Dos días despuésDurante dos días Erika acompañó a la pequeña Kaire en el hospital, pasaba con ella el día y en la noche era Julián quien la cuidaba, aunque siempre llegaba cuando Erika ya se había ido, por eso no habían vuelto a coincidir y no había podido disculparse con él después de cómo se había comportado.Ese día tenían previsto dar de alta a la pequeña Kaire y ella estaba preocupada, porque temía que Julián terminara llevándosela a su mansión y pudiera perder contacto con su hija, por eso esperaba nerviosa, su pie se movía de arriba hacia abajo, sus manos sudaban, respiró profundo tratando de controlarse.En ese momento justo lo vio entrar serio, sin ninguna expresión en su rostro, Erika no pudo evitar que el corazón le saltara en su pecho, parecía como si se le iba a salir del pecho.—Hola —saludó a secas y ella respondió pronunciando su nombre.—Julián.Él asintió con la cabeza y luego caminó hacia donde estaba su hija y la besó.—Mi pequeño cielito ¿Cómo estás? —preguntó.L
Él suspiró, no sabía qué respuesta darle, vio a los niños que lo miraban con una expresión de curiosidad, muy atento a los que él pudiera decirles.—No vayas a negarlos, no estoy ciega y es evidente que son tus hijos, porque son exactamente igual a ti cuando tenías su edad y ¡Son gemelos! ¡Qué emoción! No puedo creerlo, me he perdido de la vida de mis nietos ¿Tienen seis o siete años? —inquirió, sin embargo, no esperó respuesta y siguió hablando—, si tienen esa edad solo significa que engañaste a Erika durante el matrimonio ¿Fuiste capaz de engañarla por ti mismo? ¿Con quién la engañaste? ¿Cómo se llama la madre de tus hijos? ¡Oh por Dios! ¡Tengo dos nietos varones! —expresó y su voz se notó emocionada.Julián respiró profundo, se acercó a su madre, y comenzó a decirle una verdad a medias.—Sí, mamá. Ellos son mis hijos. No sabía de su existencia hasta hace poco. Su madre… murió hace unos años, y desde entonces su tía se ha encargado de ellos —respondió en tono nervioso.Doña Pierina
Erika despertó, aunque tenía pereza de abrir los ojos hasta que sintió el enredo de diminutas piernas y brazos, se sonrió al darse cuenta de que sus hijos habían esperado que ella se durmiera para irse a acostar en su cama junto a ella. —Debemos salirnos de aquí, antes de que mamá nos descubra —escuchó la voz de Santi.—Se está despertando —respondió Salva.—¡Ay Dios! Estamos en muy serios problemas —dijo Rayito, preocupada—, huyan, escapen por su vida, porque mamita se enojará y eso que ustedes no me dejaron meter a papá a dormir aquí también… como que tienen razón, viendo su cara creo que no le habría gustado.Erika se quedó tranquila simulando estar dormida.—Creo que es falsa alarma, se volvió a dormir —dijo Santi.—¡Qué alivio! —exclamó la pequeña Kaire.En ese momento, los tres fijaron la atención en ella, acercando su cabeza al rostro de Erika y repentinamente y sin moverse ella abrió los ojos y todos salieron corriendo asustados, al mismo tiempo que pegaban gritos alejándose
Ella sonrió con satisfacción al ver la reacción de los niños y también del equipo que la arregló, quien después de observarla y halagarla se retiraron.Erika sabía que su apariencia era impresionante, pero necesitaba que todos los presentes a la inauguración de su casa de moda lo supieran, no creía que nadie sospechara que EVD Un nuevo comienzo, estaba relacionado con Erika, la mujer que todos pensaban había muerto en ese accidente.Se acercó a Aníbal y le guiñó un ojo.—¿Cómo me veo? —preguntó ella.—Impresionante, maravillosa, una reina en todo su esplendor, como siempre —respondió el chico con una sonrisa.—¡Ya! Si está bella, pero no es para que busques que mi papá te ponga los ojos violetas, aunque combine con tu cabeza de algodón —dijo Kaire burlándose.Los niños se acercaron a ella y la abrazaron por la cintura, ella se inclinó y les dio un beso en la frente. —Ya saben las instrucciones que les di.—Cuídate mami, espero que dejes a todos con la boca abierta.—Así será mis prec
