El suicidio de un ser querido, puede ser emocionalmente desbastador, las emociones de sufrimiento, ira, confusión, y mucha veces de culpa, te consumen. Patricia, no sabía cómo mantener el control, su entrenamiento de meditación no la ayudaban mucho, trató de visualizar, de respirar, pero siempre volvía la misma imagen, las dos copas de vino sobre la mesa, el frasco de pastillas para dormir, y la madre de su amigo sobre el suelo, inerte, sin vida; se preguntaba si pudo haber hecho algo para evitar la muerte de Susana.Antes de darse cuenta, ya era la hora de salir, la esperaba Alejandro en la entrada del edificio. Se había colocado su vestido negro a media pierna, ceñido a su cuerpo que resaltaba su perfecta figura, su cabello rojo rizado, caía sobre su espalda, se miró al espejo de la habitación, su rostro lucía triste, pero también la embriagaba el miedo. Miedo de que sus sospechas fueran verdad.Las palabras de Duly rondaban por su mente sin parar, unidas a las de Alejandro: -Le d
Leer más