— ¿Segura que quieres estar sola?— Pregunto mi amiga, asentí y le di una pequeña sonrisa, ella me miró como si no creyera en absoluto lo que salía de mis labios pero aún así terminó asintiendo y dando La media vuelta para irse directamente hacia su apartamento.
Samanta y yo vivíamos en el mismo edificio solo que con un piso de diferencia ella vivía arriba y yo vivía en el piso 10 y yo en el 9. Una vez que estuve en mi apartamento caminé directamente a la habitación para así buscar la ropa necesaria para los dos días que estaríamos en Las Vegas y al llegar no pude evitar ver las fotos que tenía con Enrique. Me sentía rota pero realmente no sabía por qué así yo sabía que no lo amaba realmente. Fui directamente por sus fotos para tirarlas al suelo llena de ira y de rabia. En la cama había un pequeño sobre me senté para poder leerlo. Hola mi querido amor Seguro Cuando leas esto estarás Armando tu equipaje para poder irnos el luna de miel no te imaginas lo emocionado que estoy porque seremos marido y mujer juntos hasta que la muerte nos separe Maldito hijo de perra!!! Mis ojos se cristalizaron nuevamente y la rabia floreció aún más. ¿Cómo se atrevía a escribirme eso? Pero si lo hizo significa que la decisión de casarse esta mañana con cristal la había tomado a última hora porque anoche que fue la última vez que nos vimos estaba dispuesto a casarse conmigo. Que lo había hecho a cambiar de opinión? Arrugué la hoja en mis manos y la lancé al suelo junto a nuestro retratos. Quizás esto había sido lo mejor Claro que lo habías ido pero no había sido la manera. Toda mi familia me había fallado me había traicionado y me había humillado. ¿Porque es que me sorprende? "—Estás segura que tengo que irme?— preguntó con una sonrisa en su rostro Asentí con la cabeza mientras me levantaba de la cama y besaba sus labios lentamente. Podía acostumbrarme a esto, podía acostumbrarme y seguramente más adelante podría amarlo. — se supone que es la tradición no puedes verme el día de la boda hasta que llegue el altar vestido de blanco— dije con una sonrisa llena de ilusión y realmente me siento muy ilusionada por poder llegar a la iglesia vestida de blanco totalmente pura ante él. Estaba cumpliendo mis sueños aquello que había soñado desde niña. — y mañana por fin tú y yo de luna de miel— no puedo evitar reír ante sus palabras— Entonces me iré y te esperaré con ansias, te amo Alaia — dijo antes de salir rápidamente de la habitación" Te amo Alaia... Puras mentiras Cómo era capaz de decirme todo eso mirándome a la cara mientras se acostaba con mi hermana seguramente. Decidí dejar todo a un lado y busqué mi maleta metí toda mi ropa y prácticamente corría al apartamento de Sam tenía que salir de aquí ahora. Toqué timbre y ya no tardó en salir con su maleta en la mano me sonrió le devolví La sonrisa tratando de verme fuerte, ambas Nos dirigimos al ascensor Y en silencio tiramos a planta baja salimos de aquel edificio y nos montamos directamente en la camioneta que su padre había mandado por nosotros, el camino al aeropuerto Fue bastante silencioso pero ambas veníamos tomadas de la mano como si ella me estuviese dando toda su fuerza. Me sentí agradecida de tenerla a mi lado en este momento Al llegar al aeropuerto nos subimos al avión de su padre era pequeño pero bastante cómodo suficientemente grande para ambas y para el menos cinco personas más. Las Vegas nos estaba esperando y tenía que admitir que me sentía tal vez un poco emocionada de estar en ese lugar iba con un propósito muy claro iba dispuesta a disfrutar de mi vida hacer otra Alaia, esa que no había podido ser por miedo a ser juzgada por miedo a ser abandonada por miedo a que ningún hombre me tomara en serio pero estaba cansada de toda esta m****a. Había sido lo mejor que pude haber sido para Enrique y él me había traicionado con cristal que era todo lo contrario a mí entonces para qué seguí haciendo la misma tonta, haría lo que me diera la gana disfrutaría bailaría bebería. Estaba lista para comerme el mundo entero y quizás al volver a mi ciudad tendría que volver a ser la misma tonta de antes o quizás no. Encendí mi teléfono pero rápidamente me di cuenta de que había sido un error los mensajes preguntando qué había pasado que ninguno de los dos había aparecido