Hace unos 15 años atrás...—¿Por qué debo tener amistad con esos niños feos papá?, no me gustan, ellos son muy malos conmigo, obliga a Guido es el mayor por unos minutos pero no a mí, ¡Por favor padre!—no puedo evitar lamentarme fingiendo que voy a llorar, cuando hago eso mi padre siempre cede a todo lo que pido.—Alana mi pequeño tesoro, debes saber que como mi hija es tu obligación y la de tus hermanos que trates bien a todos los invitados que vienen a nuestras reuniones, ¿No queremos dar una mala impresión verdad?—Quiero hacer una gran rabieta, pero mamá dice que ya tengo 8 años y que las niñas de mi edad no hacen esas cosas, se comportan como todas unas señoritas.Suspiro con resignación antes de responderle a mi padre—No, padre—Él me da una mirada tan llena de orgullo, que cuando hace eso me hace sentir que soy muy especial para él, haría todo lo que me pida con tal de ver esa mirada destinada para mí, sé que soy la niña de sus ojos, su tesoro como le gusta llamarme siempre, así
En la Actualidad:Alana—¡Gianella baja ya!, vas a llegar tarde a la escuela—Le doy un abrazo a mi hermano menor Enzo—¿Estás listo para tu primer día de escuel bebé?—Mi hermano arruga la cara en desacuerdo, odia que lo llamen bebé.—Hermana debes dejar de llamarme así, alguien te puede oír en algún momento, además ya no soy un bebé, tengo 8 años ya soy todo un hombre—Infla su pecho como si eso le diera más convicción a lo que me acab de decir.—Seguro que sí, ya puedes ayudar a Guido con los negocios de la familia, pasar todo el día en reuniones hasta altas horas de la noche y con traje, ¿No es así Enzo?—Se queda en silencio pensando un momento en lo que le acabo de decir.—Si lo pones así hermana, mejor me quedo un tiempo más siendo un bebé para ti, pero solo no me digas eso en la escuela seria suicidio social—Le doy otro pequeño abrazo antes de que se aleje de mi otra vez.Camino hacía las escaleras para gritarle de nuevo a mi hermana que baje ya—¡Gianella sino bajas en este momento
GianniDespués de haber estado viajando casi 8 horas desde Londres en el jet privado de nuestra familia finalmente estamos en NY, despierto a mi hermano para que esté listo por el gran recibimiento que nuestra familia nos va a dar, de eso estoy muy seguro.Una vez que aterriza el avión y nos apresuramos a bajar, a quienes vemos primero son a nuestros padres ya estaban ahí listos para recibirnos, más atrás vienen llegando nuestros hermanos, junto a mis dos sobrinos, no sabía que nos habían extrañado tanto, hace casi 11 años que nos fuimos de NY para irnos a estudiar y hacer negocios en Londres, porque así fue la decisión de nuestro padre, debíamos probar que somos dignos de tomar las riendas del negocio cuando llegue nuestro momento, debíamos hacer un buen trabajo representando a mi padre allá y así fue que lo hicimos, porque aunque me toque a mí ser el líder lo seré junto a mi hermano eso ya está decidido, somos un equipo y así siempre lo será, nada ni nadie nos va a separar, nunca.
