Cap. 57: CitaciónRitter estaba esperando que la mujer le respondiera, pero ella parecía estar tranquila, así que mirándolo a los ojos le dijo:—Soy realmente la doctora Mía Koch. ¿Y tú por qué me mandaste a investigar?—Porque me dijo que estuvo el día de mi nacimiento y mis padres me negaron conocerla, eso me dio a entender que había un secreto que la envolvía a usted conmigo.La mujer se levantó y tomó el auricular del teléfono al lado de la puerta.—Que nos envíen dos cafés a la sala, por favor.Después que les trajeron los cafés, la mujer siguió la conversación con él.—Ritter —dijo ella con serenidad—. Yo… Es decir, mis padres eran los dueños de clínicas Wolf, no sé si has visto que en los documentos anteriores a la venta de la clínica figuran como Centro de fecundación Koch & Asociados, allí figuraban tus padres, Marlene y Zav como socios de mis padres. —Eso ya lo sé, hace poco, mi esposa y yo sufrimos un secuestro a nuestros hijos recién nacidos y la persona que mandó a at
Cap. 58: Me vengaré.—¡Suéltame! —le grito Erika y tiró de su brazo violentamente mientras tomaba el pomo de la puerta y desde allí le soltó—. “Mientras tú andas tratando de inculparme del presunto conato de aborto a la puta que tienes, yo te muestro allí lo que ella hace con su amiguito… Y te diré más, Ritter Wolf, como reciba otra citación de la policía, esos videos se verán en el mundo entero. ¡No me retes porque vas a quedar muy mal parado y tus clínicas también!Así salió en carrera dejando a Ritter ardiendo de ira.Ritter mesó sus cabellos, con lentitud se sentó detrás del escritorio, tomó su teléfono y llamó al detective policial.—Creo que la mujercita está preocupada y muy asustada, me vino a amenazar. ¿Han logrado pruebas sólidas?—Creo que tendremos que esperar a que ella dé el segundo paso.—Gracias.Ritter aspiró aire y vio la pantalla de su teléfono en el se mostraba la entrada del mensaje de Erika a su número, su corazón se aceleró tan fuerte que cerró los ojos para
Cap. 59: "Amiga"Lara nota que Ritter está esquivo con ella, pero no quiere meterse ideas en su cabeza que la desvíen de lo que tiene trazado en su mente y ello es la recuperación de la salud de Egmont y el que sus dos morochos crezcan saludables, en su interior teme porque Egmont nació totalmente sano y desarrolló aquella enfermedad después de su primera niñez, por eso estaba enfocada en que los morochos sigan tan saludables como lo están ahora.Ritter se estuvo en el agua prácticamente toda la tarde, jugando con Egmont y metiendo al agua a los morochos por turno. De vez en cuando le echaba un ojo a Lara quien tumbada en una esterilla tomaba el sol como si quisiera tostarse.Negó con la cabeza al verla poniéndose más bronceador, a pesar de que ella tomaba color enseguida, en cambio él sólo enrojecía.Sonrió mientras la observaba, también notó que ella lo miraba de vez en cuando sólo que lo hacía despectivamente. Se acercó a la orilla y salió sentándose al borde de la alberca fren
Cap. 60: SorpresitaLa asistente de Derek lo llama aquella mañana para decirle que cuando llegó encontró a Adalia dormida en un asiento de la sala de espera y que ella la metió al dormitorio dentro de su consultorio, pero que al parecer se despertó y de malas y está destruyendo el consultorio porque sólo se oye mucho ruido adentro.Derek se viene enseguida a la clínica y se encuentra con Ritter que también está llegando.—¿Te das cuenta, hermanito que no se debe joder la vida a nadie? Es que en esta vida uno siempre paga el daño que hace a los demás.Derek se apresura a entrar al ascensor y Ritter le sigue. Derek trata de dejarlo atrás, pero Ritter corre y atraviesa el pié para que no cierre la puerta. —Estoy apurado sino esa loca va a destruir los equipos médicos de mi consultorio.Ritter se ríe ladeado.—Todo lo que ella destruya allí lo tienes que pagar. ¿Eh? De tus honorarios… La clínica no se hará cargo de lo que haga tu mujercita. Ambos bajan en el piso anterior al áti
