Hoy se cumplen dos años de que se le dictó auto de formal procesamiento y prisión de por vida al tío de José Luis. Pero, debido a su enfermedad y por la pírrica atención médica recibida en la cárcel, él murió hace dos meses. Antes de fallecer, les pidió a las autoridades un último deseo, que le permitieran comunicarse con su sobrino José Luis. Pero este, se rehusó a atenderlo, él aún estaba dolido y había jurado no perdonarlo nunca. Sin embargo, en su momento de agonía su deseo se le cumplió, José Luis, llegó a verlo a la clínica en donde estaba pasando sus últimas horas de vida. Él no quería hacerlo, por todo el odio que en su corazón le guarda, pero se le había olvidado que estaba casado con la mujer más bondadosa del mundo, esa que a pesar de todo lo que tuvieron que pasar por culpa de ese malvado tío, ella le pidió a su marido que atendiera el llamado del moribundo, pues así todos tendrían paz en sus corazones. El hombre lloró al ver que su sobrino finalmente llegó, él le pidió
— ¡Eres una cualquiera que se anda revolcando con todo lo que se te cruce por enfrente! ¿Acaso no tienes un poco de vergüenza por ti misma? —gruñó el hombre sin importar lo dolorosas que fueran sus palabras.—¿Pero de qué hablas José Luis? —Yo nada más te tengo a ti.—Ja, ja, ja, haré que pagues tus engaños, además de que tu familia asesinó a mis padres, tú te atreves a faltarme el respeto al acostarte con otro hombre siendo mi esposa. ¡Qué descaro!, pero a partir de este día sabrás quien soy yo y tendrás que pagar muy caro todo lo que me debes....— Amiga levántate de esa cama y ponte guapa porque nos vamos de rumba. —Le alentó Yeni a su amiga Clara Isabel.— ¡Ay no! Hoy no iré porque no tengo nada de ganas de salir y mucho menos a una fiesta. —Le respondió Clara. Y es cierto que en ese momento ella no tiene ánimos ni para moverse en la cama y mucho menos para ir a bailar, su novio la ha traicionado, motivo por el cual ella se encuentra desilusionada y sin ganas de vivir.— Clara Is
Antes de que los chicos se dieran por vencidos y optaran por retirarse, escucharon la mejor respuesta de la noche. — Por supuesto que sí pueden acompañarnos caballeros. —Volvió a decir la primera chica, mientras que la otra joven la voltea a ver con una mirada asesina, pero su amiga no le hizo caso y de inmediato tomó de la mano a Alberto y lo haló hasta la pista de baile, mientras que José Luis se quedó de pie frente a la chica tímida.— ¿Bailamos?. —Le consultó un poco temeroso de que ella le diga que no y lo deje en total vergüenza.— Claro, por qué no, si aquí he venido para divertirme-. —Dijo ella con una sonrisa.— Madre mía, pero qué lindo sonríe esta mujer que hasta a mí me contagió. —Pensó en su mente. —La tomó de la mano y se fueron para la pista de baile a mover el esqueleto por un rato.— ¿Cómo te llamas? —Quiso saber el apuesto hombre, acercándose a su oído cuando ya llevaban un rato bailando una canción pegajosa.— Me llamo Clara Isabel.— ¡Guao!, que bonito nombre igual
— Este día estaría de cumpleaños mi padre, pero por esos malditos que le arrebataron la vida, él ahora ya no puede celebrarlo. —Le comentó el joven José Luis a su amigo, en tono de melancolía.— Estoy seguro de que en cualquier lugar que él se encuentre celebrará este día, no como lo hacía cuando estaba aquí en la tierra contigo, pero ten por seguro de que lo disfrutará. — Le respondió su amigo muy triste, ya que a él también le dolió la muerte de los señores.— Aún recuerdo como si hubiese sido ayer cuando mi tío me dio la noticia de que mis padres habían muerto, yo pensé en ese momento que habían tenido un accidente en el auto, pero mi tío me explicó que los habían asesinado con arma de fuego.— Sí, recuerdo que ese día tenías examen en el instituto y por eso no te llevaron a ese viaje con ellos y te quedaste en casa de mis padres.— Hubiese preferido irme con ellos, aún no entiendo por qué no me quisieron llevar, en vez de decidir dejarme donde tus padres, de haber sido así, yo no
