Nick

Voy en camino a casa de la madre de mis hijos, llevaré a los niños para que pasen el fin de semana conmigo, en España pude dormir en la casa de Alaia unas cuantas noches y fue gracias a que mis pequeños se han acostumbrado a mí.

Entro a la casa y solo noto a las personas que trabajan en ella. Hoy recibí la notificación de que el divorcio procede y ella estaría en libertad de casarse con Cedric; sin embargo, seguiré luchando por ella, esa boda aún está en duda, con la única persona que ella va a casarse es conmigo en una boda digna de ella, si logra el divorcio que es lo más probable.

Miro hacia arriba y veo que baja las escaleras como una puta diosa, mientras lleva a mi hijo en uno de sus brazos.

—¡Ik! —se emociona mi niña, quien baja las escaleras despacio en lo que toma la mano de su madre y corre hacia mí, apenas llega al primer piso, la cargo y beso su linda carita.

—Hola, amiguito —digo recibiendo a Noah de las manos de Alaia, parece nerviosa ante mi cercanía, y sonrió mient