Me dieron de alta y fuimos a casa, fui recibida por Mirian y sus bocadillos que estaban muy ricos, Adam me miraba comer con su cara sostenida con sus manos y los codos en la mesa, mientras yo devoraba esos ricos canelones y pasteles rellenos de jalea que me encantaban cuando lo escuche pedirle un poco de gelatina y un omelett, a lo que ella le hizo y le sirvió lo vi comérselo con premura hacía gestos de satisfacción, terminamos agradecimos y subimos a la habitación, yo adelante y Adam detrás de mí según Él cuidándome.Adam tenía sus planes y yo los míos, camino a casa había llamado a Juddy, a mi mamá para probarme el vestido de novia, los demás accesorios y para chismorrear cosas de mujeres, solo esperaba que llegaran y mi hombre quería otra cosa, por eso al entrar me abrazo con pasión, me sentó en la cama y Él se arrodilló para besarme.El ambiente se estaba tornado ya más caliente por parte de Adam cuando lo aparté y le dije—Amor viene Juddy y mi mamá para ayudarme a probar el vest
Nos despertamos por unos golpecitos en la puerta y la voz de Juddy diciendo—Levántense dormilones, ya es tarde en una hora vienen los futuros padrinos, ya todo está listo, solo faltan ustedesLe contesté que ya estamos despiertos, ella se fue y nosotros estirándonos con pereza más que todo por el ajetreo amoroso que nos dimos, Adam me tenía abrazada, no quería soltarme y decía.—Tengo sueño, que esperen un rato, quiero dormirSus brazos alrededor de mi cintura me tenían prisionera, me acurruqué un momento más, puse el despertador y me venció el sueño.—Riiiing, RiiiingSonó fuerte el despertador, ambos nos despertamos, vi la hora estaba a media hora de la llegada de Andrew y Sophie, escuchamos la voz de Joseph que pasaba por afuera rumbo a su habitación.Nos besamos, nos levantamos y entramos a la ducha, jugueteamos un rato allí hasta salir bañados y despejados ya, busqué ropa casual para Adam y para mí, ropa un poco más holgada, mientras Adam se vestía vi un cofrecito en la cómoda,
Y llego la noche de despedida de soltera de nosotras las novias, Sophie, mis amigas de la universidad estaban conmigo para llevarnos, no sé adónde, pero nos alistamos y nos fuimos en dos autos llenos, Adam y los demás hombres más temprano se fueron.En el auto era la algarabía, los chistes, las cosas morbosas que nos decíamos, hasta que llegamos a un lugar ruidoso, pero las canciones eran muy fuertes por no decir eróticas, unos grandotes nos abrieron las puertas con una gran sonrisa, dentro del local era hermoso luces de neón, luces tenues nos sentaron al frente de todas las sillas cuando se escuchó el estruendo de que entraba más gente y me fije que entre ellas venían las vecinas, la esposa de mi padrino Boris, mi mamá venía vestida como rockera, el local se llenó en su totalidad, mi mamá y las vecinas vinieron a saludarnos a las novias, yo estaba muy feliz.Se escuchó unas melodías candentes y salieron unos hombres vestidos de vaqueros, bailaban y me di cuenta de inmediato, Stripper
Llegó el gran día, desde que nos despertamos empezó el corre, corre, Adam se bañó primero, claro que vomito eso era visto, pero no fue mucho, parece que los estragos están bajando, gracias, Dios mío, cuando salió de la ducha contemple su perfecto cuerpo, lo observaba diciéndome hacia mis adentros que ese hombre tan codiciado y deseado por muchas era mío, solo mío y me amaba con todo su ser como lo hacía yo.Adam se percató de mi mirada deseosa camino hacia la cama, se sentó a mi lado y dijo—Amor, hoy es nuestro día, apresúrate que en unos momentos más van a venir a buscarte y no voy a poder verte hasta que esté en la iglesia, así que quiero aprovechar besándote, probando la miel de tus labiosMe besó carajo, esos besos tan calientes que me evaporan, mi cuerpo reacciona a su simple tacto, estaba deseosa que no terminara nunca ese beso, pero debíamos hacerlo, se despegó de mí sonriendo y dijo.—Báñate amor que ya estoy escuchando a nuestros padres, apurándonos, jajajaja, estoy feliz Di