comenzaron a llegar las noticias No tardaron en mostrarme todos pensaban que yo había cancelado la boda y que había salido huyendo dejándolo a él como un maldito inocente sin saber que había sido él quien me había dejado embarcada. Esperaba recibir algún mensaje de su parte disculpándose tratando de explicarme lo que había sucedido sin embargo nada de eso llegó. Me preguntó qué estará pasando por su mente se estará sintiendo mal por lo que me hizo? Basta Alaia Enrique no merece pero ni siquiera una lágrima de mi parte. Juro que haré que se vaya al infierno pero antes que sufre un poco en la tierra.Al llegar a Las Vegas Sam y yo nos habíamos ido de compras claro que todo patrocinado por su padre quien nos había hecho una videollamada pidiendo disculpas por no estar presente para mí. Hubiese deseado que eso hubiese sido mi padre que él lo hubiese hecho sin embargo estaba un extraño pagando todo para que yo pudiera disfrutar y dejar de pensar en lo que me había pasado. Había dejado que Sam escogiera toda mi ropa así que ya había escogido ropa muy sexy y yo estaba más dispuesta que nunca en colocarmela esta noche al final había elegido un vestido muy corto que nada reflejaba lo que yo era en realidad pero aquí podría ser otro yo al menos eso quería hacer. Con algo de dinero un par de tarjetas de crédito y nuestras identificaciones habíamos tomado un taxi rumbo a la discoteca que nos recibiría toda la noche y la madrugada. Con solo decir su apellido nos dejaron pasar y rápidamente nos ofrecieron la zona VIP, No es que no estuviese acostumbrada a estos tratos al salir con Sam per
Desperté al sentir claridad en mis ojos intenté abrir pero pude notar que la ventana estaba abierta y el sol pegado directamente a mi cara. —Sam cierra las ventanas—Le pedí a mi amiga con los ojos cerrados intenté pensar en qué momento nos regresamos al hotel sin embargo ningún recuerdo apareció lo que sí apareció fueron los recuerdos yo ingiriendo muchísimo alcohol y frente a mí estaba Leonardo. Quizás había pasado más tiempo del que pensé con él.Me moví un poco dispuesta a levantarme para yo misma cerrar las ventanas de la habitación sin embargo sentí un cuerpo junto a mí uno que no parecía ser el de Sam abrir los ojos asustada y casi grité al encontrarme a Leonardo junto a mí completamente desnudo. Esto no puede ser cierto. Me levanté y me miré yo estaba en ropa interior y no sé qué significaba eso me había acostado con él o no llevé mis manos a mis ojos para tallarlos y grité horrorizado al ver dos anillo en mi dedo anular Mierda nooo! NoNoNo¿Que es esto?!— Qué te suced
Luego de aceptar todo este desastre que acabo de aceptar recuerde que estaba en ropa interior así que cubrí mi cuerpo con una cobija que encontré en la cama.—podrías por favor taparte?—le pregunté mientras me cubría completamente ya que él seguía desnudo.No sabía si preguntarle la duda que no dejaba de rondar en mi cabeza sinceramente me daba algo de miedo su respuesta me daba miedo saber que había tenido mi primera vez y realmente no lo recordaba y con un extraño. Vi cómo se alejaba de mí comenzaba a vestirse lentamente mientras no apartaba sus ojos de mí. —adelante—me dijo lo que me hizo fruncir el ceño—sé que quieres preguntar algo, vamos pregunta lo que quieras que yo te responderé —tú y yo nos acostamos?—pregunté totalmente roja por la vergüenza. Una carcajada salió de sus labios lo que me hizo sentir aún más avergonzada todavía. —tan mala persona crees que soy que ando por ahí aprovechándome de las personas sobre todo de las mujeres muy ebrias e indefensas. Dejé de senti
Subir hasta mi departamento una vez que estuve frente a la puerta supe el desastre que iba a encontrar aunque aquel desastre no se comparaba absolutamente nada al desastre mental que ya tenía. Resulta que sí terminé casándome con un completo extraño que también quiere vengarse de la familia del que iba a ser mi esposo y que ahora es mi cuñado porque se casó con mi hermana. ¿Verdad que es un desastre?Apenas me adentré a mi departamento vi que la enorme desastre pero lo que sí me sorprendió es que había un sobre en el suelo me incliné para tomarlo cerré la puerta y cuando me senté en el sofá dejando todas mis pertenencias en el suelo pude abrir aquel sobre que estaba en mis manos. Ni siquiera sé por qué me sorprendo Era una maldita invitación! Cómo se atrevían a enviarme una invitación?! Acaso eran tan desvergonzados?!Porque simplemente no les importaba lo que yo sintiera ni qué tan mal estuviera pasandola después que me dejaron plantada completamente vestida y lista para casarm
