La esposa descartada del magnate y su hija secreta
Para Axel Won, su matrimonio con Carolina Langford no fue más que una farsa, una estrategia egoísta para recuperar a la mujer que en realidad amaba . Sin embargo, para Carolina, aquel vínculo representaba todo: su primer amor, su primer hombre... y su primera gran decepción.
Carolina creyó que había encontrado al hombre de sus sueños, sin imaginar que estaba siendo usada como una simple herramienta en los planes de Axel. La desilusión llegó de forma devastadora cuando él, sin previo aviso, le extendió los papeles de divorcio. Ella suplicó, rogó, se humilló… pero al final, no tuvo otra opción más que firmar, con el corazón roto.
Hundida en la tristeza, Carolina descubrió días después que estaba embarazada. La esperanza de un nuevo comienzo se encendió dentro de ella, pero no por mucho tiempo. Cuando Axel se enteró del embarazo, no solo no mostró compasión, sino que provocó —de forma cruel e inhumana— la pérdida del bebé que Carolina ya amaba profundamente.
Desgarrada por el dolor y la traición, Carolina juró alejarse para siempre del hombre que la destruyó, alimentando un odio tan profundo como el amor que una vez sintió. Pero el destino aún le guardaba un secreto inesperado: el bebé que creía perdido… en realidad está vivo.