─ No deseo que te vayas, ─ susurró abrazándome. Busqué sus labios, en tres días viajaría al condado con tía Abigail. Mamá me pasará buscando cuando llegue de su luna de miel.─ Ven conmigo, ─ susurré.─ ¿Para tú casa? ─ Preguntó entrelazando nuestras piernas, se sentía tan bien estar los dos desnudos y abrazándonos.─ Eres mi novia, ─ le dije sonriendo.─ Quiero ser más que eso Sebas, no deseo que dejes de tocarme, ─ pronunció besándome. Bajé mis manos hasta sus glúteos acariciándolos suavemente, todo se sentía demasiado placentero.─ No dejaré de tocarte, ─ le respondí lleno de deseo.─ ¿Te ha gustado tocarme? ─ Preguntó mirándome con intensidad.─ Mucho, ─ le respondí apretándola hacia mi cuerpo.─ ¿Me amas, Sebas? ─ Preguntó sentándose sobre mis caderas sin dejar de mirarme. Las sábanas se deslizaron por su espalda, no pude evitar recorrer con la mirada su cuerpo desnudo, era tan hermosa.─ Mucho, ─ repetí respondiendo su pregunta. Su rostro marcó una sonrisa y Aleska, era mucho m
Observo todo a mí alrededor, hay muchos vidrios en el piso, botellas de whisky y vasos de vidrios estrellados, el olor a alcohol marea. Tía Abigail y yo, nos observamos con preocupación, avanzo subiendo las escaleras apresurado, al igual que mi tía. Ingreso a la habitación. Mi padre está sobre la cama, tía y yo, nos acercamos con nerviosismo.─ ¿¡Samuel!? ─ lo llama mi tía, moviéndolo varias veces.─ ¿¡Papá!? ─ Murmuro con miedo, también moviendo su cuerpo.─ ¿Samuel? ─ Insiste tía.─ ¿Valerie? ─ murmura mi padre, en una voz enredada y con aliento a whisky.Tía Abigail y yo, nos observamos con preocupación, pero aliviados de que hubiese respondido. Lo acomodamos en la cama, ya que parecía que a duras penas, hubiese logrado llegar a ella y lanzarse sobre la misma.*******─ Ya todo está limpio, ─ murmura, tía Abigail. Anoche, nos acostamos tarde tratando de acomodar un poco el desastre. Ninguno de los dos ha logrado dormir casi y hasta esta mañana culminamos de limpiar.T
Sebastián Ghill.Quince años Después─ Ya está casi todo listo, para esta noche, ─ informa mi madre. Ella, parece mucho más animada y contenta que yo. ─ Por fin, llegó alguien que atrapó a este gigoló, ─ se burla mi prima Samantha, sentándose en mis piernas apresurada, cuando nota mi intensión de levantarme molesto. Me he ganado esa fama por tres amigas, que me han conocido mayor que yo.─ Pero, no te enfades ─ dice Samantha, riéndose y besando mis mejillas. ─ Me estás llenando de babas, eso déjalo para Jaime, ─ murmuro levantándome y apartándola.─ Cuando llegue ahora de viaje, mis babas serán para él, ─ murmura haciendo un puchero.─ ¿Nos vamos? ─ Pregunta mi primo, Leonardo.─ Cuidado llegan tarde, mira que tú eres el novio y aquí todavía hay mucho que hacer, ─ protesta mi madre. ─ Voy para el aeropuerto a buscar precisamente a mi novia y sus padres, ─ le informo para tranquilizarla y ella asiente, moviendo su cabeza de arriba hacia abajo. ─ ¿Tú para dónde vas? ─ Le pr
Sebastián Ghill.─ Cállate, enana. ─ Le dice Jaime, con una sonrisa burlona. Ella, le saca la lengua y le hace un puchero. Ashley, Noah y sus trillizos, se van a saludar a los invitados. Samantha y Jaime, se nos unen, caminamos hasta donde están mis primos, Cesar y Leonardo. ─ Ya todo está listo, ─ le pregunta tío Jordan, a sus hijos.─ Sebastián, nos dará la orden ─ le aclara mi primo Cesar, a su padre. ─ ¿Caleb, logró solucionar? ─ Le pregunta Jaime, a Samantha.─ Hasta donde había entendido ayer, si logró solucionar ─ indica mi prima Samantha, pensativa. La tía Ivanna, va llegando con el tío Maximiliano y mi prima Lissie. ─ ¿El abuelo Ethan? ─ Pregunta Samantha. Tía Ivanna, observa a mi novia y luego a mí.─ Dice que felicita mañana a los novios, pero que él ya no está para estos excesos de ruidos, ─ murmura tía. La abuela Hailey, se asoma en el salón dónde será el evento. El tío Jordan, se acerca hasta ella abrazándola. Ella, todavía está muy triste, el abuelo An
