Aquella era una hermosa tarde para una boda, en la ciudad de Udaipur. En los días previos, familiares y amigos habían participado en varias ceremonias tal como se acostumbraba en la India, a pesar de un difícil comienzo ambos novios se encontraban felices, hoy finalmente serían las últimas ceremonias para ser definitivamente una pareja.

Ya los invitados habían llegado a la sala de reuniones donde se realizaría el matrimonio, en su interior el lujo y la opulencia dejaban claro que aquella celebración correspondía a una familia de una alta posición, música y diferentes preparaciones de comidas ya eran brindadas a los presentes alegremente para su disfrute.

Las jóvenes solteras aprovechaban también de soñar con grandes prospectos para su futuro, —Me encanta la decoración, las mezcla de dorados, rojos y naranjas es hermosa—, comentó una prima de Arin.

— El novio se ve increíblemente atractivo, ojalá mis padres me comprometan con un hombre de dinero y poder como él, pero que además sea tan agradable a la vista—, expresó otra.

— Siempre supe que Arin no estaría dispuesto a casarse si no era por amor, es un romántico—, comentó una joven.

— Eso sería como un sueño. Yo, cuando mucho aspiro a que cuando me case con el tiempo aprendamos a tolerarnos, para mí el tener mi hogar y dirigir mi propia casa me hace suficiente ilusión.

— Él es un gran hombre.

— ¿No eras tú la elegida por su madre para ser su esposa?, ¿Por qué estás tan tranquila?, yo estaría hecha una furia, esa mujer se metió en medio de ustedes.

— Así es, los padres de Arin de la noche a la mañana nos informaron que no continuarían con el acuerdo, pero nuestra familia decidió no acabar en malos términos con ellos, son muchos años de amistad y negocios juntos, además estaban apenados, pues la chica es de una menor casta.

— Entonces, ¿Cómo se conocieron?, que raro que permitieran algo así.

— No lo tengo claro, pero supongo que usaría sus armas para manipularlo.

— ¿Quizá hablas así porque estás herida?

— Sé por mi cercanía con la familia, que para Arin no fue fácil disuadir a sus padres, pues la chica no posee preparación y educación para ser merecedora de esa unión, pero él amenazó que no se haría cargo de la herencia y la familia si no aceptaban, así que al final cambiaron de opinión.

— Entonces realmente la ama, como en las películas románticas, que envidia.

— Supongo que solo el tiempo lo dirá, por ahora deseemos a los novios felicidad y disfrutemos de todo lo que la fiesta nos ofrece.

En una tienda decorada con flores, guirnaldas y alfombras donde se celebrará la boda, el novio esperaba ansioso.

— ¿Nervioso?—, preguntó su padre.

— Un poco, supongo, pero más que eso me siento ansioso.

Su madre colocó su mano en su hombro para calmarlo a pesar de su propia incomodidad ante el retardo de su futura nuera, —Tranquilo, solo disfruta de tu día, lástima que tu hermano no pudo llegar a tiempo. Sé que para ti era importante y a él le dolió mucho no poder asistir.

— Lo entiendo, negocios son negocios y el responsable he sido yo por escoger la fecha tan próxima para casarnos sin siquiera preguntar por los planes de mi hermano.

— Ahora solo piensa en lo que está por venir, ora porque tu unión sea bendecida y que la chica valore todo el esfuerzo que has hecho para estar con ella.

— Sé que así será, solo espera que la conozcas bien. Estoy seguro de que la amarás cuando veas lo dulce y considerada que es, luego les contaré a detalle por qué me enamoré de ella.

— La decisión que has tomado es para toda la vida, así que deseo para ti que haya sido la correcta.

— Aprenderemos a madurar y respetarnos, como lo han hecho tú y papá, supongo que no fue fácil al principio, pero todo salió bien.

Su madre lo abrazó y concluyó, —Solo deseo que seas feliz, eso para mí es suficiente.

— Lo soy, les agradezco que me apoyaran y aceptaran romper algunas tradiciones.

Esta vez fue su padre quien estrechó su mano, —Por encima de todo siempre estarán la felicidad de tu hermano y la tuya, solo te pido mantenerlo en silencio, la familia y amigos pueden cuestionar las decisiones tomadas y eso solo corresponde a nosotros.

— Así será, no saldrá de mis labios nada de lo conversado.

Sus padres se unieron a los invitados y Arian se quedó solo de nuevo en la tienda, miró de nuevo su reloj y, una vez más hacia la puerta, ya llevaba una hora de retraso y comenzaba a preocuparse. Su suegra intervino al ver en su rostro la tensión, —Estoy segura de que debe estar por llegar.

— ¿Habló con ella?

— Sí, se estaba preparando en su habitación cuando salí y me llamó hace un momento para decirme que pronto estaría aquí.

— Bien, entonces seamos pacientes, ¿qué son unos minutos más o unos minutos menos?

— Va a estar a tu lado para toda la vida y sé que les espera un futuro lleno de felicidad, prosperidad y seguramente muchos hijos, por favor, mantenla siempre a tu lado y protégela.

— Estoy ilusionado a que así sea, me encantaría tener una familia numerosa y al conocer su carácter sé que será una buena madre y no debe preocuparse por Pari, estoy seguro de que la haré feliz.

Pero de repente se vieron interrumpidos, una explosión resonó en el cielo. Todos los invitados estaban asustados, el fuego se podía ver desde donde se encontraban y sin poder evitarlo, el pánico comenzó a reinar entre todos, —Por favor, guarden la calma—, anunciaron por el micrófono.

Sonó el celular de Arin, este notó que se trataba de un número desconocido y lleno de desconfianza respondió, —Sí, ¿Diga?

En el fondo se escuchaban gritos de angustia, pero nadie respondía, así que insistió, —Sí, ¿diga?, hable o cortaré la llamada.

Se escuchó la voz temblorosa de una mujer, ahogada en llanto, —Cuñado... Pari, mi hermana, ella…

— ¿Qué pasó?, por favor dilo ya.

— Pari está muerta…