Alessia
Esperaba con ansias la llegada de Mathew, Levy estaba concentrado con la peli negra, ella le hablaba al oído y él sonreía levantando la vista de vez en cuando para ver mi reacción, pero ni en tu oscuro mundo amigo, de mí no obtendrás nada, era claro que estos se entendían muy bien.
Me acerque a Gina para matar el tiempo.
-Hable con Matt.
-¿Qué le ve? Que coraje yo me lo quería llevar, esta delicioso.
-Cálmate, no te lo recomiendo y no es de fiar.
-Pues si no lo quiero para casarme lo quiero para que me dé una buena...- lo decía mordiéndose el labio y eso de una forma me molestaba.
En ese momento llego mi salvación de la noche, Matt, haciendo acto de presencia con su uno ochenta de estatura, ese porte cualquiera voltea a verlo, conocía a mi familia por Gina. Me acerque a él, al verme sonrió y rondándome con sus brazos, dándome un beso en el cuello y en la mejilla, olía delicioso.
-Nuevamente Feliz cumpleaños Ale
-Gracias
-No me dejaste darte mi regalo, espero que después de la cena me dejes mostrártelo - me susurra al oído.
-¿De qué se trata?
-Es una sorpresa - nos estábamos riendo cuando mi padre se nos acercó junto con Serguey
-Buena noche señor - le extiende la mano a mi padre.
-Buenas noches ¿Cómo has estado?
-Bien gracias.
-Te presento a Serguey Rizzo un socio.
-Un placer Mathew Ozgue- antes de que lo acapararan lo tome del brazo para llevármelo.
-Padre llevaré a Mathew a saludar a mis hermanos.
-Bien vayan hija.
De la mano lo conduje junto a mis hermanos, se saludaron amigablemente es un chico lindo, si tan solo lo hubiera conocido antes.
-¿Eres el novio de mi tía Ale?
-Eso me gustaría ¿Qué piensas?
-Que eres guapo y mi tía Ale igual.
-Es verdad, es hermosa - Estos dos me hacen sonrojar
-¿Te vas a casar con ella?
Mis hermanos se ríen por las ocurrencias de Stella, pero tras de mi escucho que se cae un vaso a lo que no le tomo importancia.
-¿Te gustaría tenerme como tío?
-Si me das primos para jugar, sí, tío Fabrizio no quiere y dice el abuelo que ya está quedado viejo.
-¡Stella! - La reprende Gregory - no digas esas cosas.
-Lo siento papi - se va a jugar con sus hermanos
-¡Hermano! - Gina - dime, Ale no me lo quiere decir ¿Ya la puedo llamar cuñada?
-Gina por favor, ven mejor acompáñame al servicio - me la llevo casi a rastras.
Ya en los servicios sigue preguntando porque Levy es tan guapo.
-Basta ya no quiero escuchar su nombre, entendido.
-Está bien amiga, hay algo que no me has contado, porque ese dios griego no deja de verte y cuando entro mi hermano casi se lo come, que se le resbaló la copa de vino.
-History time Gina.
-Ale eres mi amiga y jamás te haría al desleal, solo es broma me conoces, no comería algo que alguna de mis amigas ya vomitó, pero mi hermano de verdad está loco por ti, con su ex no le fue bien, si vas a intentarlo está bien pero no lo quiero volver a ver como hace unos años.
-Gina, me conoces, sabes que tu hermano me gusta y estoy consciente de ello, lo que menos quiero es darle falsas ilusiones a una persona, solamente que llevaré las cosas paso a paso.
-Bien, espero que pronto seamos cuñadas, voy a ver a Ivette y a Ivonne antes de que se pierdan.
Me quedé pensando en lo que ella me dijo, Matt es todo lo que una chica común desearía, exitoso, guapo, pero algo faltaba, ¡ha! En que lío me metí.
Me sobresalto cuando abren de golpe la puerta.
-¿Qué demonios haces aquí?
