—¿Sabes que tres niños se quedarán sin padres si me matas? —me pregunta Paul después de que le di la segunda paliza.—Arthur y Philippe ya me dijeron que tú no les importas. Si tienes otro hijo con alguna de tus amantes es problema tuyo —espeto, mientras lo vuelvo a tomar de la camisa para golpearlo.—¿No has visto a Kiara? Mi amada esposa al fin me dará una niña —dice riendo, es un maldito enfermo. Le pego una patada y cae al suelo.Hace tres días que lo estoy golpeando y dándole el suero para que se recupere y no termine muriendo. Aun así, no he conseguido que me diga nada de Sergey. Solo me molesta diciendo estupideces de Kiara. Parece que quiere que lo asesine.—¿Te concentras tanto en mí que te olvidaste de ir a verla? —pregunta Paul desde el piso—. No… No es eso. Seguramente te obligaron a dejarla. ¿Vas a renunciar a ella por ser un Li? Eso sí que es gracioso.—Arráncale las uñas y rómpele los dedos —le pido a uno de mis empleados y salgo de la celda. Escucho los gritos de Paul
Lisandro me detiene y me toma de la nuca, me obliga a levantarme y es él quien empieza a llenar mi cuerpo de besos. Dejo que baje el cierre de mi vestido, y mientras lo hace acaricia mi espalda, el calor de su piel me recorre e inunda todo mi cuerpo. Mis pezones reaccionan a su contacto. Él los toma con su boca y los besa con suavidad, aunque mi cuerpo lo siente con una intensidad que había olvidado. Amo a este hombre, lo deseo, y lo admiro. Ahora comprendo que lo que hizo fue por protegerme y me siento mal por orillarlo a esto. No puedo estar con él si una pistola va a estar en la cabeza de mis hijos por el resto de su vida. Aun así, no puedo evitar desear que esta noche me tome en sus brazos y me haga sentir por última vez eso que nos hace especiales. Nuestros cuerpos se funden en un abrazo intenso, como si quisieran recuperar el tiempo perdido, en un último intento desesperado de retener lo que una vez tuvimos. Nuestros labios se chocan en un beso cargado de nostalgia; sin embargo,
—Escuché que Alma viene a quedarse a la isla para tener a su bebé —dice Tania mientras desayunamos. Mi padre no responde y sigue mirando el periódico en su tableta.—¿Por qué vendría aquí a tener a su hijo? —pregunto cuando Amy se acerca a la mesa a desayunar.—Buenos días —dice ella y se sienta a mi lado.—Al parecer Alan estará aquí por unos negocios con tu padre y ella quiere que su hijo nazca y que su esposo esté presente. Así que como no podrá seguir viajando, prefiere quedarse aquí —comenta Tania. Sé que su sonrisa esconde algo detrás.—Podríamos ir a visitar a tu hermana. Aún me quedan unos días de vacaciones antes de tener que regresar al hospital a trabajar en el nuevo proyecto —comenta Amy.—Prefiero que no. Alma no nos recibirá bien —indico, pero Amy insiste por lo que le soy claro levantando el tono de voz—. Dije que no.Sé que si Alma está aquí tal vez también haya venido Kiara. Aunque desde la última vez que estuvimos en contacto le prometí no seguir vigilándola. Le pedí
Mi hermana acaba de dar a luz. Se ve tan feliz al lado de su esposo que los envidio. Desearía poder abrazar a Kiara del mismo modo. Sin las preocupaciones de tener que liderar a estos malditos empresarios. Mi móvil suena, es mi amigo y ex cuñado, Fausto. Me pide que vaya a verlo con urgencia. Por lo que debo dejar a mi hermana y a Kiara. Esta última me queda viendo cuando digo que debo marcharme. Sé que nos debemos una charla y pronto volveré, aun así, me cuesta dejarla sin poder darle al menos un beso. Delante de otros debemos fingir. —Cuñado —dice Fausto y lo abrazo.—Lamento lo de la otra vez —le pido disculpas.—Según sé, no te arrepientes, ya que al fin pudiste estar con tu chica. Así que no te preocupes —me pide y sonríe en complicidad, aunque yo no le he contado nada. Fausto es esa clase de persona que sabe todo de todos. Tiene contactos en todos lados—. Aunque sé que se complicaron las cosas entre ustedes.—Ni me lo digas, no sé qué es lo que voy a hacer. Paul arruinó mi vida
