105. EMBARAZO

Es como si ese hombre ya no fuera mi esposo. Su mirada no solo revela su dolor, sino también la certeza de que no hay vuelta atrás, de que jamás volverá a ser mío. Tiemblo como una hoja sacudida por el viento, y las lágrimas se deslizan por mi rostro sin que pueda articular una sola palabra. Me quedo paralizada, atrapada en mi propio sufrimiento, hasta que él se marcha, dejándome prisionera en esta habitación.

Lo que acaba de pasar fue intenso y no hubo forma de evitarlo. Afortunadamente, no sabe que mi aventura fue con Pablo, si no no estoy segura de lo que sería capaz de hacer en ese estado.

Solo fue sentir que me retiró su cariño para que una inexplicable sensación de soledad, de vacío se instalara en mi pecho. Amo a mi esposo e infortunadamente tuvo que pasar algo tan espantoso como esto para darme cuenta.

Las horas pasan y sigo confinada en esta habitación. La agitación inicial se ha disipado, pero persiste un peso insoportable en mi interior. No he probado bocado en todo el día,
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP