VERONICAMe quedé allí, desnuda y esperando, durante lo que parecieron ser 10 minutos eternos. Mi amo, Bruno, no hacía nada, no decía nada. Me estaba desesperando.Me había preparado para recibir azotes, para que me golpeara, para que me dijera algo, cualquier cosa. Pero no, solo estaba allí, en silencio, detrás de mí.No sabía cómo funcionaba esto de ser sumisa. Solo había leído sobre ello en novelas y lo había visto en películas. Pero la realidad era muy diferente.. Mientras tanto, sentía su presencia detrás de mí, calentándome, consumiéndome, excitándome. Mi intimidad estaba completamente húmeda, y no entendía cómo mi cuerpo reaccionaba de esa manera con alguien que no había hecho nada, solo mirarme.Me sentía confundida, frustrada y excitada al mismo tiempo. No sabía qué esperar, ni qué hacer. Solo podía quedarme allí, esperando, y dejando que Bruno me guiara en este juego de sumisión y dominación.Me quedé allí, esperando, mientras Bruno se movía detrás de mí. De repente, sentí s
Leer más