Ese hombre me tiene toda enamorada de él. Accedí de inmediato a su petición, quiero convertirme en una adicta al sexo, pero a la vez ser una experta en cumplirle cada capricho a mi marido, así como él me lo cumple, todo tratándose dentro de lo normal en una pareja que se ama con locura.Me fui al otro extremo de la cama, quedando de piernas abiertas frente a él. Metí un dedo en mi boca y lo saboreé simulando que era su pene. Con el mismo dedo recorrí desde mis labios hasta llegar a mis pechos y rodeé cada aureola con saliva. Mientras yo lo hacía, él también se tocaba el miembro y, joder, eso me calentaba al millón.—Quiero que te masturbes usando esto. —Dijo, sacando de la gaveta un estuche que contenía un dildo, era más pequeño que su pene y yo sonreí.—Amo esa sonrisa pícara. —Expresó.Sin nunca haber usado una cosa como esa, no sabía cómo empezar, así que, improvisé recordando que en una ocasión vi un video donde una actriz lo utilizaba para su propio placer.Juro que al ingresarlo
Nadie sabe el motivo por el cual se suicidó el empresario más respetado del país. Ver a Andy llorar la muerte de su padre me quebró el alma. Dice que cuando él llegó a la mansión de su padre, ya la ambulancia estaba saliendo porque ya no se podía hacer nada en su caso porque ya no presentaba signos vitales.Cuenta que mi madre lloraba a gritos y decía que le advirtió que no tocara el arma porque podría suceder un accidente.Lo que no comprendemos es por qué a nosotros no se nos había informado nada al respecto. Quizá haya sido por lo pronto del caso.Dadas las circunstancias del pasado, Andy no estaba convencido de que hubiera sido un suicidio, así que, prefirió investigar a fondo el caso.Cuando yo llegué, iba saliendo el camión de la morgue con su cuerpo sin vida para realizarle la respectiva autopsia y comprobar lo que en realidad sucedió.—¡Qué haces aquí, regresa al hotel y no se muevan de allí hasta que yo se los pida!Andy me regañó cuando me vio llegar, sonó un poco duro, pero
El día más esperado para mi madre llegó. Y lo digo de esa manera porque sé que a ella lo único que le interesaba de mi padrastro era su dinero, puedo jurar que ella goza de felicidad a costillas de su último esposo.Yo no quería asistir a esa reunión familiar, pero Andy insistió en que lo acompañara. Entiendo que todo esto es un duro golpe para él y me necesita a su lado como apoyo emocional.Mi madre estaba vestida de negro, un vestido que le llegaba hasta el tobillo y una pañoleta en su cabeza que la hacía ver como una distinguida señora de la alta alcurnia.Nuestro hijo corrió a abrazarla en cuanto la vio entrar, pero, tal parece que ya le ha perdido el amor que un día le tuvo porque se separó de ella y corrió hacia nosotros nuevamente y nos abrazó. Por el rabillo del ojo vi que mi madre sonrió, eso me hizo sentir una mala espina, pero no se lo comenté a mi marido para no alargar más ese dolor.El notario comenzó a leer el testamento, comprobó que los familiares directos estuvieran
Mientras permanecíamos tirados en el asiento, los guardaespaldas corrieron hacia nosotros. Estaban asustados porque creían que Andy se había estacionado porque estaba herido.Descubrimos que esa fue una bala perdida que provino de un grupo de narcotraficantes que se estaban enfrentando con la policía. Fue un gran alivio saber que el ataque no iba dirigido a nuestra integridad física.Andy envió su auto al taller y luego volvimos a nuestra casa. Mi hijo despertó y se puso a clamar por aquella mujer, mi madre, entonces le pedí a Andy que ya era tiempo de que le explicáramos que ella es su abuela y nosotros sus verdaderos padres.Aunque él es un niño de tan solo cuatro años, quizá nos entendió, ya que ahora la llama abuela y a nosotros nos sigue diciendo papá y mamá. Siento que todo en nuestras vidas se está solucionando, aunque mi marido continúa sospechando sobre la muerte de su padre.Andy regresó a trabajar en su clínica, total, ya no se hará cargo de las empresas que, se pensó, en u
