—Quizás ellas tienen razón, quizás yo soy para Caden una distracción.—¿Te estás escuchando a ti misma? Si eres una distracción, ¿por qué quiere casarse contigo?—No lo sé, quizás solo esto es una ilusión o tal vez está buscando la forma de aprovecharse de mí. ¡Oh Dios! Mi madre tenía razón, no debí aceptar casarme.—¡Ya es suficiente Angelina y no seas cobarde! No porque esas arpías te insultaron, vas a desistir de casarte. No ves que hablan de esa manera porque les duele que él te prefiera a ti antes que, a esa tal Miriam. Así que seca esas lágrimas —Angelina hizo caso a su amiga y secó sus lágrimas. Había sido muy cobarde de desistir a la primera presión. El resto del día Angelina estuvo pensativa y algo dolida
Dos días después.Caden fue a visitar a su prometida, ya había dejado de verla dos días para ir agilizando todo lo que necesitaría para su nueva vida junto a la mujer que amaba. Llegó a la tienda y saludó a todos los presentes, Angelina se apartó de lo que estaba haciendo para atender a su prometido, ya que todas las demás empleadas estaban arreglando todo para cerrar.—¿Y tu madre Angelina?—Salió al correo a dejar una carta —Caden se pendió del rostro de Angelina, sentía cómo su cuerpo pasaba de frío a cálido, tan solo con su presencia. Él era como uno de esos niños que se sentía encantado bajo la melodía del flautista de Hamelin. Angelina trató de regalarle una sonrisa cálida, pero aquella sonrisa no fue muy convincente. Caden perc
Un mes después. Arianna había observado que Michael se había alejado un poco de ella, a pesar de que continuaba siendo amable, su mirada era diferente; Emilia le había aconsejado dejar el tiempo correr y ella accedió tristemente a seguir el consejo de su tía. —No te sientas afligida, mi niña —le manifestó Emilia a Arianna para subirle los ánimos—. Recuerda que su partida a Londres se acerca y, sin duda, la planificación de la fiesta debe estar tensa. —Todavía falta un par de meses. —A pesar de todo, mi querida, para él no debe ser sencillo volver; así que tengamos paciencia, Michael siempre ha sido así. —Él ha estado renuente, y yo creo que algo le pasa. Voy a averiguarlo. —La voz de la muchacha era de profunda frustración. —¡Te lo prohíbo Arianna! Vas a ponerte en una mala posición —Arianna permaneció en silencio tragándose su frustración delante de su tía. —Una dama siempre debe mantener la compostura, sea cual sea la situación. No podemos dejarnos llevar por los desatinos del
Alyssa, Emma y Robert finalmente habían llegado, lo cual Robert agradeció profundamente debido a la pequeña emboscada que había tenido lugar en el interior del carruaje.Al entrar en la edificación, quedaron sorprendidos por la majestuosidad del sitio. Robert ofreció su brazo a las dos damas y mostraron sus invitaciones. Posteriormente, fueron recibidos con gran cordialidad y les ofrecieron una copa del mejor champán.—El recinto para disfrutar de obras ha quedado espacioso, pero también es en sí mismo una joya del diseño y la construcción —opinó Robert. Uno de sus amigos, sir Brad Clayton, oyó sus acotaciones y no resistió a unirse a la conversación para aportar su punto de vista; el arte era una de sus pasiones.—Finalmente, esta obra arquitectónica ya es un hecho, después del elaborado trabajo realiza
Por otro lado. Al bajar del carruaje, Arianna se rezagó para quedar sola con Michael. Ella había decidido ignorar los consejos de su tía, necesitaba salir de dudas aquella misma noche.—Michael, ¿Podemos hablar? —su voz fue algo trémula.—Por supuesto, Arianna, ¿qué ocurre??—No estoy segura si se trata de mi imaginación, pero tengo la sensación de que en los últimos días te has alejado de mí.—Arianna, por favor, discúlpame si he estado un poco distante, solo he tenido muchos asuntos que requieren mi atención absoluta —los motivos de Michael no convencieron a Arianna. La mujer no pudo evitar sentir dolor ante aquel pretexto tan vacío, sin embargo, decidió ignorar su decepción y continuó indagando.—¿La dama que estaba contigo
Gerald Greenwood, que acababa de llegar, contempló desde la ventana de su despacho como Caden y Marianne subían a uno de los carruajes, luego decidió que su hora de actuar había llegado. Lo primero que haría sería hablar con Angelina y, si no funcionaba, enfrentaría a Caden usando la prueba que encontró. Abrió su caja fuerte y tomó la máscara blanca. Hacía ya unos días que había retirado el objeto de la habitación de su hijo, y este aún no se había percatado, lo cual le infundió esperanza; era una señal de que su hijo no había cometido más actos ilícitos.Horas más tarde.Angelina descendió velozmente al percatarse de que Caden había llegado, al abrir la puerta Caden la recibió con un beso en los labios, lo cual provocó una sonrisa en ella.—No estoy seguro de cómo estás, pero cada día está más hermosa —susurró luego de besarla —te he traído una sorpresa —agregó posteriormente.—¿De qué se trata? —preguntó Angelina con emoción.Angelina se acercó al carruaje en un tono juguetón y, cua
Martina y Clara ya estaban cómodas en la cocina, Martina sentó a su pequeño cerca de la ventana y le dijo que no interrumpiera.—Te portas bien, mamá sabrá recompensártelo.—¿Por qué Angelina no me invitó al parque en este momento?—Porque ella está comprometida y los enamorados necesitan tiempo para hablar.—Yo también estoy enamorado de ella y, cuando sea mayor, seré tan rico como el prometido de Angelina. Sé que él es hijo del propietario de la mansión en la que trabajamos, pero Angelina tenía que atenderme.—¡Por favor, no estoy para tus discursos! Por favor, ocupa tu tiempo jugando y deja que tu madre hable con Clara.—Está bien, dijo entre dientes —. Una vez que Theo se tranquilizó y se concentró en sus juegos, Martina comenzó a conversar con Clara.—No sabes lo que estaba deseando desde hace días de venir, pero las cosas en la mansión no están muy bien.—¿Es por lo de Angelina y Caden?—Si Clara, la bruja de Liza, esta que no se puede soportar, nos ha amenazado incluso a Marie
Ya a solas Angelina se dejó caer en el mueble y sus lágrimas empezaron a brotar, sus manos temblaban de la impotencia, Clara fue a consolarla mientras Vanesa iba por té de manzanilla.—¿Qué te dijo ese hombre Angelina?—Lo que escuchaste mamá…—Se había tardado mucho en venir, pero que las palabras de ese hombre no se vuelvan indelebles—Me ofreció dinero —el enfado de Clara fue profundo y sintió el dolor corroerle el alma, la impotencia se apoderó de ella por la humillación de aquel hombre cuyo poder causaba llevarse por delante al quién él considerase inferior.—No es justo —dijo entre dientes —pero sabía que esto iba a suceder —Angelina no espeto.—Debes decírselo a Caden, él debe estar al tanto de esta situación, me prometió protegerte.—Lo haré madre.—Y si ese hombre vino hasta esta casa para sobornarte, eso quiere decir que los sentimientos de Caden hacia ti van en serio. —Angelina abrazó a su madre, deseaba sentirse protegida, aquella noche necesito tanto a su padre y recordó