Todos los capítulos de Accidentalmente Enamorada de mi Jefe: Capítulo 11 - Capítulo 14
14 chapters
Jefe-secretaria
Al ver que no decía nada, él entró en el despacho. Ella se dejó caer sobre su silla mientras las lágrimas recorrían por sus mejillas sin ningún control. Apretó los puños sin importarle clavarse las uñas en las palmas. No quería que ese hombre estuviera en ese lugar. ¿Debía contarle a Bergman lo que le hizo cinco años atrás? ¿Y si no la creía? De pronto, sintió una arcada. Se levantó de la silla y se dirigió hacia el baño. Recordarlo siempre le entraban ganas de vomitar. Estuvo vomitando durante varios minutos mientras que las lágrimas seguían recorriendo por sus mejillas. “Si él comienza a trabajar aquí… me iré. No quiero que me pase lo mismo…. No podría superarlo de nuevo…” pensaba ella mientras vomitaba. Al detenerse, apoyó en la pared del cubículo.
Leer más
Soberbia
A la mañana siguiente, Aidé se encontraba en la cafetería de la empresa junto a Manuela mientras que ésta le contaba lo que había pasado el día anterior. Después que ocurriera aquello con Bergman, Aidé se quedó en casa, metida en la cama y sin salir en todo el día hasta que su hijo regresó del colegio. Por suerte, no había nadie cuando había tenido aquel tórrido encuentro con el alemán.—Pues como te lo encuentro. Elías amenazó al señor Gasco y le dijo que como intentase lo mismo que hace cinco años… se las vería con él – contó Manuela. — ¿Me estás escuchando, Aidé? – Insistió Manuela al ver la mirada de su amiga.—¿Qué? Perdona, Manuela. Estaba pensando en otra cosa – respondió Aidé.Después de lo ocurrido con B
Leer más
Deshacerse de él
Aidé paseaba por la Plaza Trinidad que se encontraba entre la calle Duquesa y la calle Mesones y caminó en dirección a la tienda de Shana, pero no se iba a comprar nada de ropa. Le gustaba ir a esa tienda porque era barata y le gustaba la ropa… pero no todas. Tenía su mente concienciada de que todo el dinero que ganaba era para su hijo, sus medicinas y para un futuro tratamiento y para una futura operación. Ella se tenía que conformar y comprarse la ropa en el Primark. Entró en la tienda y ojeó la ropa que nunca se compraría. Entonces recordó que el vestido de novia que Bergman le había comprado. “Con el dinero que se gastó en el vestido, hubiera pagado un tercio de la mitad del tratamiento… incluso me hubieran dado la plaza para el tratamiento” pensó y suspiró mientras se detenía en unas camisetas. Volvió a suspirar. Miró su reloj y al ver
Leer más
Zona íntima
Aidé subió las piernas encima del sofá cuando regresó al salón de acostar a su hijo. Sabía que no debía pensar en lo que había pasado en la farmacia del padre de Alfonso, pero no podía evitarlo. ¿Quién era el hombre que se lo había llevado? ¿Era cierto que era un policía en cubierta? Se abrazó las rodillas y apoyó la cabeza en ellas con la mirada entrecerrada. Nunca pensó que volvería a verlo tras cinco años. Suspiró despacio y sin dejar de mirar a la nada. En esos momentos deseó que Alfonso estuviera a su lado, pero también se alegraba que Bergman le hubiese ayudado cuando más lo necesitaba. Se sorprendió al pensar en él y sacudió la cabeza para quitarse el recuerdo de sus manos por su cuerpo. Sólo había pasado un día, pero todavía tenía esa sensación que le rec
Leer más