Nos acercamos más y nos damos cuenta que la puerta de la oficina de donde provienen los gritos, está abierta. Miramos por la ventana y se muestra ante nosotras la imagen más escalofriante que hemos visto en nuestra vida. La chica de los volantes completamente desnuda y un hombre asqueroso semi desnudo abusando de ella mientras que mi ex novio la tiene amarrada de las muñecas y la manosea. Contenemos un grito y las ganas de vomitar, Emily saca su gas pimienta que siempre maneja en su bolso y yo hago lo mismo, mientras Chloe sigue grabando tan solo los sonidos. Nos armamos de valor y pateamos la puerta, ambos nos quedan mirando sorprendidos, el hombre asqueroso trata de golpear a Emily pero ella le lanza spray a los ojos varias veces y él se lleva las manos a la cara, ella aprovecha para golpearlo en las partes bajas, mientras yo me encargo de Lucas haciendo algo parecido, solo que le doy un par de patadas más en distintas partes del cuerpo, con mucha rabia para que sienta algo de lo que sentí yo.
Miro a sus ojos a través del espejo retrovisor y me duele que su mirada esté apagada. Sin conocernos de nada está aceptando viajar al otro lado del globo. Una energía inexplicable me dice que debo ayudarla, que debo confiar en ella, que esta es una gran decisión.
Cambiamos el rumbo y nos dirigimos a comprar algo de ropa, por suerte tenemos dinero para ayudarla, y aunque tuviéramos poco, nos importa más ayudar a esta chica que cualquier otra cosa. Pasada una hora, partimos rumbo al hospital para que revisen a Nefertari, es importante para después dirigirnos a la policía. A pesar de haber alertado a los guardias en el acuario, tenemos que hacer la denuncia formal o ambos saldrán libres a las horas.
Devuelta a mi apartamento vamos en un total silencio, aún estamos choqueadas con lo que presenciamos. Le doy varias miradas fugaces a la chica, es muy linda, tiene un cabello castaño oscuro precioso y largo, junto a unos ojos color miel que resaltan con su piel ligeramente morena ¡Pobre chica! Me da lástima y siento la necesidad de ayudarla, está sola, nos ha contado que su madre era una drogadicta que la dejó en un hogar cuando ella tenía solo cinco años, y de su padre jamás supo algo, solo quiere comenzar una nueva vida, por eso ha aceptado venir conmigo a Chile. Tuvo unos padres adoptivos durante muchos años, pero lamentablemente fallecieron hace un par de meses y ella quedó completamente sola, sin dinero y en la calle. Según lo que me comentó ella es chilena y llegó a Barcelona hace ocho años con sus padres adoptivos. No la conozco de nada pero quiero ayudarla y así también nos haremos compañía mutuamente.
Al llegar vemos a Tomás fuera esperándonos, lo saludamos y entramos. Junto a Emily comenzamos a armar una maleta con la ropa y cosas que compramos para la chica, mientras Nefertari y Chloe están con Tomás terminando de hacer los documentos, él tiene muchas movidas para hacer eso, conoce mucha gente, es un experto. Al cabo de una hora tenemos todo listo, compro dos boletos de avión por internet. De favor les pido a las chicas que vendan mi apartamento, de seguro no les será difícil hacerlo, debido a que está ubicado en una zona muy concurrida y llena de tiendas y escuelas a los alrededores, también les encargo mi coche y que me manden el dinero de ello, cualquier cosa les he dejado el papeleo correspondiente para la venta. Necesitaré el dinero, ya que, no tendré trabajo allá y quizás cuanto me cueste conseguir alguno, solo sé que tendré un lugar donde vivir, pero tampoco puedo depender de mi hermano siempre, lo conozco y estoy segura que en alguna discusión futura me lo echara en cara; por eso, apenas tenga un trabajo estable le devolveré todo lo que ha gastado en mí, además me ha quedado algo de dinero para sobrevivir en Chile, gracias a la herencia de mis padres.
Por hoy nos quedaremos en casa de Chloe. Allá no me buscará Lucas y estaremos seguras hasta mañana. He comprado boletos para la noche de mañana, tristemente no he encontrado antes. La chica apenas ha dicho palabra alguna, solo ha llorado y dado gracias. Entre las chicas intentamos darle su espacio y a la vez apoyo emocional. Necesitará un especialista cuando lleguemos a Chile. La chica trae muchos traumas consigo y creo que le hará bien. Yo he estado en tratamiento psicológico todos estos meses y me ha hecho sentir renovada. Solo espero que ambas iniciemos una nueva vida y dejemos atrás muchas mierdas. No veo maldad alguna en ella, solo tristeza y se merece algo de alegría.
Al día siguiente terminamos de arreglar todo lo necesario para viajar. Estamos todas muy nerviosas y Nefertari sigue sin hablar mucho.
