— Su esposo la necesita… Kaira temió que en medio del dolor y la frustración, Arin hubiese cometido alguna locura.Se levantó deprisa y empezó a vestirse, siguió haciendo preguntas—Pero dígame ¿Qué ha ocurrido? — Una persona que se encontraba en el bar lo reconoció y vino a avisarnos, no suele beber, así que parece que su comportamiento está molestando a otros clientes. — De acuerdo, entonces la prioridad es traerlo de regreso con bien, supongo que intentará oponerse, ¿cuento con usted para ayudarme?Abrió la puerta y fue recibida por un respetado anciano que se inclinaba para evitar mirar directamente a los ojos de la nueva señora de la casa. — Por supuesto, señora. — Llámame por mi nombre, soy Kaira solamente. — No podría hacerlo, me despedirán.La muchacha se quedó pensando en sus palabras mientras seguía al mayordomo hacia la puerta de la villa. — De acuerdo, entonces cumple con tal formalidad mientras no estemos a solas, usted es casi de la edad que tendría mi padre, no me
— Pari, te amo.Kaira no pudo evitar llorar en silencio, aun en sus momentos más íntimos, Arin recordaba a su hermana, era a ella a quien realmente deseaba, lo cual la hizo sentir destruida.Por un instante ilusamente había creído que sus atenciones eran realmente para ella, que quizá había comenzado a ganarse su afecto, pero qué equivocada estaba.Ella huyó al sofá y se quedó dormida entre lágrimas y agonía, acurrucada sola.Cuando Arin despertó en la cama se sorprendió al ver la escena, —¿Qué hago desnudo?, ¿Qué fue lo que pasó anoche?, ¿Cómo pude?Pero pronto pensó en su "esposa" por contrato, su cuñada.“¿A dónde se fue ella?”Mientras tanto, Kaira está en la cocina, se esmera en sus preparaciones, es la primera vez que le servirá desayuno a alguien ajeno a su familia y en el fondo desea que sea del agrado de Arin.“Quizá sea una forma de ganarme su atención”, así que intentando mantenerse positiva preparó una bandeja para llevarla a la habitación.Su corazón latía con fuerza y las
— Dime Kaira, ¿qué significa que si no podías salvarme esta vez?Los ojos de la chica eran un poco evasivos, —Nada… está lloviendo mucho y lo mejor es que volvamos. No quiero que te enfermes… Pensó cuidadosamente que quizá había entendido mal a esta mujercita, pues ella no lo había salvado, así que debía haber perdido la cabeza.— Tienes razón, pero, no creas que te lo agradeceré, no te amo, no siento nada por ti.— Ya lo sé.— Entonces ayúdame a levantarme, creo que me lesioné el hombro al caer del caballo.— Bien, pero ¿Crees que puedas cabalgar?— Sí.Fue difícil subirse al caballo y cabalgar, pero aún más cuando debió bajarse de él, para la sorpresa de Arin, Kaira manejó todo con serenidad y luego de algunas instrucciones finalmente estaban a solas en su habitación.— Voy a tener que ayudarte a quitarte la ropa, estás lesionado y todo lleno de barro y estuviste mucho tiempo con la ropa empapada…— No te quiero atendiéndome. ¿No hay otro sirviente?— Todos están agotados, estaban
Arin no tenía a Kaira en muy buen concepto, aún había muchísimos reproches en su contra por haber aceptado e incluso insistiera en aquel incómodo matrimonio, pero tampoco le gustaban las injusticias, así que interrumpió a su madre, —No es su culpa, la persona que te contó lo ocurrido estaba completamente equivocado, si ella no hubiese intervenido yo estuviera en la cárcel.— ¿Y la defiendes?—, preguntó con las manos a cada lado de su cintura, aún sorprendida de que Arin le diera la razón.— No se trata de eso, no puedo callar y que ella asuma una culpa que no le corresponde, fui yo quien fue a ese bar, tengo las cosas un poco borrosas en mi mente pero sé que paró la pelea y me hizo regresar a casa.— Ella es quien te ha producido todo este estrés, tú no eres así, pero debes tener en cuenta que los problemas se resuelven dentro de casa, así que esto no debe repetirse.Luego se dirigió a Kaira, —Y sobre ti, vigila tus pasos, a mí no me engañas con tu falsa actitud de inocente, puedes es
