Ha pasado más de una semana y Lucas se ha comportado tranquilo, me ha pedido disculpas por lo ocurrido y todo ha estado más que bien. Hemos ensayado bien y en paz, no ha habido peleas o discusiones por celos y/o la comida, me siento feliz. Sabía que todo volvería a ser como antes. No se separa de mí en ningún momento y cuando he intentado salir con las chicas, él llega de improviso y me lleva consigo. Siempre intento disculparme y las chicas insisten en que debo alejarme de él, pero no puedo. Lucas dice que si ellas no dejan de decir gilipolleces me prohibirá juntarme con ellas. Me aterra la idea, por lo que hablo con las chicas y las hago entrar en razón. Estoy bien, sólo necesito más tiempo con mi novio. Esto es justamente lo que ambos necesitábamos. Me apena dejar a las chicas tiradas, pero también requiero salvar mi relación amorosa. Sé que mis amigas en algún momento lo entenderán.

Un mes después en el cual casi no he hablado mucho con las chicas. Las comienzo a extrañar y que mi novio esté constantemente a luz y a sombra conmigo me comienza a atosigar. Necesito tiempo y espacio para mí misma, aunque prefiero no decir nada, no vaya a ser que arruine todo. Además Lucas siempre va a por mí a la universidad y en clases apenas las he podido saludar. Apenas terminan mis clases, tengo que irme de inmediato o Lucas se enoja mucho.

El día de hoy con Lucas salimos a comer dado que es mi cumpleaños, aunque solo me ha dejado pedir ensaladas y esas cosas. Más tarde me ha dejado en mi departamento y se ha ido.

Ahora estoy en mi habitación, preparándome para que vengan mis amigas, me han llamado para hacerme una pequeña celebración junto a algunos compañeros de clases y del teatro. Me ha dado tanta alegría que incluso compré cosas para comer y beber. La verdad es que las extraño un montón, a pesar de que he sido yo la que me he ido alejando para mantener tranquilo a Lucas. Por eso no le he dicho nada de esta celebración. Sólo quiero un poquito de libertad para mí.

Mientras me termino de maquillar, escucho el timbre y dándome el último toque, voy a abrir y dejo entrar a las chicas.

• — ¡Feliz cumpleaños Auro! — Me abrazan cariñosamente y yo les correspondo

• — ¡Gracias por venir chicas! ¡Las he extrañado tanto! — Las abrazo momentáneamente o sino me bajará el sentimentalismo. Ambas se dan una mirada y exhalan un suspiro.
• — Sabes que hemos intentado hablarte en la universidad pero siempre te vas muy rápido. Te hemos extrañado mucho también y estamos muy preocupadas por ti — Exclama Chloe.
• — Es que hemos estados muy liados con el trabajo junto a Lucas. Además últimamente no se separa de mí y eso me tiene muy contenta ¡Mirad, estoy intacta! Lleva más de un mes sin tocarme un pelo — Digo contenta. Quizás eso ayude a calmar a las chicas.
• — Aurora, ni siquiera deberías decir aquello. Ninguna mujer tendría que estar feliz porque su pareja lleva un mes sin golpearla o hacerle daño. Sólo veo que este hijo de puta ha cambiado de estrategia y te está alejando de nosotras una vez más ¿Es que no te das cuenta? — Esta vez es Emily la que habla. Yo la miro sorprendida. La verdad no lo había pensado de esa manera.
• — Bueno, ya hablaremos de eso luego. Ahora disfrutemos de la noche ¿sí? — Pido y hago morritos. Las chicas finalmente se rinden y asienten entrando al apartamento. Decido colocar un poco de música para aligerar el ambiente.

De a poco van llegando más invitados y luego de una hora hay cerca de veinte personas en mi pequeño apartamento. Me alegra ver a mis más cercanos en este día tan especial. Todo está marchando a la perfección y por primera vez me doy cuenta que la sensación de paz que percibo en estos momentos no la sentía hace bastante tiempo. Pero como siempre, nada es duradero para mí.