Estoy lista, me observé en el espejo, estaba hermosa, elegante, se pusieron detrás todas ellas y nos tomamos fotos, ahora sí, la voz de todas. —Vámonos, los novios están esperando ya, deben estar ansiosos Juddy y yo nos reímos, nos subimos cada quien en un auto, en el camino miraba el pasar de los edificios, mi mente rebosante de ideas de sentimientos cuando divise la catedral, había gente, periodistas, mi padre estaba esperándome parado en la parte de afuera de la iglesia, sonriente, un jovencito vestido de blanco abrió la puerta, mi papá me dio la mano para salir, los flashes de las cámaras eran por doquier, se fue mi auto llego el otro y salió Juddy de allí, su padre también le dio la mano para salir y ambas entramos por el umbral de la puerta de la catedral. La canción matrimonial comenzó y muy despacio caminamos hacia el altar y allí estaba mi bello hombre todo guapo, con su traje negro, su camisa blanca, su corbatín negro y lo demás se lo veía feliz, su sonrisa mirándome toda,
Las dos parejas frente al altar esperando que comience la ceremonia que será la que los una para siempre, el obispo realizó el rito correspondiente y al llegar a la parte de los votos de los novios comenzó con la pareja de Adam y Dianne.Narra DianneAl escuchar al obispo decir de la parte de los votos nos viramos para estar frente a frente y Adam comenzó a decirlo y yo, escuchándolo y mirándolo tan enamorada a la espera de saber lo que me iba a decir y comenzó su dulce voz.Dianne, prometo amarte apasionadamente,en todas las formas, ahora y para siempre.Prometo nunca olvidar que este es un amor para toda la viday saber siempre que, en lo profundo de mi alma,no importa qué nos pueda separar,siempre nos volveremos a encontrar el uno al otroHoy te prometo amor eterno.Ser para siempre tuyo en el bien y en el mal.Y hoy te demuestro cuánto te quiero,amándote hasta mi finalSiempre tuyo, siempre mía, siempre nuestroLos domingos cocinaré yo, pero solo si prometes ver esas pelis que
Amaneció y nosotros abrazados después de la sesión de sexo y amor que tuvimos, lo observaba dormido todavía, su rostro, sus labios, ya era mi esposo, solo para mí, su amor, su deseo, su todo, le acariciaba su cabello apenas se movió dormía profundo, me quedé acostada encerrada en su abrazo, qué lindo se siente, recordaba la parte de los votos a ambos se nos ocurrió hacer una pequeña broma al final de los votos lo hicimos sin saber que el otro haría lo mismo, fue tan hermoso. La Luna de Miel ya estaba planeada, viajaríamos en su avión privado en la tarde para llegar casi al amanecer al primer sitio en la lista de lugares que visitaríamos, bueno tuvimos ayuda de Sophie con ideas tras otra, ella había planeado la Luna de Miel de Adam y Karla. Empezó a despertarse, se mueve mucho cuando pasa eso, esperé que abriera sus ojos para besarlo de una vez antes de que reaccione bien.me encanta hacer eso, su reacción es apretarme más contra de su cuerpo y eso me encanta, aunque después me mira ta
Nuestro viaje de regreso fue muy feliz, veníamos los cuatro cenando conversando anécdotas de lo que pasamos cada pareja, ya se me notaba el vientre, mis antojos aumentaron pedí langostinos y una malteada, Adam me miraba comer y vaya también comió lo mismo, Joseph y Juddy se reían al vernos comer a ambos esas combinaciones raras de comida.Llegamos al aeropuerto, nos subimos a los autos rumbo a casa, Adam estaba junto a mí, parecía pulpo, sus brazos se la pasaban rodeándome a cada rato, sus besos también, ya estaba por cumplir 35 años, estaba en la flor de su vida, y su regalo nuestro hijo, ya quería hacerme el eco y saber si era niño o niña.Fuimos recibidos con una gran reunión de la familia, llegamos a una enorme mansión que no conocía y era la de sus padres, qué belleza tan deslumbrante, al bajar me quede observando los jardines frontales, que maravilla, unos rosales hermosos, había hasta rosas azules, mis ojos admiraban tanta belleza, Adam me miraba tan tierno y soltó.—Veo que te