CAPÍTULO 34. CELOS DE ADRIANA
En Cabimas, en el apartamento de Luisa—¡Para mí también, lo es! —respondió Mateo sin dejar de sonreír.—Soy Luisa Gómez, madrina de Raquel, la amiga de Adriana —se presentó ella, estrechando la mano de él— ¡Por favor, siéntate, estás en tu casa!—¡Disculpa Luisa! ¿Te puedo tutear? —interrogó él, mostrando todo su encanto, sentándose en el sofá a un lado de ella, ignorando a Adriana.—¡Sí, claro Mateo! Creo en todo caso, la halagada soy yo —manifestó ella, totalmente impactada con él y sin disimulo. Esto despertó en Adriana obviamente, el gusanito de los celos nuevamente.—Para empezar, te ofrezco mis disculpas —explicó avergonzado— Mi visita ha generado un escándalo. Te juro, que no es mi estilo, pero hay cosas que no puedo aceptar —comentó, con desagrado, mirando a Adriana, de pie al borde de la puerta esperando que él se fuera.—¡Tranquilo y quédate ahí! —Solicitó esta, ante el intento de él de levantarse— ¡Vamos a hablar como personas civilizadas! —comentó ella, con una encantad
Leer más