Todo se quedó en silencio, al punto que si se caía un alfiler lo hubieran escuchado, los presentes estaban a la expectativa, esperando ver qué harían las mujeres ante la brutal amenaza de Elisa.Algunas estaban temerosas, decididas a hacer lo que les estaba ordenando Elisa, sin embargo, otras decidieron tomarse su orgullo y no ceder ante los caprichos de la mujer. Una de ellas se adelantó y dijo:—Crees que no somos nada para ti, Elisa, eso no nos debe ofender, porque por lo menos nosotras somos personas respetables que merecemos ser tratadas con dignidad. No te pediremos disculpas por decir, la verdad, ahora te las das de gran señora, pero no eres más que una arpía, la tercera en discordia, que no le importó interponerse en el matrimonio feliz de su hermana y destruirlo… ahora pides clemencia, pues eso es lo que has sembrado… no cambiaré mis palabras, no eres más que una amante que ahora viene a ser señora, aunque te falta mucho por serlo.Las venas del cuello y de la frente de Elisa
Doña Pierina no podía creer lo que estaba escuchando. ¿Erika Del Pino? La misma mujer que había sido dada por muerta en un accidente automovilístico hace más de cinco años atrás.Se llevó la mano al pecho, sentía que iba a darle un síncope, su boca seca, las piernas le temblaban como si fueran de gelatina, por un momento creyó estar imaginándose todo eso, pero lamentablemente para ella, era real.La mujer se quedó perpleja ante las palabras de Erika. ¿De qué estaba hablando? ¿Qué tenía que reclamar y recuperar? ¿Por qué esa actitud triunfante? ¿Qué podía querer recuperar? ¿Acaso se refería a Julián? No podía ser, después de todo, ella era la exmujer de su hijo, ¿por qué habría de quererlo de regreso cuando le había sido infiel?“No puede ser ¿Cómo es posible? Ella está muerta”, no pudo contener sus emociones y comenzó a gritar.—¡Esto no puede ser verdad! Debe ser una pesadilla —dijo la mujer con una expresión de desesperación.Erika se bajó del escenario con el micrófono en la mano y
Aníbal sonrió de manera burlona hacia Nardo, antes de dirigir su atención a Julián.—Julián, permíteme que te ponga al día sobre lo que está sucediendo aquí —empezó a decir Aníbal con una voz calmada—. Resulta que los Del Pino estaban pasando por una crisis económica y le pidieron ayuda a los Valles, estos decidieron financiarlos con un capital que representaba más de la mitad del patrimonio de la empresa, a cambio los Del Pino prometieron que pondrían el 50% de las acciones a nombre de ellos.»El problema es que estos nunca hicieron el traspaso de acciones, y los Valles eran muy confiados, nunca se imaginaron que los Del Pino no eran hombres de honor, por eso cuando tiempo después tuvieron el accidente donde murieron, los Del Pino vieron aquí la oportunidad de no cumplir con sus compromisos, porque las herederas estaban aún pequeñas y desconocían los acuerdos llegados con estos y los abogados que manejaban la información también fueron comparados. »No quiero ser portador de malas no
Erika sonrió con satisfacción al ver el rostro de su suegra, mientras esta retrocedía, desconcertada por las palabras de su nuera. No podía creer lo que estaba escuchando. ¿Cómo era posible que Julián le hubiera ocultado algo tan importante? Tuvo oportunidad de decírselo, cuando conoció a los niños y no lo hizo, negó con la cabeza con incredulidad, mientras se quedaba por completo en silencio.Erika notó la expresión de sorpresa, molestia en el rostro de su suegra y decidió darle más detalles.—Sí, doña Pierina, cuando usted fraguó el plan con Elisa para que yo viera a mi esposo acostado con mi propia hermana, el mismo día de su cumpleaños, yo iba a avisarle que estaba embarazada, justo pude concebir cuando me fui de viaje, y a pesar del accidente que planificaron para asesinarme, me salvé y mis hijos no sufrieron daños, nacieron hermosos, parecen mayores a su edad y uno de ellos tiene un coeficiente intelectual muy elevado, claro eso ya lo sabe porque usted los vio… ellos son mis hi