Los días pasaron rápido, y realmente Richard se había ido a vivir en Europa.

No se ha contactado conmigo, solo sé que esta trabajando con un familiar, —¡ ojalá le vaya bien!

Suelo ir a visitar en el cementerio, a mis amigos que fallecieron, llevo flores a mi amiga y conversamos un momento,—¡ Te extrañó!

¡Pero lograré, hasta que te vuelva a ver!.

No sé porque, pero cada día que pasa me siento más vacía, algo dentro de mí está dañado.

¡ Me siento muy sola!

Manu, procura hacerme compañía cada día, pero muchas veces ni puedo prestar atención a lo que me dice.

Mi psicólogo dice que es un proceso, la aceptación incluye dolor.

—¡ Ya no quiero seguir así!

Por eso acepté casarme con Manuel, después decidimos ir a vivir en la capital, compró una casa hermosa, en el centro.

¡ Espero que sea un nuevo inicio!

Si sigo acá nunca podré mejorar, necesito algo nuevo, de alguna manera tengo que seguir,

Aunque sigo pensando, que ese hombre en mis sueños no es Manuel, no puedo recordarlo.

Solo es un sue