Al llegar me recibe Gabriela, me comenta que tiene puesta la mesa y le doy las gracias a la vez que la despacho, ella necesita descansar, de lo demás me encargaría yo. Quiero hacer esto sola. Me coloco un delantal y me pongo manos a la obra. Dejo en una cubitera un exquisito espumante brut rosé para acompañar el postre, se me ocurren muchas ideas con esto. También meto el vino blanco en el refrigerador, ya luego lo sacaría. Enciendo el horno para las machas y comienzo a hacer una salsa con champiñones. Una vez lista sello unos chuletones y los coloco en una budinera, agrego un chorrito de vino tinto y les tiro encima la salsa. Finalmente junto a las machas introduje todo en el horno. Coloco un poco de música en la radio desde mi móvil, algo bien romántico. Quince minutos más tarde me llega un mensaje.
Eliana: ¡Auro! Mi primo se fue hace cinco minutos. Lo más seguro es
— ¡Dios! Amor necesito estar dentro de ti ¡ya! — Me encanta saber eso. Su tono ronco y desesperado. Pero con la cabeza doy una negativa.— Aun no mi sensual Zafiro — Él se sorprende.Le coloco el antifaz, él no reclama. Comienzo a pasar la pluma por todo su cuerpo, ríe un poco pero no dice nada, lo provoco y finalmente me bajo para arrodillarme ante él. Tomo su miembro con una mano, lo masajeo y con la otra hago lo mismo con sus testículos. Un exquisito gemido sale de sus labios. Avivada por esto introduzco su miembro en mi boca y comienzo a subir y bajar mis labios, lo repaso con la lengua, le doy pequeños mordisquitos. Ulises se retuerce de placer.— Cariño… si no me sueltas ahora me voy a venir en tu boca — Murmura entre jadeos. Yo sonrío traviesa.— Hazlo — Le respondo sacándole el antifaz y mirándolo en mod
“Alguien que te haga sentir especial, la más linda del mundo…no aceptes menos que eso”A la mañana siguiente me despierto dolorida pero feliz. Recuerdo todo lo que he hecho con Ulises y automáticamente se me forma una sonrisa en los labios. Él aún duerme a mi lado, desnudo ¡qué buena vista me da! Está boca abajo tapado solo con la sábana a mitad de cuerpo, decido que lo mejor es seguir durmiendo. Hay que recuperar energías.Cuando vuelvo a despertarme lo primero que veo son unos ojos zafiros que me miran fijamente y me sonríen.— Hola dormilona — Besa mi frente y me tiende una taza de café. Me acomodo y se la recibo gustosa.— Hola psicópata ¿hace cuánto me estás mirando mientras duermo? — Le pregunto divertida. Él pone los ojos en blanco pero al final se ríe.&m
En el local nos recibe un tipo todo tatuado y lleno de piercings, nos saluda amablemente y yo le comento que quiero un bello tatuaje, me pregunta si tengo algún diseño en mente y le hago saber que quiero una media luna y un tridente en la zona de la clavícula. Entre el hombre tatuado y yo diseñamos algo y el resultado es ¡colosal! Me encanta. Ulises sonríe y mueve la cabeza de un lado a otro por esta locura. Amo a mis bebés gatunos y son mis primeras mascotas desde que me he independizado. Por ello quiero esa media luna y un tridente.El hombre tatuado le da unos últimos retoques al dibujo y lo plasma en mi piel, me consulta si está bien el lugar y afirmo con mi cabeza. Finalmente comienza a pasar la aguja por el dibujo en mi piel y duele, duele mucho pero me aguanto, después de todo el dibujo no es tan grande. Pasada una hora, ya está limpiando mi tatuaje y dándome indicaciones de c&o