Kaira palideció, parecía que no paraba de meterse en problemas y estaba segura de que aquello solo traería pésimas consecuencias, pero para su alivio, cuando se giró, se trataba de Yash.Su mejor amigo y ahora cuñado, se llevó la mano al pecho y respondió, —Gracias a Dios que eres tú, siento haber entrado aquí sin autorización, pero escuché llorar a una niña y simplemente quise ayudarla, ¿La conoces?Él fue hasta la niña y se colocó a su altura, —Princesa, ¿Por qué lloras?, sabes que si tienes miedo solo debes enviarme un mensaje y estaré contigo.Kaira no entendía nada, “¿Qué relación tenía Yash con ella?, parecían ser cercanos, ¿acaso sería su hija?”La niña se aferró a los brazos de aquel atractivo y amable hombre, él le correspondió mientras susurraba palabras dulces a su oído y luego se dirigió a ella, —Por favor Kaira espera fuera y yo te buscaré para que hablemos.— Está bien—, respondió mientras caminaba hacia la salida.Volteó en varias ocasiones y pudo ver que Yash entraba e
20 minutos antes.Arin abrió los ojos, sintiéndose renovado, había dormido bien y era el momento de retomar su trabajo. El permiso por matrimonio abarcaba unos días más, pero no le veía sentido a tomárselo, pues no había nada que celebrar.Se vistió sin prisa, pero en poco tiempo estuvo listo. Al abrir la puerta que dividía la habitación en dos estancias, se percató de que Kaira ya no estaba allí.Con un poco de suerte no tendría que verla, pensó con cierto regocijo.En cuanto cruzó la espaciosa sala, sintiéndose victorioso, se encontró con su antigua prometida, —Hola, Arin, ¿qué tal te va en tu vida de casado?—, preguntó con cierta burla.— ¿Qué haces aquí?— Sabes que soy una amiga de la casa, sobre todo de tu madre, así que siempre soy bienvenida, además no puedo evitar que me interese lo que te suceda.— Todo está bien entre nosotros afortunadamente.— No lo creo, tu hermano parece completamente flechado por tu esposa, es más, se diría que está impactado.— ¿A qué te refieres?, ¿Po
Arin a pesar de sus sospechas sobre Kaira se sentía sorprendido y escandalizado a partes iguales. El tener razón sobre su verdadera personalidad era terrible, pues albergaba la esperanza de que solo se tratara de un error de su parte, pero la realidad tocaba a la puerta.— Pero, dígame, ¿Tienen pruebas contundentes contra ella? — Aún no, por eso no ha sido arrestada, hasta ahora todo es circunstancial y es la única con un móvil para hacerlo, así que me veo en la necesidad de que no hable con ella sobre el tema. — No se preocupe, soy el principal interesado en descubrir la verdad, mi reputación y mi vida están en juego. — De acuerdo, si se obtengo alguna otra información será el primero en saberlo. — Se lo agradezco.Arin sujetó con fuerza el volante a tal punto que los nudillos se tornaron blancos, se sentía asqueado de pensar que no solo se había acostado con ella, sino que intentó tener una tregua con ella.“Ya sabía yo que tras esa cara y actitud inocente se escondía un demonio
Kaira sintió que el fuerte tono de las palabras de Arin le hicieron estremecer, pero palideció al ver sus ojos, pues parecían estar envueltos en llamas.— Te lo advierto, mi madre merece respeto, nunca más le hables así.— Pero si es ella quién no ha parado de ofenderme y maltratarme.— Razones tengo suficientes, solo haces sufrir a mi hijo todavía no entiendo como hiciste para convencerlo de cometer el gran error de casarse contigo.La ex novia quien hasta ese momento se había mantenido en silencio, decidió intervenir, —Lo mejor es que te lleves a tu esposa. Tu madre está muy alterada y eso no le hace bien, lo presencié todo y creo que debes enseñarle respeto.Chetana se colocó la mano en el pecho y se dejó caer teatralmente en el sofá, —¡Ay por los mismos dioses! Me siento mal, ahora me está acusando cuando es ella quien se muestra altiva, creo que me va a dar algo por esa m*****a mujer.— Mamá, cálmate, por favor.— Como voy a hacerlo si en mi misma casa no puedo tener paz.— Me pue