Petra, la madre de Enmanuell, reprochaba la conducta de Arielle hacia los preparativos. —Madre, no todas las mujeres son idealistas y perfeccionistas , ella es perfecta para mí, y me encanta. —Bueno si tú lo dices, así será, tu la conoces mejor que yo. —Si madre, ella es una mujer muy inteligente, muy capaz, muy hermosa, esos ojos, esa boca, ese caminar. Petra reía al ver la forma en la que Enmanuell hablaba de Arielle. —Es la primera vez que te escucho hablar de los atributos de una mujer. —Ella es una niña hermosa madre. Su teléfono sonó y lo trajo a la realidad esa que lo desviaba de su organización de matrimonio. Felicia era el nombre que reflejaba la pantalla, contestó y se alejó para hablar con ella y ver la foto que le envió. Se despidió de su madre, subió a su auto y salió de ahí para ir a su departamento. En el campus de Arielle. —Señorita, ahí le envían este sobre.—dijo el pequeño a quien le había pagado Felicia para que haga el mandado. Arielle recibió el sobre sonrió y miró a todos lados. —¿Quién te envió para que me entregues esto? —interrogó mirando a todos lados, el pequeño señaló e dirección donde estaba Felicia, pero no la vio más ahí. Arielle abrió el sobre y leyó la nota "Si quieres descubrir la verdad de tu prometido ven a su departamento donde yo lo comparto con él. ¿Sabías que su pasión son las mujeres? Y si se casa contigo por qué sabe que no te vas a enamorar de él nunca y por que tú jamás le vas a gustar como mujer, entonces eso significa que te esta utilizando para un propósito, y ese propósito es obedecer a su padre que lo obliga a casarse y el obedece por que después lo deshereda y el no quiere perder la fortuna de su padre ni su libertad, eso me lo dijo el."ARIELLE LBLANK Leyó la dirección, apretó los puños y entre ellos la nota.—Por eso dijo que yo era la indicada, me mentiste desgraciado, te gustan las mujeres y lo que no quieres es el verdadero compromiso de un matrimonio. Ahora vas a jugar mi juego, y te vas a arrepentir de haberme engañado.Arielle salió del campus sin despedirse ni decir nada, marcó el número de Rachel y la citó para encontrarse en otro lugar.—¿Qué pasa Ari? Te siento algo tensa.—Necesito hablarte, no me preguntes de que, es personal.—Dime dónde nos vemos.Arielle envió la ubicación y se encontraron.—¿Qué estás diciendo Ari? —Arielle contó a Rachel todo lo que había pactado con Enmanuell, y estaba tan sorprendida.—Lo que escuchaste.—Doménico me va a escuchar, lo voy a matar. ... Espera, pero el no dijo ni confirmó nada. ¿Cierto?—No, además creí que Doménico lo traiciona contigo.—Doménico y yo somos una pareja. Digo yo de lo más normal, —Creí eso de que por fin te habías interesado por alguien.—No, solo
ARIELLE BRIGHT. Y GABRIELL ALIGHIERI. Arielle Maylin Brigth Kartson, es una joven soñadora que cree en el amor a primera vista, lo que le sucedió cuando conoció a Gabrielle Alighieri, un apuesto magnate. Comprometido con Arielle Maylin, teniendo siete meses de relación, deciden unir sus vidas.—¿Pero por qué en tan poco tiempo? ¿Acaso estás embarazada?—Noo, es que no podemos estar lejos el uno del otro, lo amo y si, si quiero casarme, ya, hoy. —respondió Arielle Maylin sintiendo la emoción más grande en su corazón, que parecía quererse salir de su pecho.—Entonces si es en menos de un mes, no nos queda mucho tiempo entonces. Tenemos que empezar ya.Arielle Maylin, empezó con los preparativos de su boda, con la ayuda de las mejores organizadoras, estaba pendiente de cada detalle. Pruebas de vestido, degustación de los pasteles y platos para brindar, el itinerario del viaje de bodas y despedida de soltera.—Señorita Arielle una entrega para usted. —dijo el señor de entregas, que lleg
Gabrielle muy temprano realizó los últimos detalles para el viajes de bodas con Arielle. Las horas pasaron y ya estaba listo para salir a la iglesia, subió a la limusina que no llevaría y llegó, saludó y recibió felicitaciones de cada invitado que se acercó a él.La organizadora de bodas le indicó donde tenía que esperar y un mensaje a su celular le llegó."Gracias por la deliciosa noche que me regalaste, será nuestro secreto, y si quieres saber con quién estuviste te espero en el auto negro que está a la derecha de tu limusina.""¿Que carajos es esto? Creí que era un juego de Arielle."—pensó y decidió salir.—La novia está saliendo, no tarde mucho. —le sugirió la organizadora.—Será solo un momento, no tardo.Gabrielle salió seguido por Lorena la organizadora y lo vio subir al auto.Gabrielle subió al auto y la sorpresa para el fue encontrar a Katherine Thompson ahí sentada.—¿Tu? ¿Qué haces aquí Katherine?—Tu llegaste aquí, por qué deseabas saber quién te regaló la mas excitante d
