Regresamos a casa luego de llevar a cabo nuestro plan. Gabriela está muy afectada, Alex le ha dejado claro que no quiere nada con ella.
-No puedo dejar de pensar en sus ojos, me miró con tanto odio, no puedo creer que la ame tanto como para salir detrás de ella de esa manera. Nunca lo hizo por mí, ni siquiera me rogó que me quedara con él cuando decidí irme de viaje.
-Pero al menos los hemos separado. Pía salió hecha una furia, ni siquiera quiso hablar con él según me contaste. Si es así, Alex está perdido. Conseguimos lo que queríamos.
-Yo no, lo quiero para mí o para nadie.
Se hace el silencio, me gustaría ayudar a mi hermana en su sufrimiento, pero qué
Nuevamente los suaves golpes a mi puerta me despertaron, que sean esos hermosos ojos lo primero en ver es mejor que un desayuno de campeones.Bajé con mucho ánimo para encontrarla en la cocina preparando un batido de frutas y avena, pan recién hecho, el que trae uno de los chicos de Magaly.Daniela no se da cuenta de mi presencia, tiene puestos los audífonos y canta con su angelical voz una canción que no reconozco.-“Que sin ti es mejor, aunque al principio no. Me perdí apenas te vi, siempre me hiciste, como quisiste…” – se gira, da un salto por el susto y se saca los auriculares-. Me asustaste, el desayuno ya está, solo somos los dos. José ya se fue y Gabriela sigue durmiendo, tuve que darle un calmante anoche – me m
Tras varios días, ha llegado nuevamente Magaly. Se encerró a hablar con Daniela en su habitación, allí estuvieron casi dos horas.Luego de eso, fue a ver a Gabriela, que ya se encuentra más repuesta y me llevó de compras a una tienda de bebés, al terminar me obligó a visitar a Camila, quien ya tiene un vientre que se nota.Al llegar ese día, Daniela volvió a tratarme con cierta distancia, no sé si por algo que le dijera Magaly o porque Gabriela le dijo a lo que habíamos salido. Sea cual sea la razón, siento una inquietud en mi pecho, no tener esa leve cercanía con mi pequeño ángel me tiene muy mal.Hoy, solo me ha tocado la puerta y me ha dicho que el desayuno estaba listo, sin abrir siquiera la puerta. Si
Me encuentro encerrado en mi habitación, ha pasado casi un mes desde la audiencia preparatoria. Hoy deberíamos tener la mediación, un punto que establece la ley para saber si es posible salvar el matrimonio.Una reverenda estupidez, Pía no quiere saber nada de mí. Es por eso que le he dado la representación a mi abogado, no quiero verla.Seguramente la vería hermosa, radiante por el amor y su embarazo. Y verla así, tan joven y llena de vida sería insoportable para mi corazón.Está amaneciendo, llaman a la puerta y no respondo, como la última semana. Sin desayuno, casi sin almuerzo y mucho menos cena. Ahora con mayor razón, ya que Magaly se ha ido hace tres días, José se fue a un proyecto fuera de la regi&oa
Estoy con Daniela estudiando en la sala, Gabriela se encuentra en su habitación después de un día de trabajo, estamos concentrados en una de las últimas asignaturas, enfermería de urgencia. Con esta termina su semestre y debe prepararse para su internado y proyecto de investigación.Escuchamos unos ruidos extraños fuera de la casa, hombres gritando, autos parando en seco y se abre la reja de la casa. Nos paramos de inmediato, vemos a través de la ventana. Antes de que entienda lo que sucede, Daniela ya está abriendo la puerta y corriendo hacia mi hermana.Magaly viene apoyada en los hombros de El Chato y Pepito, sus dos apoyos en sus andadas. La veo herida en el costado izquierdo, salgo disparado hacia ellos, no sé de dónde saco fuerzas, la tomo en mis brazos y mando a Daniela a
Es el llamado número cuatro de Camila.Me he dado el lujo de no responder, porque Daniela no está en casa, salió sin decir a dónde, lo que me hace sentir fatal.¿Y si tuvo una cita?Solo espero que llegue luego, porque mientras más se demora me hace pensar que se reunió con otro hombre. Es una mujer especial, se nota nada más verla, el que no lo haga es un ciego de primera.La única razón de no luchar por ella es la amenaza de Magaly.¡Mentira!La razón es saber que no soy hombre digno de ella.Una quinta vez y decido responderle a Camila.
Tengo dos meses recluido en mi habitación, Daniela se acerca a despertarme, me trae el desayuno a la cama, porque no soy capaz de levantarme. Las ventanas están cubiertas por cortinas oscuras y solo permito ingresar a Gabriela cuando reemplaza a mi pequeño ángel.Estoy sumido en una depresión terrible. Magaly intentó sacarme, pero no pudo conseguirlo de ninguna manera.Luego de despedir a Camila y a mi hijo, no volví a ver la calle. El dolor se instaló en mi pecho como una constante. Me ha crecido el cabello, la barba, he descuidado mi apariencia totalmente.Llaman a la puerta, no sé qué hora es. Ya no sé cuando es de día o de noche. Sin esperar a que hable, se asoma ella con su sonrisa llena de esperanza. El último mes mi pequeño ángel ha batallado conmigo cada día, sin dejarse abatir por mi pena. Lo único que logró es que volviera a bañarme cada día, abrir la ventana y comer en mi habitación. Esto último a medias, porque el dolor no me deja pasar bocado.Antes de salir hoy por la mañana me dio una abrazo y me deseó suerte. El Chato me esperaba en uno de los autos de Magaly para llevarme, mi hermana no se encuentra en la ciudad.Gabriela me envió un mensaje desde su trabajo para darme ánimo y decirme que si tenía la oportunidad de darle un puñetazo en la cara a Alex, que lo hiciera.Eso me hizo sonreír, considerando que cuando lo intenté, ella se llevó un susto enorme y no me dejóCapítulo 21: El divorcio
Día tras día la manera de iniciar mi día es el mismo: escuchar la puerta, escuchar su voz, acercarse a despertarme y traer mi desayuno.Desde aquella noche en que la espié llorar, he hecho un esfuerzo enorme por no hacerle la vida más difícil. Aunque cada uno de estos meses han sido horribles, llenos de un dolor inmenso, solo ella ha inyectado luz a mi vida.Abro los ojos, fijando mi vista al techo de una vez. Se ha convertido en mi vista favorita, mientras analizo cada una de las etapas de mi vida, tratando de buscar el punto de quiebre entre el hombre que fui y el que soy ahora. Siempre llego a la muerte de mis padres adoptivos, eso me marcó totalmente, porque me creía al fin feliz, tendría un trabajo bueno con una familia que me amaba.Podría a