Se detuvo abruptamente al ver los árboles de la entrada adornados con luces hermosas y debajo de ellos una mesa alargada adornada con velas dando un ambiente absolutamente romántico que cargó sus ojos de lágrimas, incrédula dejó escapar el aire de sus pulmones cuando escuchó que una melodía familiar resonaba y dio un respingo al sentir a alguien detrás de ella tomándola por la cintura.— ¿Aceptas bailar conmigo, cariño? —preguntó con un susurro en su oído.Susurro que la erizó por completo.Con un nudo en la garganta ella asintió con la cabeza y rápidamente Valerian la giró estando frente a frente con ella en sus brazos comenzaron a moverse al ritmo musical.—Callie, realmente quiero ser el amor de tu vida —habló él mientras que inhalaba su dulce aroma femenino.Callista no podía creer que él aún recordaba que aquella canción era su favorita, se lo había dicho cuando hablaban sin parar de tonterías, también le había dicho que esa canción significaba tanto para ella y que algún día le
Valerian no dejaba de ver a su compañera danzar de un lado para otro con los preparativos para la navidad, se reía al verla tan histérica y a la vez adorable sin embargo no recibía de ella más que miradas enojadas y fruncimientos de ceño.— ¡Ayúdame o te juro que no comerás absolutamente nada! —gruñó ella.Él arqueó su ceja divertido no obstante se levantó a poner la mesa, de sobra sabía que cuando su mujer hacía una promesa en su momento de histeria lo cumplía a como diera lugar. También había escuchado a Callista platicar con Katryna y sabía porque se encontraba de esa manera tan irritante a parte de lo obvio, es decir, su embarazo.—No sé que voy a regalarle a Val, quiero darle algo especial, que él ame y valore, algo que de verdad lo haga sonreír pero no tengo ni idea de que darle. Quiero que todo sea perfecto esa noche, es la primera que pasaremos juntos.Él sonrió ante el recuerdo, su Callista era toda dulzura pero a él poco le importaba si le daba un regalo o no, 135 no querí
—No puede ser —escuchó que Rosie murmuró.—Al parecer se le cumplió el deseo —murmuró 135 en medio de su desconcierto.—Es imposible —dijo temblorosa.—Valerian he invitado a Leo, Tanner, Kindness y a su compañera ¿No te molesta o sí?— ¿Compañera? —preguntó con voz rota Rosie.— ¿Qué...?Pero antes de que pudiera hablar Kindness ya estaba tomando por el brazo a Rosie a la vez que murmuró un ''tenemos que hablar'' con voz gruesa.— ¿He metido la pata? —preguntó Callie viéndolos irse. —Nada que no se soluciones con una buena cena —mintió para no hacer sentir mal a su compañera.Con el rostro afligido ella asintió.—Entonces vayamos a por ella niños, ¿Quieres ayudarnos? —le llamó la atención a sus sobrinos.Los niños asintieron emocionados y Valerian supo que Callista había encontrado rápidamente el parecido del niño con Kindness, su compañera era muy lista. —Me siento un poco mal Val.El cambiaformas tomó su mano y depositó un beso en ella.—No ha sido culpa tuya.—Da igual, Rosie va
Callie entornó los ojos fastidiada ante el ruido de la música. La estaba desconcentrando, necesitaba terminar de escribir el capítulo de su novela y justo cuando tenía centenares de ideas tenía que asistir a esa jodida fiesta.Maldito Keith.Aunque su hermana también se merecía un poco de mierda.¿Cómo había sido tan tonta? Por su novio se metió en un serio problema del cual no podía salir con facilidad lo que la tenía de nervios, su hermana era la persona más importante para ella y por eso odiaba a Keith Piters.De todas formas no hubiese estado allí de no ser porque le debía un favor a Valentina, le molestaba el tumulto y el ruido. Alzó la vista de su móvil sintiendo una pesada mirada encima y frunció el ceño al no ver a nadie a su alrededor.Se había apartado lo suficiente de dónde se estaba celebrando la boda sin embargo la música la perseguía.Volvió a fijar su vista en el teléfono tecleando con rapidez sus ideas hasta que una voz detrás de ella la puso en alerta.— ¡Valentina.