Entrada la tarde partimos rumbo al aeropuerto con las chicas y Tomás. Al llegar aparco el coche, con cabezas cabizbajas nos dirigimos adentro. Cuando llegamos entregamos nuestras maletas, para luego comenzar la parte más difícil de todo esto: despedirme de mis amigas.
Me da un beso en la frente, pero para hacer más emocionante esta despedida, lo agarro y le planto un beso en los labios como señal de despedida, algo fugaz, pero un beso al fin y al cabo Él me mira sorprendido e intenta darme otro pero lo detengo, quizás si me terminó gustando este chico estos últimos meses, fue un gran apoyo para mí pero me voy y no quiero volver a España, no digo que nunca, pues aquí están muchos de mis amigos, pero de verdad quiero dejar atrás estos veintitrés años en este país y comenzar desde cero, además tampoco quiero una relación seria por ahora y mucho menos a distancia.
Subimos al avión y antes de que despegue llamo a mi hermano:
— Hola gruñón, adivina que… he decidido aceptar tu oferta, estoy en un avión a punto de despegar hacia Chile, voy con una amiga ¿Podéis ir a buscarnos al aeropuerto cuando lleguemos? — Me pregunta que qué amiga y solo le respondo que es una larga historia, la chica solo me observa atenta a mis palabras, sé que en su corazón tiene un dolor inmenso y no lo ha dejado salir, siento que aún está en shock, hoy apenas ha llorado, pero yo la ayudaré en lo que sea necesario, por eso he hecho esta locura de llevármela a Chile sin siquiera conocerla, sin saber sus mañas, si es una ladrona, una estafadora, simplemente confío en que es una buena persona, porque así se ve, y ella aceptó esto también. — El avión despegará a las diez de la noche aproximadamente, por lo que calculo, llegaremos tipo doce de la media noche de allá, un poco más quizás…¡Me da igual que tengáis que trabajar! — Menudo idiota este — Vais a ir a buscarnos igual, además no seas mentiroso, que no soy idiota, sé el cambio de horario y llegaremos de noche ¡Joder! ¡Que tú eres psiquiatra! ¿Cómo que qué tiene que ver? ¡Pues que solo trabajáis de día! …está bien, así me gusta, nos vemos hermanito — Corto la llamada, debido a que estamos a punto de despegar, apago mi móvil y Nefertari me mira como si quisiera preguntarme algo — ¿Qué pasa?
Ella me mira en espera de que continúe, lo cual hago, le comienzo a relatar mi historia desde cero, desde de las chicas, mis padres, pasando por Tomás, Lucas y sus maltratos, de lo ciega que estuve, de que ya no puedo tener bebés, que tengo dos costillas un poco débiles, y finalizando con que no me siento preparada para una relación seria. Así voy durante casi todo el viaje hasta que el sueño nos vence.
“Empezar desde cero a veces puede ser lo mejor” Cuando llegamos al aeropuerto de Santiago de Chile, con Nefertari intercambiamos miradas y reparamos en las horribles ojeras que traemos y a eso sumado con un dolor de espalda, concluimos en que: dormir en el avión nos ha hecho fatal. Finalmente el avión aterriza. Mi estómago se aprieta por las emociones que comienzo a sentir. Estoy lejos de España por primera vez en años y espero no volver durante un buen tiempo.Descendemos y nos vamos en busca de nuestras maletas. Tardan algunos minutos en salir, hasta que cuando las divisamos, rápidamente las cogemos y nos vamos. A la salida ya está esperándonos mi querido hermano, bueno, ahora será nuestro hermano, que nos sonríe a medias y puedo ver que
Al salir vamos directamente al departamento de al lado pero no sale nadie cuando tocamos el timbre, estamos durante varios minutos esperando y cuando ya estamos por rendirnos, sale una chica del departamento de al frente, es una chica de tez trigueña con cabello oscuro como la noche al igual que sus ojos, que se nos queda mirando.— ¿Buscan a alguien? — Nos pregunta curiosa y un poco recelosa.— Hola, si, busco a mi hermano Fermín, y no me puedo comunicar con él por móvil debido a que llegue anoche a Chile y pues acá no sirve — Le explico y ella al parecer se le prende el foco.— ¡Ah, sí! ¿Tú debes ser Aurora, verdad? Y tu Nefertari. Su hermano me contó algo anoche y hoy en la mañana temprano. Soy Eliana, mucho gusto, soy amiga y vecina de tu hermano — Me extiende la mano y yo se la doy mientras sonre&ia
