49. POR ÚLTIMA VEZ
Max buscó ayuda a su alrededor con la mirada. No era natural en su especie el ser demasiado emotivo, pero eran pocos, tan pocos que aquel reducido círculo en que él y los otros se habían refugiado desde su nacimiento, que implicaba una dimensión diferente y superior a las relaciones familiares.Ninguno conocía más amigos o parientes que los miembros del destacamento. Ninguno había sido convertido por un sorian extraño. El Comandante, Rianna y Garth habían sido los padres y los hermanos de todos ellos. Los unos a los otros era todo lo que tenían en el mundo.Y la cabeza de aquella familia estaba agonizando sin que pudieran hacer nada.— No, no, no, no… ¡otra vez no! — Dominic intentaba retroceder en vano y de nuevo ocho sorian debieron utilizar toda su fuerza para mantenerlo inmóvil y clavado al montón de nieve, mientras su amigo se arqueaba e
Leer más