—NO NO NO!!!!— el grito desgarrador de una madre que ha perdido un hijo y un esposo duele, los llantos de dolor y la angustia resuenan en la casa de los Wilson, su hija la había abandonado y su hijo había muerto y su esposo también todo en un solo día.

Con un maletín lleno de dólares Gino se acerca a María

—tú hijo me pidió que te entregara esto si fallecía— ella alza sus ojos sin fuerzas

—¿estás pagándome por la muerte de mi hijo?— él niega

—no es así, te daré una indemnización por los años que tú esposo trabajó conmigo también, puedes comprar un boleto de avión a donde desees no me lo digas ni a nadie, pues los Russo buscan acabar con todos los que trabajan conmigo o tuvieron algún vínculo— la mirada perdida junto al hipo

—¿crees que mate a mi hija?— él resopla

—si no lo hace él puedes estar segura que lo haré yo, ella le dio la información a los Russo, al parecer Jonathan le contó— ella se queda pensando

—no, él no le contó nada, ella nos escuchó hablar, él me había dicho que s