Poco más tarde nos vamos a dormir, estoy tan cansada que no me cuesta nada quedarme dormida.Al día siguiente me levanto de buen ánimo, le doy más clases de cocina a Nefertari entre risas y chistes, concluida la clase me doy una ducha y me arreglo, quiero un cambio de look, así que, buscaré un buen salón de belleza. Estoy terminando de retocarme y luego antes de salir, suena el timbre, al abrir veo a Eliana con una linda sonrisa en su rostro.— Hola Aurora ¿Cómo estás? ¿y Nefertari? — Saluda y pregunta por mi nueva amiga.— Está vistiéndose, a la tarde la llevaré donde Fermín para atenderse — Le comento. — Yo estoy bien gracias — sonrío.— ¿Dónde Fermín?, ¿Le pasó algo?, ¿Se atenderá con su hermano? — ¡Qu&e
Jimmy pasa a buscarnos en su auto. Nefertari ha venido con nosotros, hoy no tuvo hora con su psiquiatra y decidió acompañarnos. Se ve un poco más animada, eso me pone muy contenta a mí, aunque hay veces en que la escucho llorar por las noches. No sé de qué otra manera más puedo ayudarla, pues yo también estoy dañada. A esta chica cada vez le voy tomando más cariño, también la cuido de mi hermano, que en varias ocasiones ya la ha invitado a salir, al final siempre terminamos peleando con él, ¡Lo va a arruinar todo! Y solo por una calentura. Venga , que yo lo conozco muy bien y sé que le teme al compromiso y solo hará sufrir a esta chica, además sé que ella no se siente lista para tener una relación, está muy afectada emocionalmente, y yo solo quiero que esté bien consigo misma.— Chicos
Terminamos de almorzar y yo me ofrezco a lavar los trastes mientras ella se arregla para la cita con su psiquiatra, colega de “nuestro” hermano, que es igual de bueno que él.Mientras ella va, yo decido salir a comprar algunos chuches para el viernes, pues con Eliana y Nefertari lo hemos denominado “Viernes de películas”. Así que, me voy al supermercado, que queda a varias cuadras de acá, la larga caminata me permite despejar la mente para mañana. Podría ir a tomar un taxi o algo, pero como no tengo qué más hacer, decido estirar las piernas - tomo nota de comprarme una bicicleta -.Al ir caminando diviso un gimnasio, en mi edificio no hay, y como no quiero dejar el ejercicio decido entrar para inscribirme. Aunque la mensualidad no es poca, con algunas miradas y batir de pestañas logro un descuento, lo cual también me ha costado mi número telefónico
“El arte es la mejor forma de manifestar nuestros sentimientos de distintas maneras” Me giro a observar a Camilo, está sumido en sus pensamientos, creo que está avergonzado por lo que pudo escuchar Nefertari. Llamo su atención diciéndole que mañana hagamos como si nada ha pasado, ningún comentario al respecto y que por favor ahora se retire. Se despide y entra rápidamente a su departamento. Yo suelto el aire que no me había dado cuenta que retenía. Abro la puerta, entro directamente dirigiéndome a mi habitación, no quiero un interrogatorio por parte de mi compañera de departamento. Me doy una ducha y luego me coloco un pijama. Me tenía que sacar el mal polvo del cuerpo. Minutos después, Nefertari golpea la puerta de mi habitación y le indico que puede entrar. — ¿Aurora?, ¿Qué ha pasado con Camilo? — Se sienta en mi cama y empieza a jugar con su cabello. — ... que hemos follado, pero ha sido el peor
Continuamos ensayando por una hora más. Vamos a los camarines a cambiarnos y al salir veo al bombón arrogante, apoyado en la pared.— Tiene hartos amigos señorita Espósito, se ve que es una persona muy simpática ¿Por qué conmigo no es así? — Me observa y puedo notar en su mirada ¿Tristeza, tal vez? , yo lo miro sorprendida pero haciendo lo mismo que él hizo hace una hora, cambio mi cara a una totalmente seria.— No soy amiga de hombres arrogantes y con constantes cambios de humor…me choca tu bipolaridad — Me doy la media vuelta y comienzo a caminar, pero él me detiene.— Me agrada tu actitud, no todos se atreven a decirme bipolar… bueno, que tengas bella tarde “Pecas” — Me quedo de piedra, se acerca a darme un beso en la mejilla y se retira. Si hubiese sido cualquier otro, le habría est
“Tu cuerpo… tu decisión”Luego de ese viernes, a Nefertari le vinieron más síntomas que nos hicieron sospechar sobre su estado: mareos, antojos, desmayos, etcétera. Finalmente por decisión de la misma chica, nos sinceramos con Eliana y le contamos todo lo sucedido en España, absolutamente todo, por lo que, pedimos que no contara aquello a nadie, es un tema muy delicado. Omitimos algunas cosas, pero sólo fueron ciertos detalles. Eliana estuvo en shock por media hora y el otro resto de hora se lo pasó llorando y abrazándonos. Nuestra historia le afectó muchísimo y ofreció su ayuda para todo lo que necesitáramos, además de su absoluta discreción. Ahora a