Leonardo apareció mirándome de forma extraña no dije absolutamente nada puesto que me sentía avergonzada ya que sabía había escuchado absolutamente todo, se acercó a mí ya acarició mi rostro levemente con sus dedos lo dejé hacerlo. — no mereces ser tratada de esa manera— me dijo esta vez con una voz suave. — creo que ya estoy acostumbradaEstábamos tan cerca que podía sentir su respiración podía oler esa menta fresca salir de su boca, podía percibir aquel delicioso y embriagante perfume, y en ese momento Me dediqué a detallarlo solo un poco más aquella barba aquellos ojos que me miraban de una manera hipnótica. Basta!!Intenté mirar a otro lado pero mis ojos fueron a poner a sus labios tenía que admitir que se veían tan provocadores carnosos húmedos estos prácticamente me estaban invitando a besarlos. No!No lo hagas.Él la cortó la distancia entre nosotros quedando a centímetros nuestros labios aún cuando él era mucho más alto que yo.— te prometo que conmigo no vas a tener que p
Luego de que ya se en la que para mí fue la peor que tenido mi vida al terminar sólo me despedí me levanté y no fui. Un taxi pasó por mí y me llevó directamente hacia mi apartamento en el cual tomé una ducha me coloqué el mejor vestido que tenía en mi clóset quería verme espectacular. Estaba cansada de todo esto, estaba cansada de las humillaciones y de que creyeran que pueden pasar por encima de mí. Escucha el timbre sonar cuando estaba colocándome mis aretes, Así que tomé mis tacones y bajé corriendo las escaleras para poder abrir la puerta Ahí estaba Leonardo mirándome con una sonrisa — déjame decirte lo hermosa que te ves Alaia — Sonreí.Supongo que gracias — Muchas gracias ya estoy casi lista, solo debo ponerme mis tacones y ya Caminaste al sofá me senté y me coloqué los tacones con cuidado, una vez lista Leonardo me tendió la mano para que caminara junto a él Así que lo hice.Salimos al apartamento directamente al ascensor que nos llevó al estacionamiento, en silencio nos
Todos caminamos hacia nuestros respectivos asientos no podía evitar sentir mi corazón apachurrarse porque era difícil estar frente a mi hermana y a mi ex novio y ya vestida de blanco con un enorme y precioso vestido Enrique por otro lado vestía un traje negro era que el traje que yo había comprado. Ni siquiera pudo ir por un traje diferente. Estaba en primera fila junto a Leonardo quien sostenía mi mano y me brindaba una sonrisa cálida. Realmente me dolía la traición de parte de ambos y que ni siquiera hayan tenido la valentía para poder decírmelo a mi.Todo hubiese sido tan diferente si hubiesen sido capaces de contarme las cosas.— Estás bien?— preguntó Leonardo asentí con la cabeza — nos declaro marido y mujer puedes besar a la novia— ante las palabras de el hombre que los casaba y ver cómo ellos se besaban pensé que aquello me iba a hacer sentir mal pero realmente no sentía absolutamente nada quizás era porque no sentía gran cosa por Enrique y solo era parte de mi ilusión. To
Me veré un par de veces al espejo y seguro de lo que estaba a punto de hacer. Respira profundamente Por qué estaría insegura? Me pregunté a mí misma, había soñado con casarme durante muchísimo tiempo incluso antes de conocerlo ¿porque ahora solo quería salir corriendo? Vamos Alaia, tu puedes" me animé a mi misma Escuché la puerta abrirse y otra vez el espejo vi a Sam mi mejor amiga entrar, no me sorprendió verla bastante seria puesto que ella no paraba de repetirme que no lo hiciera que estaba cometiendo un error quizás sus palabras estaban haciendo efecto en mí y por eso me sentía tan insegura con respecto a esto. — Ya todos han llegado?— Pregunté.Me giré para verla pero ella miró sus manos jugando nerviosamente con ellas y con un sobre que traía en las manos, fruncía el ceño sin entender lo que estaba sucediendo.— Ala...— Soltó un suspiro para luego mirarme a los ojos.— ¡¿Que pasa?!— no han llegado— Dijo— ¿Ningún invitado?— Pregunté — Tu hermana y Enrique — busqué el relo