Sebastián Ghill & NARRADOR OMNISCIENTETodos hablan, aplauden, rumorean y desean sus animaciones con la última tecnología artística digitalizada.─ El mundo de la evolución de los eventos de fiestas, le pertenece a los jóvenes como nosotros, ─ sonríe tía Abigail, ellos ya pasaron medio siglo de edad, pero el espíritu de mi familia es joven, por lo menos mi madre, la tía Abigail y hasta Ashley, quien todavía es joven; pero que va por su camino de espíritu alegre, como sus tías. Ellas resguardan ese espíritu alegre, a pesar de haber pasado por tantos sufrimientos y perdidas familiares. Todos bailan, beben, comen, preguntan; pautamos negociaciones y hasta viajes al extranjero. Jaime, es el abogado, es el encargado de los contratos, mi compromiso se convierte en un evento para las negociaciones y no me importa, porque lo esperábamos, esa es una enseñanza adquirida en el mundo Lumbardi.El tiempo va pasando en mi compromiso y no puedo dejar de observar a Aleska, ha estado hablando mu
Sebastián Ghill & NARRADOR OMNISCIENTE.─ Aleska, sentía que estaba drogada por el deseo de poseer a Sebastián, quien la sujetó fuerte de las caderas y se acomodó sobre la cama, dejándola a ella de espalda sobre el colchón, levantando las piernas de la española, que se estaba muriendo silenciosamente, por el hombre que en unas semanas se casaría con otra. Un frenesí de dar placeres, se despertó en el cuerpo de ambos. Aleska, por desear en ese momento poseer el alma de Sebastián, que su amor desde la adolescencia, nunca la olvidara, cuando ella ya no estuviese más en este mundo, y Sebastián, por demostrarle a la mujer que una vez le partió el corazón en dos, la que le ennegreció el alma y la vida, que él también podía emitir fuego y este, no era un fuego cualquiera, sino uno abrazador, que estaba envolviendo a ambos. Sebastián, sentía a Aleska, tan apretada, como si tuviese tiempo sin copular, estaba tan estrecha que se sorprendió, cuando sus pliegues lo envolvieron apretándolo
Caleb Hanks.─ Doctor hay una emergencia en este pasillo, ─ grita un chico, giro mi cuerpo caminando apresurado unos pasos, hacia el pasillo donde escucho al chico gritar y me consigo con un episodio, que me lleva a los recuerdos de mi infancia.Me acerco a la mujer, que está extendida en el piso de uno de los pasillos de ingreso al hospital. Su cuerpo se mueve convulsionando, otra persona llega enseguida para ayudarme. No levanto la cabeza ya que estoy atento revisando los signos de la mujer que convulsiona.─ Está drogada, ─ escucho otra voz a mí alrededor, la revisamos. ─ Una camilla, pronto va a ingresar en un ataque cardíaco, ─ menciona la mujer que está a mi lado y allí reconozco la voz de mis tormentos y tempestades. La camilla se tarda, así que levanto entre mis brazos a la mujer que está agitada y con falta de respiración. Sus pupilas no dilatan y corro al área de emergencia, que es la más cercana. Varios médicos están de guardia, pero esta es el área más colapsada que t
Caleb Hanks.─ Mejor voy a descansar, siento que no he dormido nada desde hace demasiadas horas, ─ pronuncio.─ Seguro que no es lo que imaginamos, ─ se ríe Jaime, ruedo los ojos moviendo mi cuerpo hacia la escalera. Mis hermanos Gianna y Anselmo, van bajando en una acalorada discusión.─ Te aseguro que a papá, no le va gustar, ─ protesta Anselmo. ─ Si vas de sapo es que se enterará, ─ gruñe Gianna.─ Buenas noches, ─ les digo a ambos. Gianna, se lanza hasta mi cuello y envuelve las piernas en mi cadera. Me sostengo de los pasamanos, antes que los dos rodemos por las escaleras. Anselmo, se apresuró, para sostenernos a ambos.─ Esta malcriada insensata, ─ gruñe mi hermano. Gianna, solo se ríe como si fuese un juego, sin darse cuenta del peligro.─ Nena, debes tener más cuidado, ─ le digo mirándola con aprehensión, la llamo igual que papá Maximiliano, que no le gusta llamarla por su nombre, creo que le trae recuerdos de la abuela que nunca llegué a conocer, pero por sus fotos era id