Llegamos al juzgado de familia. Desde ese momento mi marido no se apartaba de su abogado hasta que llegó nuestro turno de entrar en la sala.Andy, quien me había ignorado en todo momento desde el auto, tomó mi mano y la apretó, la llevó a su boca y dio un beso que me hizo entender que todo estaba bien.Sin embargo, yo aún estaba molesta por lo que anteriormente había insinuado que no confiaba en mí. Entonces, bajé mi mano para zafarla de su agarre, él me volteó a ver con una mirada extraña y frunció el ceño, pero eso no me importó y me adelanté a tomar asiento en mi lugar.—Con la presencia de todos los involucrados, podemos comenzar con el litigio entre estas dos familias que alegan ser los progenitores del menor de edad.Anunció el juez, dando inicio a la resolución del misterio familiar.—Tengo en mis manos los resultados legales de paternidad, aclaro que nuestro personal casi fue víctima de soborno por parte de uno de los litigantes, sin embargo, eso no se consumó. —expresó.Al de
Andy me envió con su abogado dos botes con agua, para el bebé y para mí. Me siento fatal porque con todo esto siento que se está distanciando de mí y no puedo evitar ponerme muy triste. Desde el receso él está reunido con su cuerpo de abogados, ni siquiera me ha preguntado si me encuentro bien o si necesito volver a casa para descansar.Estoy enojada, pero a la vez lo compadezco y no quisiera estar en su lugar enfrentando tantos problemas, mismos que han sido causados por su propia suegra.—Se reanuda la audiencia. —Anunciaron y todos volvieron a sus lugares de inicio.En resumen, los abogados de Andy presentaron una apelación en referencia a la lectura del testamento. Fue allí que me di cuenta la verdadera razón por la cual Andy no quería que yo supiera nada desde esta mañana.Se presentaron las pruebas suficientes y finalmente se comprobó de que el testamento al que le dio lectura el abogado de mi madre no era el legítimo que había dejado mi padrastro, ella lo había falsificado en c
ANDY—Se suponía que esa señora estaba siendo vigilada por las autoridades. ¿Ahora, con qué cara se atreven a decirme que no la encuentran? Le grité por teléfono al jefe de policía el día que le tocaba a mi suegra presentarse a la audiencia inicial por el delito que le impuso el juez anterior.—Disculpe, señor. Todo se salió de nuestras manos, en realidad, ella sí estaba siendo vigilada por nuestros hombres, pero en un momento de cambio de turno se escapó y la seguridad no se dio cuenta.—Quiero que encuentren a esa señora y la refundan en la cárcel, de lo contrario, yo mismo la buscaré y, créame que no le irá nada bien. Desde ya, se lo advierto, oficial, cometeré un delito grave y no quiero que me persigan por haber hecho el trabajo que a ustedes les corresponde.Lancé mi teléfono con fuerza al suelo, lo vi partirse en pedazos, pero no me importó. Raquel se asustó y corrí a abrazarla para que se tranquilizara. Creo que todo esto que estamos pasando le está generando mucho estrés a el
RAQUELEstoy llorando de impotencia, llena de miedo, estos hombres me están amenazando con matarme si Andy no les entrega el dinero dentro de quince minutos. Algo que considero que no va a suceder porque no goza de esa cantidad. Los minutos corren cada vez más rápido y la hora que ellos establecieron ya se está agotando.Ni siquiera me tienen amarrada o vendada, solo sentada en una silla, y un maldito me vigila. Un maldito enano al que hace rato estoy planeando darle una patada en los testículos y poder escapar.Al parecer está borracho, en ocasiones se tambalea y en una de esas yo aproveché y puse en marcha mis planes y pensamientos. El hombre cayó al suelo revolcándose de dolor cuando con mi zapato de punta fina le acaricié su entrepierna.Salí corriendo cuando miré que los otros dos hombres estaban descuidados hablando por teléfono. Corrí lo más que pude y claro que descalza, porque los zapatos quedaron botados por no ser de ayuda en mi intención de huir.Me está tocando correr por