Y como lo había pensado pasó.Valentina la había llamado por la mañana histérica diciendo una sarta de cosas que realmente fueron ignoradas por Callista quien había dejado el teléfono en altavoz mientras se duchaba, solo había alcanzado a escuchar que iría a su casa. Al llegar su hermana Callista se había sentado en el mueble mirándola caminar de un lado al otro casi absorta a su presencia.— ¡¿Me comprometiste con un cambiaformas?!Callista contuvo una risa burlona mordiendo el interior de su mejilla.— ¡¿Yo?! Por el contrario hermanita, yo trate de que no aceptara esa locura de Theo pero conoces mi personalidad encantadora y lamento decirte que lo atraje aún más.Valentina la fulminó con la mirada queriendo echarle las manos al cuello y ahorcarla.— ¡Voy a matarte!La menor entornó los ojos, fastidiada.—Hablando enserio, Theo no me contó nada hasta que se dio cuenta que era yo y no tu. Y respecto al cambiaformas, no hablé mucho con él pero debo decir que es caliente como el infie
A pesar que 135 llevaba un largo tiempo hablando con Valentina y que ella más de una vez aseguró que estaba de acuerdo con la decisión de su padre, él no le creía. Estaba casi seguro que para la chica sería una bendición que él se negara a desposarla sin embargo eso no cabía dentro de sus posibilidades, si quería la información que había pedido a Theo Kafieri tenía que pagar por ello, pero eso no disminuía su culpabilidad. ¿Estaría Valentina Kafieri amenazada por su padre? 135 no lo sabía pero seguro que lo descubriría pronto.Durante el tiempo de su charla pudo conocer claramente las diferencias entre las hermanas, Valentina se notó evidentemente nerviosa ante su presencia cosa que no lo sorprendía, siempre había sido de esa forma desde que era un pequeño, incluso sus captores rehuían de su mirada cuando sus felinos ojos se posaban en ellos. Y es que 135 emanaba un salvajismo, poder y peligro tan fuerte que todos le temían no obstante el miedo se intensificó cuando comenzaron a lleva
—Es una decisión tomada entonces —Azuzó Theo con una sonrisa en sus labios.135 no estaba tan seguro de eso pero no había hablado más con Valentina y no había sabido cómo responder a la insistencia del griego, así que no le quedó otra opción más que aceptar su matrimonio con la segunda Kafieri.No quería casarse, pero debía hacerlo, de otra manera no obtendría lo que tanto anhelaba, su identidad.—Si Valentina me acepta.— ¡Lo hará, que no te quepa la menor duda! —Exclamó con rapidez haciendo dudar una vez más al cambiaformas—, tenemos que preparar el compromiso.— ¿Compromiso? —preguntó frunciendo el ceño, el matrimonio entre los cambiaformas se hacía cuando el macho enterraba sus colmillos en el cuello de la hembra reclamándola como suya y ya no habría vuelta atrás, ni el hombre ni la mujer implicados podía tolerar el toque de otro que no fuera su pareja, aunque muchos de los suyos también se casaban de la forma humana no habían compromisos, solo casamientos—. Aquí no hacemos eso.—
El macho contempló aturdido el par de ojos color aguamarina que lo miraban fijamente sin perderse ningún detalle de sus duros rasgos, su pequeña boquita se había abierto levemente ante la perturbadora presencia masculina que estaba justo delante de ella. Con rapidez movió su cabeza en dirección de Rosie ocasionando que su rubio cabello chocara contra su delicada mandíbula.Su ceño se frunció al ver la cercanía de su madre con el macho y se cruzó de brazos pidiendo una explicación silenciosa.A 135 le causó una gracia voraz al sentir el olor de los celos proveniente de la pequeña Love, sintiendo una ternura infinita quiso abrazarla y enterrar su cara en los dorados rizos pero pronto descartó eso, si se atrevía Sarah estaría demasiado asustada como para querer conocerlo.Se sorprendió a sí mismo por la mezcla de sentimientos que ella le había despertado de pronto así que movió la cabeza tratando de aplacar todos esos locos pensamientos, le estaba pasando lo que le sucedía con el resto