Capítulo 22

Georgina

Sé que está incómodo recostado al árbol, pero no ha querido moverse ni soltarme. Me gusta así. Llevamos un largo rato hablando, sobre todo de mi vida aquí, las partes buenas fueron las que me pidió especialmente, lo que fue muy difícil. Logré recordar la primera vez que mamá tomó mi mano y me llevó a su jardín, me dio una pala y sembré mi primera flor, una semilla de tulipán que cuidé cada día, ayudada por ella. Fue tan difícil y frustrante, pero mamá fue tan dulce y dócil que me fue inevitable dejar salir algunas lágrimas al recordar algo que tenía tan guardado en mi memoria.

Esos tulipanes aún están allí, al lado de las dalias de mi madre.

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP