LucíaEl eco de las palabras de Dante sigue martillando mi cabeza.Nico es mi hijo. Y voy a encontrarlo.Las dijo con tanta convicción, con tanta rabia, que aún siento la vibración de su voz en mis huesos. Sé que Dante no amenaza en vano, y eso me aterra.Pero también sé, muy en mis adentros, que él no lastimaría a Nico. Que no le haría nada, pero esa mujer... si él va a casarse con ella, entonces ¿Quién va a cuidar de mi ángel? porque esa vibora sería capaz de todo y no pienso permitirlo.Yo haria todo por mi pequeño, lo he hecjo desde siempre, para proteger a mi hijo, pero a diferencia de como eran las cosas antes, ahora por primera vez en mi vida tengo algo con lo que puedo responder.Poder.Y si quiero proteger a Nico del mundo de mierd4, de Esteban de Sofía o hasta del mismo Dante, necesito abrazar ese poder. No como una sombra, no como un arma de defensa, sino como algo que realmente me pertenezca.Han pasado más de dos semanas desde que llegué a Rusia, y aunque no quiera admitir
Leer más