Me toma de la cintura pegándome a la pared y pega su frete a la mía.
-Te he aguantado tus enojos, te he aguantado que no quieras hablarme, pero no voy a aguantar que ese bastardo te toque.
-¿Perdón? Con que derecho vienes a impedirme algo - trato de empujarlo, pero más se pega a mí, siento su calor, su olor, su aliento.
-Te tengo que recordar que eres mía - me besa, no es suave es busco como queriendo marcar a su presa, pero le muerdo el labio para que me suelte.
-No vuelvas hacer eso Levy, tú no puedes venir a impedirme nada, no somos nada recuérdalo y no lo olvides.
-Alessia mantente alejado de él si no quieres que lo mate.
-¡Atrévete y veras que pasa imbécil! Tú no le pones un dedo encima, no eres el rey del mundo, eres un mafioso y de mafioso a mafioso te lo digo, no me vuelvas a armar esta escenita Levy.
Lo veo apretar la mandíbula y apretar lo puños, lo veo colorado - A eso quieres jugar - me lo dice furioso.
-Yo no juego como tú lo haces Levy, no me vas a volver a tomar por algo in -sig- ni- fi-can-te.
-¡Carajo no quise decir eso! Yo... no ...
-¡Levy! ¡Cariño! - se escucha a sus piernas largas fuera de los servicios.
-Sal por la ventana, nadie te puede ver aquí.
-¡Que! - voltea a ver la ventana – no soy un cobarde y hago lo que quiero.
-Sal, no presumías eras sigiloso como una pantera, sal por la ventana y dile a tu novia que saliste a fumar.
-No lo haré.
-Sal Levy - Se quedaba mirando como queriendo seguir con la conversación - Ahora.
-Esto no queda aquí.
-Cuando quieras nos vemos la cara.
Me aliso el vestido y salgo mientras la mujer sigue recargada en la pared del servicio de los hombres.
-No te entrometas - me dice - él es mi hombre y ninguna Zorra me lo va a quitar.
-¿Yo quitarte algo?
-Sé que estas enamorada de Levy, que desde pequeña andabas de arrastrada por él, mientras él jamás mostró interés en ti, no paraste hasta que lograste meterte en su cama, pensaste muy estúpidamente que con que te quitara la virginidad él estaría a tus pies, ja, pobre ilusa, pero sabes algo, él solo lo hizo para...
-¡Shura!
-Cariño aquí estas - le dice lanzándose a sus brazos, mientras él me observaba- ¿Podemos irnos? Aquí está lleno de zorras.
- Querida - le digo sonriendo - un consejo, deberías tenerle miedo al Zorro no a la zorra, y si, por piedad váyanse yo no los invite, solo una cosa aquí no está llena de zorras, es tu perfume.
Con eso los deje en el pasillo para ir con mi familia, he de admitir que lo que me dijo lo he pensado y sentido todos estos años, ilusa Alessia que pensó que podía tener el amor verdadero a primera vista.
