Arin se sintió angustiado, aún Kaira tenía puesta la ropa mojada y parecía realmente enferma, a los pocos minutos la puerta se abrió, eran su madre y su hermano quienes entraban.— ¿Qué ocurre ahora?— preguntó con fastidio mientras Yash miraba a su hermano con cara de reproche.— Kaira de desmayo.— ¿Estás seguro?, no estará haciéndose la víctima para manipularte para buscar tu perdón.— ¿Mamá, cómo dices esas cosas?—, preguntó Yash sorprendido.— No seas inocente, hijo, hay muchas mujeres que están dispuestas a hacer lo que sea para amarrar a un hombre.— Hermano, debiste ayudarla a cambiarse, seguramente por eso enfermó, ya estaba débil cuando la ayudé a llegar aquí.— No me recrimines, ella no quiso que la ayudara, sabes que suele ser muy orgullosa.— Debiste imponerte o insistir hasta que aceptara, ahora ve las consecuencias—, se sentía culpable de no preguntarle siquiera si necesitaba ayuda, pero mintió para no admitir ante su hermano su mala relación con Kaira.— Ya basta, no es
Unos minutos antes.— Hola papá, buenos días, qué bueno es encontrarte de nuevo en tu oficina retomando tus actividades así sea desde la casa.Su padre era su orgullo, su ejemplo a seguir. Un buen hombre de principios, trabajador e inteligente para los negocios, estaba seguro de que si se había arriesgado así en esta oportunidad era porque estaba seguro de que traería con ello prosperidad y éxito.— Me siento mejor y creo que debo hacerme cargo de los compromisos existentes.— Creo que deberías descansar un poco más, puedo ocuparme, tómatelo con calma.— Te prometo no excederme por cierto, tu madre me contó lo sucedido con tu esposa.— ¿Por qué?, no debió hacerlo en tu condición, es preocuparte sin sentido.— En realidad la atrapé hablando con tu ex novia por teléfono y no le quedó otra que contármelo, pero no te preocupes, estoy más sereno, sé que la solución al problema que creé está cerca.— No he podido hablar ese tema con Kaira, además de todos los contratiempos quise respetar lo
Entraron en la habitación sin previo aviso y eso rompió el momento apasionado intempestivamente, Kaira comenzó a toser entre los nervios y la bronquitis, por lo que le costó recuperar el aliento.— Por eso he venido, supe que tu esposa se enfermó—, dijo Chetana señalándola como si le diera cierto asco.— Sí, tiene…— No me importa lo que sea, tiene mucha tos y puede ser contagioso, así que ya di la orden para que pasen tus cosas a la habitación de huéspedes que está a un lado. Arin iba a protestar, pero en cuanto recordó el beso compartido, analizó con rapidez que lo mejor era que se alejaran para que aquellos instintos descontrolados e incoherentes desaparecieran, por lo que era una buena excusa, estarían cerca pero no tan íntimamente.— No es tan contagioso, ni se trata de una enfermedad grave, pero si te da tranquilidad, entonces lo mejor es por unos días cumplir con la pequeña cuarentena que pretendes establecer.Kaira se sintió defraudada de que Arin siempre mantuviera una actit
El “No puedo firmarlo” de Kaira, retumbó en la mente de Arin, estaba completamente enfurecido, ¿cómo se atrevía a jugar con ellos?, ¿Acaso les había tomado el pelo?— Arin, no puedo explicártelo, pero…— Pero nada, es el colmo, llevas más de un mes en esta casa, causando problemas y llevándome al límite. He intentado no ser un patán contigo, pero has roto nuestro acuerdo. Desde este momento queda sin efecto cualquier pacto. Recoge tus cosas que voy a llevarte a tu verdadera casa.— Te lo pido, solo espera un poco, entiendo tu molestia, pero no lo hagas.Estaba tan enfurecido que la hizo a un lado y se dirigió al closet, comenzó a sacar toda su ropa con violencia y tirarla sobre la cama, —No lo voy a repetir, recoge las pocas cosas que trajiste, ha sido suficiente, no te burlaras más de mí y mi familia, no sé por qué tuve que confiar en que cumplirías tu palabra.— De acuerdo, guardaré mis cosas, pero quiero que sepas que te equivocas, no te estoy traicionando, solo estoy intentando bu