Cap. 61: A mí no me engañas.Mientras revisaba los documentos que la doctora le dejó, Ritter le preguntó a Lara.—¿Qué te trajo aquí hoy? ¿Paso algo inusual en la casa?—Todo está bien en la casa, los niños están bien.—Eso lo sé —puso el bolígrafo sobre la mesa y se recostó al respaldo de la silla y entrecerrando los ojos continuó—, pero tú estás aquí. ¿Sólo querías verme?Lara se sonrojó. Pero siguió muy seria.—Hay algo que me ha llamado la atención hoy y sólo tú puedes aclararme la situación.—Dime de qué se trata.—Emil me llamó hoy, me dijo que hace unos días atrás recibió un video en su teléfono, y que en ese video estamos él y yo en una situación muy comprometedora. ¿Sabes algo de eso?Ritter cambió enseguida su semblante.—No tengo idea de que se trata. Pero debes evitar ver esas cosas que inventan, a veces son tan reales que son perturbadoras. Lo sabes. Tenemos de ejemplo a Adalia con toda esa basura que expusieron de ella por ahí, está ya como loca. Lara lo vio tan
Cap. 62: Hagamos un cambioRitter llegó a la entrada de aquella lujosa mansión ubicada en el sitio más exclusivo en la urbe. Al anunciarse, lo dejaron esperando unos segundos pero luego lo condujeron por largos pasillos hasta llegar a un amplio y moderno despacho.—Doctor Wolf, Un gusto saludarlo. A decir verdad me sorprende mucho su visita —el hombre le extiende su mano, pero este no la toma, entonces Emil le señala la silla—Toma asiento, hombre.Ritter se sienta, pero enseguida le dice:—Mi visita no es de cortesía, realmente estoy aquí porque las circunstancias me obligan.—En ese caso, al grano entonces —convidó Emil.—Usted le dijo a mi esposa que tenía un video de ella.Emil enrojeció su rostro.—Me siento muy apenado con todo eso, Ritter. La verdad no sé si usted lo ha visto. Pero es bastante comprometedor.Ritter logró percibir un cierto regocijo en la expresión ocular del hombre al hacer una mera referencia sobre el contenido del video.—Yo, en un principio no creí necesari
Cap. 63: TiempoRitter sube a su habitación y Lara entra detrás de él.—¿Ya están dormidos los niños?—Sí, ¿Cómo te fue? —Lara esta todavía apenada con lo del video, mientras que Ritter está hundido con lo que acaba de saber de María.Se acerca a ella y le levanta el mentón para darle un tierno y largo beso. Ella se aleja de él.—¡Ven! —Él le toma por el cuello con sus manos y la arrima hasta sus labios besándola con pasión. Lara se entrega en ese beso, pero luego Ritter siente una aguda punzada en su corazón, como si no es suficiente con todo lo que ellos están pasando para ahora lidiar con la enfermedad de María.—Voy a ducharme —le dice separándose de ella—, pero dime ¿Cómo estuvo mi hijo mayor hoy?Lara sonrió.—Hoy se durmió temprano, mañana es el evento de fin de año en el colegio y no se lo quiere perder, sus compañeritos quieren que él esté. ¿Y sabes que me ha pedido?—¿Qué? A veces me sorprendo de ver lo vivaz que es a pesar de su edad y de su situación. Pero ojo, que é
Cap. 64: Quiero saber...Ya al atardecer Emil llegó a casa de Lara, esta salió a recibirlo mostrándose apenada.—Emil ¿cómo estás?—Tiempo sin verte Lara. Ya ni siquiera llamas al amigo…—Ya no es sólo Egmont —le dijo sonriendo mientras le señalaba el asiento y se sentaba a su lado—, ahora son tres y mira que dan tareas… ¡Me da gusto verte y saber que estás bien!—Yo reitero lo de siempre, ¡estás bella! —Lara enrojeció más aún—. ¿Y bien, necesitas algo?—¿Además de verte? —la miró socarrón y luego soltó una sonora carcajada—. Pareces una cría Lara. Sólo bromeaba, pero tus mejillas están tan rojas que parece que fuesen a sangrar.Ella bajó la mirada.—Dime entonces que te trajo hasta aquí.—Bien… Mira necesitamos que vayas al laboratorio. Es de suma urgencia que asumas el inicio de los nuevos medicamentos para tener las cantidades exactas de los compuestos en sus respectivas muestras y que se empiece la elaboración masiva. Padre te dejó esa tarea porque no hay nadie más en Berlín e