Alessia¿Pero quién se cree para decirme todo eso? Imbécil, él y su descerebrada novia.-Al, ven hija – me dice mi padre quien platicaba con Matt – ¿Te sientes mal?-Claro que no padre ya sabes cómo somos las chicas, la belleza, ante todo.-Bien, Matt me acaba de decir que te tiene una sorpresa.-Señor Bianchi, si no hay un inconveniente quiero llevar a Ale para darle su regalo.-¿No estas cansada cariño? – del pasillo sale Levy con su piernas largas.-Desde luego que no padre, estoy ansiosa de saber ¿qué es? – lo digo en voz alta y sonriendo.-Bien si es así adelante, cuídame a mi hija Mathew.-Desde luego Señor.-Iré a despedirme ¿me acompañas Matt?Mi familia estará dos semanas por lo que tendría tiempo de pasarla con ellos, llene de besos a mis sobrinos y mis amigas ya habían creado sus planes, irían a terminar la fiesta en un antro.Levy no se iba, cuando pase cerca de ellos escuche cuando la mujer le decía que pasarían una noche formidable. ¡ja! no serás el único.Matt tomo mi a
Alessia.FlashbackFlorencia cinco años atrás.Estaba saliendo del colegio, Basilio ya me esperaba para ir a casa, mañana era fin de semana y lo mejor de todo mi cumpleaños diecinueve, cada cumpleaños me daba emoción celebrarlo, no tanto por los regalos sino porque todos llegaban y convivíamos.-¡llegue! - Entre feliz, mis sobrinos llegaron corriendo torpes en su caminar, se veían curiosos, Carmina me dijo que Fiore y Papá estaban en el viñedo.Me encantaba la casa, el aire puro, la libertad que brindaba era música a mi alma, Salí corriendo para ver que hacían.- ¡Hermana! - Me lance a abrazarla y llenar de besos a mi padre.- ¿Qué tal el colegio? - Fenomenal, estoy feliz de terminar para empezar la universidad.-Nos da gusto mi niña- dice mi padre – sé que lo harás bien, estamos muy orgullosos.-Señor – llega Basilio – han llegado los Rizzo – al escuchar eso mi corazón empieza a retumbar, mis mejillas se acaloran y mi sonrisa crece, eso significaba que él había llegado.-Bien voy p
...Un mes había pasado, un mes en el que nunca me llamo, ni me mandó un mensaje o algo que me hiciera pensar que aún se acordaba de mí, yo tampoco lo hice. Me sentía apagada, sin ánimos, mis amigas me contaban lo felices que eran con sus parejas, visitaba a menudo a Fiorella involucrándome en el negocio.A unos días de terminar el curso, llegué a casa temprano y vi a mi padre pensativo, su ánimo era igual que él mío.-¿En qué piensas padre?-En lo afortunado que soy y en lo feliz que me hace verlos crecer.-¿Esta sentimental mi papi? – lo abrazarme porque necesitaba un abrazo tanto como yo– todo estará bien.-¿De verdad quieres ir a Londres a estudiar? Aquí también hay muy buenas universidades.Opte por ir a Londres a estudiar, estando aquí no iba a sanar, necesitaba ir a conocer más personas, nuevas cosas, nuevos aires.-Lo se padre, pero es Oxford, además ahí está la familia de Gregory, te queda cerca que atravesar un océano, vendré constantemente.-Es verdad mi amor, no debo ser
AlessiaMatt condujo rumbo al aeropuerto algo que no cuestioné, lo que había pasado en mi cumpleaños me recordó lo que sucedió en mi cumpleaños diecinueve, el peor de todos, de él aprendí que nunca debes dar por sentado algo, fue el trago más amargo que tuve que pasar, jamás me habían tratado de esa forma.Sacudo mis pensamientos, he hecho mucho esfuerzo de olvidar lo sucedido para que vuelvan a mí en este momento, aunque realmente algo así no se olvida, lo que importa es ahora, el presente y con quien quizás me pueda dar una oportunidad, ¿Qué nos depara el futuro? No lo sé, disfrutar eso es lo que se debe hacer, para que lamentarse lo que pudiera ser o no ser, Levy Rizzo fue una ilusión, un anhelo que yo misma lleve al cielo del cual caí de golpe.-¿Por qué estamos en el aeropuerto?-Sorpresa.-¿Me vas a dar un jet? – me comencé a reír.-Claro que lo tendrás, pero por el momento tu regalo no es eso hermosa.-Ya en serio ¿por qué estamos aquí?Sale del auto, le da la vuelta y me abre