Chetana, observaba la escena de la partida de Kaira desde la ventana con una sonrisa, sentía un regocijo tal que estaba de humor para hacer una fiesta, al fin aquella oportunista se iría de su casa y por la actitud de su hijo seguramente era para no regresar.La expresión de tristeza de la chica solo magnificaba su triunfo, pero cuando vio pasar a su hija Anika corriendo entre los presentes, se asombró y aún más cuando la escuchó gritar.— ¡Kaira!, no te vayas por favor.Instintivamente, tanto Chetana como sus hijos corrieron hacia la pequeña, pero fue su madre la primera en llegar hasta ella y abrazarla. —Hija, has hablado, no puedo creerlo, ¿qué clase de milagro es este?— Quiero que Kiara se quede mamá—, pidió sin poder contener el llanto mientras su amiga la observaba con dolor desde el auto sin poder hacer nada.Arin estaba impactado, no podía parar de ver a Kaira sin entender en qué momento aquellas dos siquiera se habían conocido y habían forjado un lazo.Anika intentó zafarse d
Luego de que Kaira pudiera convencer a la pequeña Anika que no se iría, sino que solo saldría un par de horas, lograron ponerse en marcha. Sin embargo, para Arin el hecho de que su esposa permaneciera en silencio y con el gesto serio era desconcertante. —¿No me dirás qué vamos a hacer en la mina?— Estamos por llegar, no seas impaciente.El área estaba cercada e identificada con un cartel que orgullosamente mostraba su apellido y Kaira solo pudo sentir una fuerte nostalgia por aquellos años en que era una joven llena de ilusiones y rodeada de amor, sus ojos se llenaron de lágrimas, recuerdos de Pari y ella corriendo por el lugar mientras su padre las perseguía.Arin se detuvo para abrir el portal y luego llegaron a lo que parecía ser la entrada de una pequeña mina trabajada de forma rudimentaria, Kaira bajó del auto y apenas llegó a la abertura, se arrodilló y comenzó a orar, a lo que su esposo mantuvo cierta distancia para solo observarla.— Creo que debo presentar mis respetos, este
Kaira parecía estar analizando opciones, lo que hizo impacientar a Arin, —Solo responde: ¿me vas a acompañar o no?, las opciones son fáciles si o no.— Pídemelo, pídeme formalmente que te acompañe a la fiesta.— ¿Ya no lo hice hace un momento?— No, yo te pregunté si necesitabas que te acompañara y respondiste que sí…Al mirar la sonrisa traviesa de la chica, por un momento, Arin pareció haber regresado al pasado.En los últimos meses, ella no sonreía mucho. Casi se olvida que solía ser muy alegre, traviesa y le encantaba reír.Era un poco bondadosa, tal vez la había entendido mal.— Está bien, ¿señora Kaira Kumas sería tan amable de acompañarme a una fiesta formal la noche de hoy viernes?Kaira se sorprendió un poco de que Arin no estuviera enojado, sino que no, por el contrario, le siguiera el juego y coopera con ella.— Ya que lo pides tan amablemente, la respuesta es sí, te acompañaré y haré lo posible por no avergonzarte y encajar en tu nivel social.— Ahora que tocas ese tema, s
Cuando Arin salió del baño y vio a Vani enloquecida, cubierta de alcohol, peleando con su esposa, gritando y ambas tirándose del pelo, sintió que la ira se le subía a la cabeza, “¿Qué clase de espectáculo es este?”.—¡Qué demonios están haciendo!—¡Arin, mira lo que me ha hecho ESA MUJER!, eso pasa cuando incluyes personas de castas inferiores en eventos que no están a su nivel—, gritó Vani para avergonzar a la chica frente a todos.—¡Realmente eres una persona malvada, la que me atacó primero! ¡Obviamente, fuiste TÚ quien ensució mi falda!—¡BASTA! —Arin apartó a las dos mujeres y avergonzado se dirigió a los presentes, —Le pido disculpas en nombre de mi esposa, esto fue un error sin dudas.Luego llamó a un joven de atención al público y en voz baja le indicó: —¡Camarero!, por favor que acompañen a esta dama a la habitación VIP y use esta tarjeta para pagar todo lo que necesite, incluyendo la compra de un vestido.—Quiero que me acompañes… Arin... Yo no tengo la culpa, tú me conoces