45. El filo que me lame.

Narra Lorena.

La mentira tiene sabor metálico.

Está en el café que no termino, en el cigarrillo que se apaga sin haber sido fumado, en el perfume que se mezcla con el sudor de la paranoia.

Ser doble agente suena poético hasta que sos vos la que tiene que elegir a quién mirar a los ojos sin pestañear… sabiendo que uno de los dos va a morir.

Ismael no me habla como antes.

Ya no me toca el brazo con confianza, ni me deja quedarme en silencio sin reclamarme explicaciones.

Sabe.

O al menos sospecha.

La mujer que me acompaña, Bianca, también se ha vuelto distante.

Antes caminábamos como hermanas de guerra.

Ahora camina detrás mío, como esperando el momento justo para clavarme algo entre las costillas.

El círculo se está cerrando.

Y yo, como una idiota, sigo sonriendo.

Hoy, nos reunimos en una casa abandonada en el puerto.

Una trampa para ratas.

Y nosotras, las ratas más ambiciosas de todas.

—Ruiz está más cerca de caer de lo que pensás —me dice Ismael, pero su mirada no me busca. La mantien
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App