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CAPÍTULO 4 – Superando una vieja etapa.

CAPÍTULO 4 – Superando una vieja etapa.

Esperaba en el aeropuerto a ser llamada para el vuelo a España, había llegado demasiado temprano, pero el miedo que tenía a ser encontrada por el en casa no me traía tranquilidad.

Miraba hacia el suelo, mientras sentía que mi cuerpo temblaba al sentir una nueva punzada de dolor en mi corazón, de nuevo pensaba en él, en cuando había sentido que todo había sido una mentira, cuando había reconocido que tan sólo era alguien con quien perder su tiempo…

Caminaba hacia el comedor, donde había quedado con mi suegro para ir a la finca que tenían, allí era donde el hombre solía pasar la mayor parte del tiempo, plantando higos y tomates, lejos de su cruel y mandona esposa, y de su mangoneado hijo.

  • Madre, ¿por qué no dejas de importunarla? – Preguntaba Han Tae Sang hacia su madre en el estudio, la puerta estaba entre abierta. Aquello hizo que mi curiosidad se disparase y oyese una conversación que no debía.

  • No soporto que malgaste tu vida viviendo con una extranjera – le espetaba su madre, dejando claro que me odiaba, aunque eso era algo que yo ya sabía, ella nunca había ocultado su descontento hacia mí en indudables ocasiones.

  • ¿Por qué no dejas que viva mi vida a mi antojo?

  • Es que no acepto que contraigas matrimonio con una extranjera – volvía a insistir su madre, mientras yo la miraba con odio, siempre intentando alejarle de mí, pero él me quería ella nunca podría cambiar eso… nunca… pero entonces todo mi mundo se calló, pues el pronunciaba aquello que nunca creí llegar a escuchar de sus propios labios.

  • En ningún momento he dicho que vaya a contraer matrimonio con ella. Cuando llegue el momento elegiré bien.

Bajé la cabeza y entrelacé los dedos de una mano con los de la otra mientras dejaba escapar algunas lágrimas.

Por supuesto, yo era una extranjera, yo no merecía estar enamorada de un coreano.

Seguramente ella sería la otra, la chica de la fiesta sería la mujer del mensaje, pensaba mientras recordaba lo que había pasado en aquella fiesta…

Entré en la fiesta de inauguración, vestida con mis mejores galas, aún sin comprender que él no me hubiese esperado para asistir juntos. Pero no me importó, incluso había olvidado aquella conversación que había escuchado entre él y su madre, tan sólo sería un mal entendido, el no podía traicionarme de aquella manera, el me amaba tanto como yo a él, me aseguraba mientras entraba en el salón de celebraciones.

Lo busqué por todas partes, pero parecía imposible que el estuviese allí, no podía encontrarlo.

  • Señorita – comenzó un tipo de seguridad tras de mí - ¿tiene invitación?

  • Claro que la tengo – le espeté mientras le encontraba, allí frente a miles de personas se encontraba él, parecía que pronto daría un discurso – soy la novia de aquel tipo de allí.

  • ¿del presidente?

  • Si – admití, al percatarme de que él lo había conseguido, había llegado a presidente, después de todo lo que había luchado por conseguirlo. Sabía que eso sería lo primero por lo que le abrazaría, para darle la enhorabuena por tan buen premio.

  • Imposible, el presidente ya está ahí arriba con su novia – Aclaró, mientras yo miraba hacia Han Tae Sang con más atención, percatándome en que la mujer que se hallaba a su lado le agarraba del brazo, mientras sonreía a la prensa, y el parecía igual de feliz que ella. - Diga la verdad, quería colarse.

  • No se preocupe, conozco la salida – admití mientras caminaba con dificultad hacia el exterior.

Caminé hacia la puerta de embarque, con la mirada fija en ella, sin prestar real atención a nada más, tan sólo quería marcharme, recostarse sobre la butaca del avión y quedarme dormida, poder olvidarle, poder dejarle atrás, realmente lo deseaba con todo mi corazón.

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Al llegar al aeropuerto de barajas Marcos, mi hermano, y Luis, su mejor amigo, me esperaba allí con los brazos abiertos. Les abracé con fuerza mientras intentaba hacer verdaderos esfuerzos por no romper a llorar en sus brazos.

  • Lian no ha podido venir – me informaba mi hermano – está loca con los preparativos de la boda, estoy agradecido de que hayas venido, no sería lo mismo sin ti.

  • ¿cómo está papá? - Pregunté, ya que había sabido unos meses atrás que había sufrido un infarto al corazón, gracias a dios se había repuesto.

  • Él está bien, te extraña mucho, ya lo sabes. Lian está enfadada contigo

  • Lo sé, nosotras siempre peleamos, no es como nosotros.

  • ¿estás bien? – Preguntaba mi hermano mientras caminábamos hacia el coche – me enteré que te encontraste con Han Tae Sang en Nueva York.

  • ¿podemos no hablar de él? Estoy cansada

  • Claro, no importa, ya me lo contarás en otra ocasión.

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