Levy RizzoMe lleva el demonio, estaba furioso, se había ido con ese… imbécil ¿no decía amarme? ¡ha! Pero que estoy pensando debería de estar concentrado en como recuperar lo que es mío, ya le di demasiado tiempo y espacio, no dejaré que esa mosca molesta la siga rondando, lo aplastaré como le he hecho con todos los que han puesto los ojos en ella.No podía dormir y menos quería estar en la cama, me desesperaba el pensar ¿Qué estaban haciendo? ¿A dónde se la había llevado? Valentino accedió a dejarla ir eso me da a entender que ya lo conoce de tiempo atrás. Me levanté para ir a tomar una ducha el agua helada y pensar con la cabeza fría, vienen a mí los recuerdos de hace cinco años, cuando la desflore, tan tímida, su cuerpo menudo, piel suave, labios dulces y carnosos que aún muero por comérmelos, en el baño del restaurante no puede aguantar más, tenía que volver a besarla.¡Maldita sea! - golpeo la pared - hay tanto que ha pasado desde ese día, tenía diecinueve y yo veintidós. No éram
ALESSIA Después de instalarnos en la habitación y descansar, me despierta con sus besos que recorren mi cuello, mantengo cerrado los ojos para disfrutarlo, deslizo mis manos por su ancha espalda.-Hola, despierta necesitas comer preciosa.Gimo sin ganas de abrir los ojos – dame cinco minutos.Se ríe – vamos, ya pedí el desayuno, tenemos mucho por hacer, podemos salir a recorrer la playa y conocer el lugar o prefieres que nos quedemos en la habitación, por mí no hay problema estoy para complacerte, es para ti este viaje. Es tu regalo.-En cinco minutos estoy lista – le digo entre risas ya que me hace costillas su barba.Salimos a la playa, el lugar es hermoso, cálido a diferencia del frió de Londres, siempre había querido venir con mi familia o con mis amigas.Me llevó a un restaurante con vista al mar, después de una larga caminata curioseando por los locales la sensación de libertad es única.-¿Qué te parece?-Hermoso definitivamente.-Me alegra que te guste, es para que lo disfrute
AlessiaDespierto con los ojos vendados y las manos atadas recostada en una superficie blanda, trato de no moverme para escuchar, mantener la respiración rítmica a modo que crean que sigo dormida, se escuchan pasos y el crujir de la madera, eso me da indicio de que estamos en una cabaña por lo tanto en medio de la nada.-Sigue dormida - no reconozco la voz pero si el acento, es italiano el único enemigo que tenemos son los Moratti a menos que sean contratados.-¿Qué tanta de dosis le diste? Creo que se te excediste - este otro no es italiano.-Lo necesario para cinco horas - cinco horas, entonces ya es de madrugada o a punto de amanecer.-¿Cómo sigue Dante del golpe?-Esta con la bolsa de hielo en las bolas- le hubiera dado más duro, malditos cerdos.-Déjala dormir, el jefe no tardará en llegar. -Desde luego - pasa sus manos por mis piernas.-Cálmate, no puedes tocarla.-Que mierda, esa mujer es el infierno ¿crees que estarla vigilando todo este tiempo y verla como se la comía el imb
LEVY RIZZO¡Maldita sea! Esto era una declaración de guerra, la alianza entre los tres grupos está clara, si atacaban a uno los dos más le darían la espalda, prácticamente era un suicidio. Los Moratti no tenían limite, siempre han querido acaparar el mercado de las armas, drogas y fármacos, cada uno tenía su negocio definido eso nos mantenía en la línea.Lo último que sabía era que estaban en el tráfico de esclavas y damas de compañía en el inframundo del coliseo, se ofertaban mujeres de todo el mundo. Los Bianchi están en contra de ese tipo de negocio, mi madre nos cortaría las bolas si se enterara de que ponemos interés en ello, además es algo que llama mucho la atención de la policía, sobre todo por que muchas familias buscan a sus mujeres y eso causa ruido en la prensa.Se gana mucho dinero, vender mujeres a acaudalados hombres del inframundo era la manera más fácil de obtener ganancias exorbitantes, sobre todo mujeres de buena familia, hijas de capos o políticos y sobre todo vírg