AurenEl castillo se siente más grande cada día, pero no porque sus muros sean tan imponentes o sus pasillos interminables. No. Es la cantidad de secretos que se esconden dentro de esas paredes lo que me hace sentir tan pequeña. Los murmullos a mi alrededor son como ecos lejanos, invisibles pero palpables. Cada conversación, cada mirada furtiva, me hace más consciente de que aquí, entre sombras y máscaras, nada es lo que parece.Al principio, me concentré solo en lo evidente: la política, las alianzas, los movimientos estratégicos. Pero, cuanto más me adentro en este mundo, más descubro que hay algo más. Algo oscuro, algo peligroso. Cada rincón del castillo guarda una verdad que no quiero conocer, pero que debo. Y, por alguna razón, me he convertido en el centro de ese juego. El tablero está siendo movido, y aunque la mayoría no lo ve, soy la pieza más importante.Pero no puedo apartarme. No ahora. La curiosidad, esa maldición que me consume, no me permite descansar. Y si bien la amen
Leer más