A las nueve de la noche me va a dejar a mi departamento, aunque lo convenzo de que se quede conmigo por lo que va por ropa a su casa. Al entrar veo a Nefertari sentada en el sillón y cuando me ve se levanta a saludarme. Cómo puede eso sí, porque esa panza de siete meses ya le pesa. Le queda solo esta semana y ya comienza su licencia.— ¡Hola Aurora! ¿Cómo te fue?, ¿Dónde está Ulises? — Yo me río ¡como extrañaba a esta cotilla!— Hola Fer, todo fue estupendo. Siéntate y te doy los detalles. Ulises fue a por ropa y vuelve — La hago sentarse y le comienzo a contar todo, omitiendo ciertos detalles. Nefertari se escandaliza por todo y creo también que el tema de cómo jugamos anoche es íntimo.Veinte minutos después y luego de que Nefertari igual se escandalizara un poco, llega Ulises. La saluda y le regal
Vamos a su casa a dejar el auto y luego salimos a caminar un rato. Llegamos hasta un lugar donde hay una fuente de agua que en las noches prende luces, según lo que me cuenta Ulises. Más allá hay una especie de mercadillo y vamos a dar una vuelta. Al llegar veo que hay hartos puestos y muchos son de artesanía. Vamos mirando cada cosa que tienen hasta que me detuve en uno que abundan las joyas de resina ¡Que belleza! Pregunto el precio por un collar en particular que es un corazón en tonos azules y turquesas con una patita de gato en el medio en color dorado, pero al preguntar el precio… decido que más adelante me lo compraría. Entre la licencia de Nefertari, las compras para su bebé y yo, hemos tenido que reducir la cantidad de dinero de las cuotas que le estamos pagando a mi hermano. Además tampoco quiero pedírselo a Ulises, así que lo hago seguir caminando ante
“Qué difícil es ser mujer… ¡Somos todas unas guerreras!”Miro el reloj por quinta vez. Son recién las ocho de la mañana y estoy despierta desde hace una hora. Los cólicos me habían despertado y a pesar de que me he tomado dos calmantes, el dolor apenas ha cesado. He estado tirada en el sofá tapada con una manta y un guatero en mi abdomen. Hace dos meses que no me llegaba la regla, la verdad es que ni preocupada estaba porque… ya saben… estéril. Para sumar a mi desgracia, mi periodo es irregular y se controla solo. Me avisaba que se presentaría con un terrible dolor y ya está. Miro el televisor y me doy cuenta que no he tomado mucho asunto a la película que están pasando, mis quejidos apenas me dejan concentrarme.Cuando Nefertari se levanta, el dolor ya ha disminuido un poco. Aunque para que no vuelva nuevamente, sigo acosta
Prólogo Dicen que las cosas siempre pasan por algún motivo en particular y que el destino ya está escrito desde el día en que naciste. Cuando mis padres se fueron de vacaciones a Italia, mi hermano y yo por distintos motivos no pudimos acompañarlos. Por eso, en el momento que salió en televisión el avión que había caído al mar y que nadie había sobrevivido, junto a la llamada que nos avisó sobre la defunción de nuestros progenitores, con Fermín comprendimos a la perfección aquellas palabras. Nuestro momento aún no debía llegar. Sufrimos mucho, pero él decidió huir del dolor que nos provocaba seguir viviendo en nuestra casa en Barcelona y se fue a Chile, en donde consiguió un buen trabajo, gracias a la carta de recomendación que le hicieron en el psiqui
“Si a tu novio no le gustas tal cual eres… ¡Aléjate de ahí!“Las luces encandilan un poco mi vista, pero sigo caminando y observando el rostro de las personas. Todas se ven alegres y satisfechas con el excelente trabajo que hemos hecho.Estoy en la gala por el exitazo que fue la película en la cual fui protagonista. Las personas a mí alrededor me felicitan y abrazan por mi excelente trabajo. Esta película es la que me colocó en la lista de mejores actrices del país. El problema es que no conozco a casi nadie aquí, pero ellos dicen conocerme. Yo solo sonrío, hasta que diviso en uno de los rincones a un hombre alto y bien vestido, su rostro no lo puedo ver muy bien, no obstante, noto sus grandiosos ojos azul zafiro. Tienen un bri