Capítulo 3: Misterio

Mi mente es un caos, no sé dónde me encuentro, pero, si sé que estoy atormentada por todo lo que descubrí antes de desmayarme, sin embargo, por mucho que lo piense, Ninguna solución donde no termine hecha pedazos se me ocurre.

Así que, una luz aparece en medio de mi oscuridad y yo despierto en la misma habitación donde me desmayé, sin tener aun una solución al problema en el que ciegamente caminé como si supiera como lidiar con algo así.

— Ha desertado mi dulce cuñada, ¿Qué tal estuvo tu sueño? — pregunta Nick frente a mí con un pantalón de pijama sin ropa interior, porque puedo ver perfectamente su cada vena en su polla.

El pecho desnudo y sudado, me dice que no ha estado mucho tiempo sentado en la silla frente a mí, pero, aunque sea un segundo el que haya estado así, me siento malditamente mal.

De inmediato, miro debajo de las sábanas y noto que además de estar limpia, tengo una camisa de Nick como ropa. Algo que lógicamente no tenía y a juzgar por lo atrevido que son los gemelos, él habría hecho sin ayuda de alguien.

— ¿Qué me hiciste? — pregunto molesta.

— Sabes lo que te hice, estabas consciente cuando lo realicé, pero, si no lo recuerdas, puedo refrescarte la memoria. — dice Nick.

— No hablo de eso, ¿Qué me hiciste cuando no estaba consciente?

— Limpiar tu lindo cuerpo, colocarte un poco de ropa y cubrirte después de colocarte sobre mi cama. Marcela, quiero que sepas que no cambiaré esas sábanas para que cada vez que entres a mi habitación, recuerdes que dormiste aquí, cuñada.

Molesta, me levanto de la cama y busco a mi alrededor mi ropa, pero, lo que estoy buscando se muestra en la mano de Nick que lleva a su rostro.

— Hueles bien, cuñada. — dice Nick.

— ¡¿Estás loco?! — grito y Nick da un solo salto, para quedar cerca de mí que cubre mi boca con su mano.

— No grites, cuñada, mi hermano aún no sabe que estás aquí y como sabes, su habitación está al lado de esta. — dice Nick.

— ¿Por qué hacen esto? Ya jugaste conmigo, así que, déjame ir.

— No, Marcela. ¿Cómo podría dejarte ir si la probadita que me diste anoche solo me hizo querer comerte hasta que termine saciado?

Molesta, levanto la mano para golpearlo, pero, él anticipa mis movimientos y por eso, toma mi mano en el aire, para posteriormente alejar su mano de mi boda y darme un beso que me enoja tanto que termino mordiéndolo y es así como se aparta.

— Vaya, eres salvaje. Me gusta. — dice Nick.

— ¡Son unos malnacidos los dos! — grito enojada, mientras lloro.

— Lo somos, Marcela, pero, también somos jodidamente buenos en lo que hacemos. Bueno, Noah es mejor que yo, ya que, tiene más experiencia. Por eso, debes hacerte cargo de mí, después de todo, eres mi primera mujer. — dice Nick sonriendo y yo comienzo a carcajearme.

El chiste es tan bueno, que por breves segundos olvido lo que me está sucediendo y me burlo del descaro de Nick al decir que soy su primera mujer.

— Me alegra mucho que estes tan feliz después de tenerme en tu interior. — dice Nick. 

— ¡Los dos son unos malnacidos, pero, esto lo pagaran! — digo levantándome de la cama, corriendo hacia la puerta, pero, antes de abrir la puerta, el hombre que no debí tener cerca, me abraza y deja un beso en mi cuello, que me hace sentir extraña.

— Ten una buen regreso a casa, cuñada.

De inmediato, golpeo su pecho duro y me marcho de inmediato, dejando atrás la habitación donde nunca debí entrar, mientras, veo como varios chicos duermen en el suelo o sobre los muebles, en una posición bastante incómoda.

Para mi fortuna, no me encuentro a nadie de esta retorcida familia y es por eso, que puedo marcharme rápido lejos de esa casa donde nunca debí estar. Tomando un taxi, me marcho hasta mi casa, donde lloro como una tonta que no se dio cuenta de que ser la novia de uno de los gemelos Thompson no era buena idea.

— Me han visto como una tonta y yo terminé en su trampa de una forma tan tonta que quiero golpearme. — digo molesta.

Durante horas, lloro, pero, eso no calma el enojo que siento ahora y por eso, debo irme a trabajar aunque no me sienta bien. Después de todo, ni puedo retrasar las grabaciones porque mi novio jugó conmigo.

— Señorita Leonardi, he llegado. Debemos ir al set de grabaciones.

— Por favor, dime que no tengo alguna grabación con alguno de los gemelos Thompson. — digo molesta.

— Eh… tendría que mirar el libreto.

— Solo a mí se me ocurre creerle a un actor. — digo molesta.

— ¿Sucedió algo?

— Nada. Solo… me di cuenta de que es lo que pasa realmente. — digo seriamente.

Mi mánager me lleva al set y yo noto que además de los actores, también había personas del staff en la fiesta, porque todos parecen tener resaca.

— ¡Hola, Marcela, me alegra mucho que hayas venido! ¡Todo aquí es un caos por la fiesta de los hermanos Thompson! Así que, para no atrasarnos, grabaremos tus escenas.

— Está bien para mí.

— Pueden grabar también las mías, yo estoy perfectamente bien. — dice alguien que hace que mi respiración se corte.

— Hola, señor Thompson, ¿es Nick o Noah?

— Noah. — dice él sonriendo y yo siento un poco de alivio.

Pero, rápidamente me acuerdo de lo que ha hecho y por eso, me marcho antes de que tenga que saludarlo fingiendo que todo está bien, por el buen del ambiente laboral.

— Marcela, espera un momento. — dice Noah, pero, yo ignoro su llamado, cerrando la puerta detrás de mí.

— No puedo creer lo descarado que es. Seguramente, su hermano ya le dijo todo y él finge que todo está bien. — digo vistiéndome para grabar.

Pero, apenas salgo perfectamente vestida, me encuentro con un sonriente hombre que me empuja hacia el interior de mi camerino y cierra la puerta detrás de él.

— ¡No me molestes, Noah! — grito molesta.

— Oh, sigues confundiéndome con mi hermano después de tomarme por completo. Eso es triste.

— ¡¿Nick?! — pregunto y antes de él responder, se escucha un disparo.

— ¡Maldición, llegaron antes! — dice Nick sacando un arma para apuntar a la puerta.

— ¿Qué…?

— Lo siento, pero, ahora no puedo explicarte. — dice Nick presionando algo en su collar, para posteriormente, lanzar un dardo que hace que mi cuerpo se debilite y mis ojos se cierren.

Oh, no.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo