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Todos los capítulos de OBSESIONADO CON ELLA : Capítulo 1 - Capítulo 10
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PRÓLOGO
Los Ángeles-California, un viernes por la noche... —Mira Sibel… mira esta sincronía tan perfecta… —Aston señaló una ronda de estrellas, mientras Sibel amplió su sonrisa y siguió su dedo dibujando el cielo negro.—Es… maravilloso… —Aston se giró hacia ella y asintió, embelesado por su belleza.Ambos estaban sobre una manta en medio de la nada, escapados de alguna forma, porque era la única manera en que podían encontrarse. Entonces, él acarició su mejilla y susurró:—¿Sibel? —ella se giró encontrando sus ojos grises, mientras algunos mechones de su cabello enmarañado, caían en la frente de Aston, dándole un aspecto juvenil, a pesar de que ya tenía 28.—Dime…—Por favor, no olvides que movería el cielo y la tierra por ti… —Sibel amplió más su sonrisa y luego le dio un beso en la nariz.—Nunca lo olvido… pero, creo que es hora de irme… —Aston frunció el ceño, y ella pudo notar como el aspecto de su rostro cambió significativamente—. No te enfurruñes… ya sabes cómo es…Aston asintió y lu
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CAPÍTULO 1
Iván bajó la mirada de forma lenta y detalló los pies de Sibel en sus sandalias bajas, como cualquier colegiala, junto con un jean desgastado que arropaba sus piernas. Apenas tenía una blusa holgada, y se veía delgaducha con su vestimenta suelta.Sin embargo, él sabía perfectamente sobre su contextura perfecta. Cuanto había en sus pechos, la delgadez de su cintura, y el tamaño de sus glúteos tonificados.Se sabía de memoria sus tiempos y rutinas, los horarios de clase y cuál era su puesto preferido en el aula de la universidad, y como le costaba levantarse temprano todos los días para cumplir sus obligaciones.Habían pasado años desde que había estudiado a esta chica de cerca, desde que su padre la presentó en la sociedad millonaria cuando apenas tenía quince años, y cuando, junto a su abuela, habían dado inicio a su venganza.Sus ojos se detuvieron en los labios entre abiertos, y notó como su cuello palpitaba rápido. Podía oler su miedo desde su distancia, y él conocía perfectamente
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CAPÍTULO 2
La pupila de los ojos de Sibel se ensanchó considerablemente y ella sintió cómo sus mismos huesos se estremecieron.¿Esclava? ¿Sirvienta? ¿Quién era este hombre para pretender semejante cosa?Sin decir una palabra, Sibel solo miró por el rabillo de los ojos, como la gente a su alrededor se movía, mientras ella no podía quitar sus ojos de aquel hombre. Él seguía de pie diciéndole con la mirada que ella sería polvo en sus manos, y sintió una necesidad grande del saber por qué.En algún momento, una mujer se detuvo delante de él y le entregó una especie de vestimenta doblada, pero él no la tomó, sino que la detalló con recelo para decir.—Toma la ropa… ve con ella a donde dormirás… y cámbiate por la mañana.Ella pasó sus ojos al montículo de las manos de la mujer, y notó que era una especie de uniforme.—Yo… no estoy entendiendo.—¿Qué no has entendido? Se supone que eres la más inteligente de tu familia… una que firma un papel solo porque un maldit* se estaba ahogando… era mejor que lo
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CAPÍTULO 3
Sibel estaba estresada, cansada y con una irritación en su cuerpo, como para soportar este tipo de humillaciones, tenía miedo sí, pero este hombre ni siquiera estaba cerca de conocerla tampoco. Ella no sabía en qué punto el peligro podría estar rondándola, pero si él hubiese querido matarla desde un principio, ya estaría muerta. Alzando su barbilla, le dio una mirada retadora, y luego tomó un sartén que encontró al azar. Sin quitarle la mirada partió unos huevos directos en la cazuela, y con un tenedor, rastrilló batiendo de mala gana. Incluso no dejó que se cocieran bien cuando los sirvió medio crudos en un plato, y luego lo puso en la encimera cruzándose de brazos. —Desayuno listo… Señor… que tenga buen provecho —Iván bajó la mirada a la comida con muy mal aspecto, y luego sonrió. —Perfecto… ahora cómelo. Sibel amplió su sonrisa cerrada, asintiendo sin dejarse amedrentar, luego tomó el tenedor, y se metió los huevos medio crudos en la boca sin apartar la mirada de él. —Exquisi
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CAPÍTULO 4
Sibel estaba a punto de saltar de un muro, que ahora estaba notando demasiado alto. Sus piernas temblaron con anticipación y ella pensó que podría romperse las piernas con este salto, pero estaba segura de que podía irle peor si se quedaba. Tomando una aspiración fuerte, se limpió una lágrima, pero el grito a continuación, hizo que detuviera su pie. —¡Sibel MacMillan…! —ella se giró un poco y notó a Iván caminando de forma lenta hacia ella como si tuviera el control absoluto, sacando su teléfono celular y mostrándolo—. Una bala... una directa al cráneo de tu padre ahora mismo con mi orden... Sibel apretó la boca estremeciendo su cuerpo, para negar. —Uno... —Iván comenzó a contar—. Dos... Sibel miró hacia adelante notando como esa mujer mayor, que se veía bastante conservada, se detenía a mirar la escena. Se cruzó de brazos y achicó los ojos como si esperara su acción. —Tres…—¡Bajaré…! —se apresuró a decir, mientras Iván asintió con una mirada asesina.Él ordenó abrir los p
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CAPÍTULO 5
Había pasado horas desde que la señora de servicio cerró la llave de agua. Sibel estaba sentada con las manos atadas, colgando aún en la pared, mientras su cuerpo, frío y tembloroso, se adaptaba a la situación. Este castigo no la doblegaba nada, ahora solo tenía ganas de ser más fuerte, incluso solo esperaba a ese hombre para mirarlo. Necesitaba hacerlo para que se diera cuenta de que con ella nunca iba a poder, y que de seguro debería pensar en matarla antes, en convertirla en nada en sus manos. Sibel se preguntó cómo estaría su familia, si estaban buscándola como unos desesperados, así como ella sufría por ellos. Pensó en su padre, y tomó el aliento. ¿Qué podía deberle? ¿En qué lío oscuro estaba metida su familia para que una persona, como la abuela de Iván, los odiara tanto? Ella intentó acomodarse al otro lado. Sus muñecas estaban dormidas, todo su cuerpo estaba adolorido, cuando escuchó la puerta, y se puso alerta. Se levantó con dificultad, y con las mismas muñecas amarradas
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CAPÍTULO 6
“Ha pasado algo grave… mi familia está problemas, yo…” Sibel se frenó.¿Cómo le explicaría tal cosa?“No estoy con mi familia, alguien nos quiere hacer mucho daño, mañana saldré a algún lugar, tal vez pueda hablar contigo en algún momento, te enviaré la ubicación”Sibel envió el mensaje, pesé a que podía ser muy peligroso para Aston, sin embargo, necesitaba decirle el motivo de su desaparición. Ella vio que llegaron algunos mensajes, pero apagó el móvil sabiendo que debía aprovechar su carga.A la mañana siguiente, cuando abrió los ojos, una mujer estaba entrando a su habitación, colocando algunas prendas encima de una mesa.—Buenos días, señorita… el señor la espera en media hora en el comedor principal…Sibel se levantó rápido, y tomó la ropa para irse al baño fuera de la habitación.La indumentaria solo eran unos pantalones holgados, unos tenis y otra camiseta. Tal vez Iván quería pasarla desapercibida. Y aprovechó en guardar su teléfono en la ingle para enfrentar el nuevo día.—Ll
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CAPÍTULO 7
Exactamente, cuando Armand iba a contestarle al abuelo, la pantalla se apagó y Sibel puso las manos en la mesa ante la ansiedad. —No… —ella se giró hacia Iván que la miraba detenidamente. Estaba examinando su reacción ante esa información, incluso él nunca miró a la pantalla. Algo estaba haciendo Sibel en ese baño, y lo único que pudo pensar, es que él mismo había olvidado un detalle. Su novio… —Debe haber un error… mi abuelo es… Iván le mostró la palma con un poco de fastidio. Cuando él maquinaba en su cabeza, detestaba cortar. —No vine aquí a entablar una conversación contigo, ni a prestarte mi hombro para que llores tus desgracias de tu maldit@ familia. La situación es como es… Armand, tu adorado padre, te ha mentido todo este tiempo. Sibel se levantó: —Él es mi padre… tenemos el mismo tipo de sangre… tú no… no vas a engañarme… Iván sonrió moviendo la silla de lado, y luego se levantó arrinconándola contra la mesa larga. —¿Y quién dijo que tu abuelo habla sobre la paternid
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CAPÍTULO 8
«Será por poco tiempo, cariño… por favor resiste…»Sibel escuchó la última frase de su padre en su mente, mientras unas lágrimas cayeron en sus mejillas. Iba en una camioneta, junto con guardias a su lado, y ella no pudo hacer, sino pegarse a la ventanilla, y abrazar su cuerpo.Ella sabía que él no podía enfrentarse a este hombre, no cuando era un mafioso, e incluso estaba rodeado de todo ese poder. Su padre nunca podría rescatarla, así que tendría que salir de esto por sus propios medios.Se bajó de la camioneta y caminó por la mansión. Se detuvo mirando a su alrededor, pero no vio a Iván por ninguna parte.Entró al baño con urgencia y lo primero que hizo fue revisar el teléfono que Aston le dio.“Dame un nombre, dime el nombre de la persona que te tiene en esto”Sibel tecleó rápido.“Iván Vasíliev”Los golpes en la puerta alertaron su atención, y en vez de guardar su móvil en su cuerpo, ella prefirió buscar un lugar, dejándolo en silencio. Y la ventanilla, fue su mejor opción.Se la
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CAPÍTULO 9
Su juego había comenzado. Sibel no contaba los días, pero habían pasado semanas, cabizbaja, obediente, y silente hacia todo lo que Iván le ordenara. Las humillaciones primero eran privadas, pero en vista de que ella no demostraba siquiera un atisbo de emoción por nada en lo absoluto, Iván comenzó a sacarla, y a mostrarle al mundo, que Sibel MacMillan, era literalmente su sirvienta. Eran las ocho de la mañana cuando se bajó a colocar las medias y los zapatos de Iván como rutina, se levantó a ajustar su corbata mientras sentía el aliento caliente de su respiración encima de ella, y esa mirada que ni siquiera la dejaba dormir por las noches. Fue en busca de su chaqueta, y cuando se puso detrás de su espalda, escuchó: —Hoy iremos a un bar… te mostraré algo… —Sibel sintió la puntada en su estómago, y después de semanas de sumisión, esta era la oportunidad que estaba esperando. No pudo evitar sonreír. Incluso ni siquiera se dio cuenta de que Iván había girado hacia ella y estaba notand
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