AlanaAcabamos de pasar un momento tan íntimo aquí en la habitación de Orlando que el recordarlo hace que mis mejillas se vuelvan a poner rojas, siento mi cara y mi cuerpo ponerse calientes.— ¿Amor que es lo que estás pensando?, te acabas de sonrojar y ese color en tus mejillas te hace ver tan hermosa—Pensar en qué respuesta darle se me hace muy difícil con todas las imágenes que viene a mi mente de las cosas que acabamos de hacer en está habitación, pero eso no me importa ya que era lo único que lograba alejar las malas noticias que me dio está mañana Guido.—Nada amor, ya sabes como soy algo vergonzosa después de lo que hacemos, pero quiero decirte que gracias por respetar mis deseos y esperar hasta el matrimonio para llegar más lejos, tú me entiendes, por favor no me hagas decirlo en voz alta—él se ríe y se acerca a darme un beso, lo deja así suave e inocente no lo lleva más lejos.¡Gracias a Dios que no lo hace!, sino estuviéramos otra vez como hace unos minutos.—No te preocupes
Alana—Te lo juro Caeli, a veces Guido me saca tanto de quicio, que no sé cómo es que aún no le he sacado un par de dientes—mi amiga ríe con fuerza del otro lado de la línea y yo solo ruedo los ojos con exasperación, ella encuentra todo esto divertido.—¿No crees que te estás siendo una reina del drama Alana?, sabías muy bien desde un principio que Guido nunca acepto a Orlando como tu novio, no sé qué puedo haber hecho el pobre para ganarse el rechazo de él, pero no te quejes ahora—Ella suspira con cansancio como siempre lo hace cada vez que habla de mi novio—solo que yo de ti abandono ese tonto plan que tienes de casarte con él, eso es algo que no se puede deshacer así no más, amiga tu familia no es cualquier cosa, quien logre casarse contigo se lleva el premio gordo y nunca se te ha ocurrido pensar que quizás Orlando no te quiera como asegura—eso es ilógico, él tiene dinero no es que tenga problemas o ni nada parecido, aunque su familia no están poderosa como la mía nunca he sentido
DamianoNo sé porque debemos de asistir aún a estas reuniones tan aburridas, en Londres eran mucho más entretenidas y nunca faltaban las mujeres, pensé que quizás mamá había cambiado un poco con el pasar de los años pero no fue así.Nos hizo asistir a una fiesta muy aburrida, la organiza una de sus conocidas, una vieja cacatúa creo que su nombre era Pía Gotti, es tan insoportable y molesta no pierde el tiempo en mostrarnos a sus hijas, solo una de ellas vale la pena las demás son muy sosas y no tan atractivas, mi hermano Gianni como siempre está haciendo una demostración de sus impecables modales, le gusta lucir como un perfecto caballero frente a los demás es gracioso porque si supieran lo jodido que es, no estuvieran sonriendo como tontas en su dirección en su lugar estuvieran gritando como locas y corriendo en el sentido contrario.— ¡Oh Fiorella querida!, que guapos están tus hijos, todos unos perfectos caballeros, debes estar muy orgullosa de ellos—La vieja chismosa le hace un mo
AlanaEsto no puede ser verdad, quizás el poco alcohol que he bebido me ha hecho más efecto de lo que pensaba, me digo a mi misma como explicación pero lamentablemente no es así.Me niego a creer lo que mis ojos están viendo la escena desagradable que está pasando frente a mí en este lugar, hay una chica muy guapa junto a dos hombres bien vestidos deben ser invitados de la fiesta entonces, ellos 3 están teniendo un momento privado y muy íntimo por los ruidos que hace ella pero este no es el lugar ni el momento en el cual dan rienda suelta a lo que sea que deben de estar pensando en seguir haciendo aquí, que gente con poca educación.Se están comportando como unos animales salvajes y yo tuve la mala suerte de ver esto, me siento algo enferma del estómago y muy enojada por este momento muy incómodo.Tengo ganas de gritar de horror, yo estaba entrando aquí dispuesta a defenderla porque escuchaba lo que parecía ser que la estaban agrediendo y ella... Ella en realidad estaba teniendo un bu
Me da escalofríos, son tipos malos muy malos, que no dudarán en cumplir sus promesas, pero gracias a Dios tengo a Orlando conmigo, él me va a proteger de esas bestias.Regreso a la fiesta y las ganas de ir al baño fueron olvidadas por completo, pasa un camarero con una bandeja llena de cócteles, le hago un gesto que me dé uno y tomó cualquiera al azar poco me importa el sabor, solo quiero poder beber algo y calmar un poco mi corazón que se quiere salir de mi pecho.Mis ojos vagan por todos lados buscando a Guido para poder salir de aquí, no quiero estar un segundo más cerca de los hermanos del mal, me bebo el vaso en tres tragos largos, tiene un sabor un poco fuerte pero no me importa.—Permiso pequeña garza estás en mi camino, no estorbes—Susurra una voz detrás de mí que destila enojo y fastidio, me giro tan rápido que no me percato que tan cerca de mí ha estado.Me tropiezo como una completa tonta y pierdo un poco el equilibrio teniendo que apoyarme en él y en su pecho, Damiano me