En un momento de la noche estoy conversando muy amenamente con mi vecino cuando oigo el timbre, sin embargo no presto atención porque Chloe es la que va a abrir, pero siento que comienza a discutir con la persona que ha llegado, así que volteo a ver qué pasa y me llevo una desagradable sorpresa.

• — ¿A qué habéis venido? ¡No sois bienvenido en estos momentos! — Le grita mi rubia amiga a Lucas, que me mira furioso, pasa de ella y comienza a caminar hacia mí. Un escalofrío recorre todo mi cuerpo, por el terror que estoy sintiendo.
• — ¿Por qué no me habéis invitado a la fiesta? Para poder hablar más tranquila con Tomás, ¿verdad? — Le hago señas para que no haga un escándalo y que vayamos a conversar a la habitación. Sonríe de manera diabólica al tiempo que acepta y me coge de la muñeca, no obstante, antes de entrar, Tomás lo empuja y le pide que se vaya, pero eso solo lo enfurece más. Yo le indico a mi vecino que estoy bien, sin embargo Lucas le da un puñetazo en la cara que lo tira al suelo mientras a mí me empuja rápidamente a la habitación y cierra con seguro. Por fuera escucho como golpean y patean la puerta y como se mezclan con los gritos de mis invitados, entretanto yo solo ruego que llamen a la policía.

• —¿Podéis controlarte un poco? Solo estaba conversando y si no te invité fue porque esto me lo organizaron las chicas, no tenéis por… — Como si todo se pusiera en cámara lenta, su mano se estampa en mi cara, me ha dado una bofetada, haciéndome sangrar el labio mientras las lágrimas comienzan a rodar por mis mejillas.

• — ¿Qué te he dicho sobre mentirme? ¿Creéis que soy un imbécil? Sé muy bien que te gusta Tomás pero no dejaré que nadie te tenga ¡Si no eres mía, no eres de nadie! Ya verás cómo te dejo inservible para que ningún otro hombre se fije en ti — Me grita y otro escalofrío me recorre todo el cuerpo.

Antes de siquiera reaccionar a sus palabras, me agarra del cabello y me tira al suelo para comenzar a patearme por todas partes, yo solo atino a cubrirme el rostro, estoy sumida en el llanto y el dolor, de seguro si sobrevivo quedaré toda magullada, no obstante ahora solo lo que pienso es en no morir. Se instala un pitido en mis oídos y todo comienza a dar vueltas.

A lo lejos comienzo a escuchar como forcejean la puerta, puedo ver de manera borrosa como entran mis amigos y cogen entre varios a Lucas para que deje de golpearme, escucho a las chicas preguntarme cosas pero aunque intento responderles no puedo, siento mucho dolor, mis ojos poco a poco se van cerrando y lo último que puedo oír es el grito de Chloe y otros pidiendo que llamen a una ambulancia ¿Será que esta vez no volveré a despertar? ¿Este era el plan de Lucas? ¿Asesinarme a golpes luego de haber estado cariñoso y relativamente “tranquilo”? ¿Esta era la calma antes de la terrible tormenta? ¿Por qué no les habré hecho caso antes? Esto se podría haber evitado, pero lamentablemente el amor te ciega de una manera que muy pocas personas pueden llegar a entenderlo. Caes en una dependencia de la cual es muy difícil salir, te sientes una b****a andante y que si no estás con esa persona no estarás con nadie. Que ninguna persona se fijará en ti, porque así es como juegan con tu mente. Te hacen sentir menos, que no vales un euro, que no sirves, que estás fea y poco a poco te generan una dependencia hacia ellos. Piensas que lo que sienten es amor hacia ti, pero quien te quiere no te hace daño de ninguna manera. Quien te quiere te cuida, te respeta y no te aleja de las personas que más quieres. Si logro sobrevivir espero algún día encontrar a alguien así. Lucharé por cumplir mis sueños profesionales, por salir adelante luego de esto. Buscaré ayuda y seré una nueva Aurora.