Me voy a la cama, empiezo a comprender por qué mi padre siempre está serio y casi no descansa. Tener que terminar con la vida de alguien es difícil, aunque esa persona se lo merezca. Varios de nuestros miembros empezaron a secuestrar niñas y a venderlas para prostituirlas. Eso es algo intolerable, al igual que meterse con narcotraficantes. Por lo que deben pagar por su falta con la muerte.El sonido del teléfono interrumpe mi descanso, miro el reloj y son las tres de la mañana. ¿Qué ocurre? Es Tania, quien me informa que Pavel ha sido convocado para una reunión urgente en la sede de los superiores. Me preparo rápidamente y me dirijo hacia allí, algo malo está pasando.Al llegar, encuentro a Pavel junto a miembros de alto rango, todos con expresiones serias y preocupadas. Se nos informa que han surgido problemas con una facción rival que ha comenzado a infringir los límites establecidos por la organización. La tensión en la sala es palpable. Acabo de dar de baja a más de doscientas per
Fernando es el ex de mi hermana Clara. Además, es uno de los médicos que trabaja en la academia. Él ha venido con su esposa a revisar a mi padre, ella también es médica. Están en su dormitorio ahora, mientras que Tania y yo esperamos en la sala. Al parecer, mi padre está muy enfermo y no le queda mucho tiempo de vida.—Debió decirme —le reclamo a Tania.—Sabes cómo es tu padre. No quería que te preocuparas. Es molesto para él, el hecho de que tú debes ocupar su lugar en la organización. Más aun sabiendo que al fin encontraste la felicidad con Kiara. Si fuera por él seguiría eternamente a cargo de los superiores para que el resto no tenga que pasar por lo que él ha vivido —me explica Tania.—¿Cuánto le queda de vida? —pregunto preocupado.—No saben, pueden ser meses, días u horas —dice Tania y suspira. Sé que está triste, ella ama mucho a mi padre.—Me comporté como un tonto —me reclamo a mí mismo.—No seas duro, no sabías por lo que él estaba pasando. Además, Lisandro solo quiere acon
Kiara y yo entramos al estudio, ella observa todos los libros que tengo abiertos y me mira.—¿Qué más me ocultas? —me pregunta.—Para empezar, disculpa a mi padre. Está enfermo y su temperamento es complicado —le digo y le alcanzo la silla para que tome asiento.—¿Qué tiene? —me pregunta ella, y le cuento que se está muriendo—. Lo lamento, fui muy grosera con él.—No te preocupes, él lo fue más contigo. Además, no creo que a mi padre le importe si viene de ti. Al parecer le recuerdas a como era Tania cuando se conocieron —digo y acaricio su rostro.—Aun así, me disculparé con él —replica ella y baja la cabeza, como si se incomodará.—¿Qué te ocurre? —le pregunto, ya que he notado que está más nerviosa de lo habitual.—¿Vista a la hija de Pavel hoy? —me pregunta y respondo que sí.Kiara me explica que se dio cuenta de que la hija de Pavel se parecía mucho a ella. Y aunque no tiene hijas, le pareció extraño. Sobre todo, porque ambas comparten un mismo lunar. Además, que Pavel suele ser
—Señor Li, ¿desplegó a más de cuatrocientos empleados de la organización solo porque su prometida escapó? —me pregunta uno de los líderes de los superiores, me citaron para una reunión después de lo que ocurrió con Kiara. —¿Si su familia estuviera siendo extorsionada por los elegidos o en manos de Sergey usted no habría hecho lo mismo? —le pregunto y los demás lo miran. Todos sabemos qué hace veinte años, su padre hizo mucho más que eso para buscarlo a él cuando fue secuestrado.—La investigación de los doctores Emanuel Romero y Vanesa González han sido muy útiles para mejorar la máquina de los sueños. Aun así, ¿considera que su hija es apta para ser su esposa? —me pregunta otro de ellos.—¿Por qué ponemos en juicio el valor de una mujer? —pregunta mi hermana. Amanda es otra de los líderes, ella pertenece a la familia Li y Sergey y es madre del futuro líder por parte de los Sergey. Por lo que siempre es escuchada en estas reuniones—. ¿No les parece que es un poco anticuado hablar de