Cierto día José Luis le preguntó a su amigo que cómo va su relación con aquella chica, este le comentó que por el momento están peleados porque en una ocasión, ella le revisó su celular y le encontró mensajes de texto recientes de varias chicas que le han estado escribiendo para solicitar verlo y salir a divertirse.—Joder hermano, pues si a ti ya te descubrieron significa que mi novia no tarda en sospechar de que yo también la estoy engañando. —José Luis ahora está preocupado de que su chica también le descubra sus múltiples infidelidades.— Pero mi chica me ha dicho que su amiga no sabe que ella y yo estamos saliendo como pareja.— Qué raro, porque Clara Isabel tampoco me ha comentado nada acerca de su amiga y tú. —ellos están extrañados porque las chicas al parecer no son tan íntimas como lo son ellos.— Bueno hermano, entonces no tienes por qué preocuparte, ellas aún no se han contado entre sí de que están saliendo con nosotros. Por lo tanto, ella no le contará a tu chica que hemo
Clara Isabel siguió con su vida normal, nunca le hizo saber a su amiga Yeni, sobre la vergüenza que tuvo que pasar al casarse y ser rechazada al día siguiente por el idiota que conoció en aquella fiesta.Entre dos meses Clara Isabel saldrá de vacaciones, ya que se termina el periodo en la universidad, luego vienen las fiestas navideñas, para ese entonces José Luis deberá de casarse con su novia, una chica a la cual no ama, pero que su tío le está obligando a que se case con ella, porque según él, le hará bien a sus empresas con la alianza entre ambas familias.El joven Alberto y Yeni siguen con su relación de novios, hasta el momento ninguno de los dos ha hablado sobre sus amigos.En el transcurso de esos dos meses, Clara Isabel descubre que está embarazada y decide no contárselo a su amiga y seguir trabajando y estudiando duro para sacar a su hijo adelante, pero las cosas se le complican cuando un día a su universidad llega José Luis a buscarla y la obliga a que se vaya a vivir con é
José Luis salió de la casa y regresó a la ciudad, le dijo a su novia que la verá en unas horas y que la llevará a un lugar para presentarle a alguien. Cuando salió de trabajar se fue a su casa y sacó varios trajes de ropa, los cuales necesitará durante el tiempo que se quede con su esposa, y este dependerá de cuanto se esté de vacaciones en el extranjero su abogado, pues quiere que él mismo arregle el bendito cagadal que formó.Luego pasó por su novia y la llevó a cenar como han quedado para luego trasladarse al lugar que le prometió. La chica está feliz porque a pesar de que ha ocurrido el incidente, ella confía en su novio y le cree que él no se ha casado por voluntad propia y que ni recuerda nada de ese momento.Mientras tanto, en el apartamento, Clara Isabel, se siente un poco contenta porque se imagina que si ese hombre decidió recogerla, es porque piensa formalizar su matrimonio y eso es una ventaja para ella porque su bebé nacerá dentro del seno familiar conformado por ambos pa
Esa noche a Clara Isabel le tocó que dormir en un pequeño sofá que está en la sala, sin siquiera usar una sábana porque no quería ir a buscar una a la habitación donde su esposo está durmiendo con la amante, se quedó solamente con su ropa que anduvo puesta durante el día, que consta de un pantalón y una blusa manga larga, por fortuna ese atuendo le ayudó a no quedar tan descubierta.Pero aun así, el frío abrazador de la madrugada le pegó fuerte y por más que ella se enrollara en el sofá, siempre temblaba por lo helado. Mientras que su esposo, duerme muy calentito en una cama al lado de su amante.— Este idiota nunca se va a dar cuenta de que estoy embarazada, jamás sabrá que será papá ¡Lo juro por mi vida! —Dice Clara Isabel, mientras llora y se lamenta por haber sido tan bruta al enamorarse perdidamente de este hombre que la llevó a la luna con sus mentiras y luego la dejó caer de un solo golpe.Por la mañana ella se despertó un poco tarde porque hacía poco se había vuelto a dormir p