ARIELLE BRIGHT Y ENMANUELL GIORDANO.Arielle llegó al pabellón de las hermanas de la caridad donde sería guiada por Sor Juana.Era una monja muy estricta y regañona, todo lo quería a su tiempo y si no lo estaba imponía los castigos sin autorización de la,madre superiora.—Sor Juana, una nueva novicia, estará aquí con ustedes hasta segunda orden. Son órdenes de la madre superiora.—¿Cuáles son esas segundas órdenes? Hermana, aquí todas la hermanas saben su deber y están segura de su vocación.Arielle tenía la cabeza gacha, y Sor Juana no podía ver su rostro muy bien. La miró y le dio órdenes de seguir.—Vamos, te indicarle tu deberes. —habló con severidad. Arielle miró a Sor María y dibujó una leve sonrisa.—Ve tranquila. —le susurró y ella entendió y siguió su camino.—Las hermanas de caridad somos ayudantes de Dios aquí en la tierra, alimentamos a los necesitados y ayudamos en el orden del convento y la basílica. Tendrán días disponibles el ayuno.Sor Juana explicó todo lo que Ariell
ARIELLE BRIGHT Y ENMANUELL GIORDANO.DIA DE LA BODA.Rebeca y Luz estaban concentrada viendo la llegada de los invitados.—Son puro multimillonarios ya quiero ver al novio. —dijo Rebeca.—Te imaginas a la novia, debe ser un vestido de ensueño. —respondió Luz sin quitar la mirada de las cámaras.Todos entraban y la organizadora los guía a sus lugares.Enmanuell salió de la limusina, saludó a todos y fue guiado al altar por su madre.—Mira el novio, que guapo que está, parece un príncipe de cuentos. —dijo Luz.—Me parece conocido, no recuerdo donde, Pero ya lo vi antes. —expresó Rebeca apretando el botón de zoom a la pantalla.Lo miró detenidamente y recordó.—¡Claro! Ya recuerdo, es el mangazo que atropelló a May. ¿Recuerdas? —preguntó muy entusiasmada Rebeca.Luz miró fijamente la pantalla y confirmó.—Si, es él, voy a decirle a Maylin que su otro galán se casará.—¡Estás loca! ¿Cómo le dirás eso? Ves que aún anda sensible por lo que le hizo ese cobarde. Mejor sigamos mirando, déjal
Mientras Arielle Brigth, era llevada en contra de su voluntad.Arielle L'blank estaba sumergida en el más profundo de los sueños.Las puertas de la habitación de oración se abrieron y Sor Juana la encontró completa mente dormida. —Hermana Maylin. Usted se la pasó durmiendo y no cumpliendo con la penitencia. —casi gritó, y Arielle dió un salto sobre la cama.Se puso de pie y agachó la cabeza.—Hoy se quedará aqui encerrada y cumplirá su penitencia doble, usted no suelta el mundo, lo lleva dentro de usted. No sé que hace aquí si esta no es su vocación. Ya no saldrá del convento con las hermanas a realizar caridad.Arielle sin pronunciar palabras solo asentía, aceptando lo que Sor Juana dictaminara con ella.Sor Juana salió de la habitación no sin antes decir.—Hoy tendrá ayuno. —dijo y cerró la puerta.Arielle cayó sentada sobre la cama, suspiró profundo y pasó sus manos por su rostro.—¿Y ahora como voy a salir de aquí? Por dios, salí de un lío para meterme en otro más grande. —decía
Gabrielle Alighieri, después del escandaloso plantón en la iglesia, regresó a su mansión, donde compartiría su vida con Arielle. Subió a su oficina y sirvió un vaso de whisky y lo bebió, sirvió uno y otro y otro, bebió hasta perder la razón.Una semana pasó encerrado sin recibir a nadie ni responder llamadas ni mensajes. Los toques de la puerta llamaron su atención. Y entraron —¡No quiero ver a nadie! —habló sin mirar a quien pasó por ella.—Gabrielle. ¿Es así como piensas que Arielle te perdonará. Hundiendo te en el alcohol ? Sal de aquí y búscala, explícale que te tendieron una trampa. —Le aconsejó Sharif, su mejor amigo.—No quiero ver a nadie Sharif, déjame solo.—Ve a buscarla, explícale, dile que no la traicionaste.Y así lo hizo.—Ahí te envío toda la información de mi prometida, quiero que la encuentres lo más pronto posible. —ordenó Gabriell, cuando fue interrumpido por Sergio.Gabriell lo miró y se apresuró a recibirlo.—Sergio, por favor toma asiento, necesito aclarar m
ARIELLE L'BLANK Y GABRIELL.Arielle fue subida al jet privado de Gabriell y llevada a Florencia.Dos horas después estaban aterrizando en Arezzo—¿Dónde me llevan? Esto es un secuestro, mi padre los refundirá en la cárcel.—Señorita, su novio envió por usted, será el quien le explique. La subieron al auto y salieron rumbo a la mansión Alighieri. Una hora después estaban llegando.Bajaron del auto y la llevaron casi arrastras, mientras ella forcejeaba por no querer seguir.—¡Suéltame! Yo puedo seguir sola. —dijo tratando de zafarse. El guardaespaldas la subió nuevamente al hombro y la cargó.—¡Bájame idiota, Suéltame! —gritó patalendo cuando se quedó en un silencio sepulcral al escuchar la voz varonil de Gabriell.—¡Bajarla! Arielle cayó al suelo en el momento en que fue bajada del hombro del guardaespaldas, Gabriell se inclinó para ayudarla y en el momento de ponerse de pie el velo se le hizo a un lado dejando al descubierto su fino y hermoso rostro.—¿Quién eres tú? —preguntó un so