Theo.__ Se requiere tu firma aquí. - levanté la mirada para ver a Blanca entrar con unos papeles. Ni siquiera me miró, evitando todo contacto desde que regresamos.Solo lo referente a la bebé o al trabajo daba para que se acercara a mí. __ En este...- deslizó las hojas en lo que plasmé mi firma, pero mi vista pegada a su rostro. ¿Porqué antes no me había fijado en todos sus rasgos? Despues de la boda pude ver más de cerca todo de ella. Lo peor, deseé congelar el tiempo para hacerlo por más tiempo.__ Gracias. - recogió todo.__ Blanca. - hablé para detenerla. - ¿Porque huyes de mí como si tuviera lepra o algo peor? __ No sé de qué habla, señor.__ No soy tu jefe. Soy tu esposo. - reiteré y se tensó. - ¿Acaso ya lo olvidaste?__ Creí que solo era frente a la cuidadora o el...__ ¿Estaban presentes cuando te hice mía en el hotel? - vió hacia las ventanas como si tuviera miedo que la escuchen.__ Cállate. Baja la voz __ ¿Te pondrás en ese plan? ¡Por Dios, Blanca! ¿Que crees que pien
Blanca.Tan difícil no era de entender el acuerdo, lo hablamos cuando me fui de boca con la cuidadora. Nadie confundiría las cosas, ninguno cruzaría límites. Esas reglas eran por mí. Las dije por mí, porque conocía la actitud persuasiva de mi jefe y como podía hacer cambiar de opinión a las personas a su alrededor. Las dije por mí, con respecto a lo que podía causar. Pero yo misma me dejé ir contra él. Crucé la barrera, limpié mi renuencia y la borré sin querer. Yo misma provoqué que todo lo planeado se viniera abajo. Me había enamorado de mi jefe.Pero así como conocí al Theo que conseguía lo que deseara, también había visto de primera mano a aquel que pronto se aburría de las mujeres que metía en su cama. Luego está yo quien tenía que decir que mi jefe no estaba en la ciudad, que ya tenía pareja, excusas y más excusas para quitárselas de encima. ¿Quien sería la que me diga a mí lo mismo luego de darle lo que quería?Ese era mi temor y por ello, preferí ser quién corte todo lazo
Theo__ Que yo recuerde no hay un monitoreo programado para este día, aunque fuera así, dejaste de serlo. - manifesté mordaz. Blanca me miró con desconfianza. - ¿Miento, señor Barrera?__ ¿Es verdad, entonces? - cuestionó mi esposa soltándolo del todo. - ¿Hiciste que lo despidieran de su trabajo?__ No hice que despidieran a nadie, y se lo merecía. - declaré ganando que ella me mirara con enojo. __ ¿Que razón usaste para que hicieran eso? - inquirió Blanca. - ¿Quien te crees para hacer esa clase de atropellos en la vida de la gente?__ ¿Y él quien se cree para decir cuánta pendejada se le ocurriera en el expediente que dió a la cuidadora? - devolví viendo al tipo que perdió el color. - En lugar de olvidar sus rencillas personales conmigo y venir a hablarlas de frente, siguió con el proceso siendo el resentido que no pudo aceptar que su ex rehízo su vida. __ ¿De qué estás hablando? - giró su cuello hacia el tipo que me acribilló con la mirada por decir su falta de profesionalismo. -
Theo. __ ¿No le dolerá? - los ojos rojos de Blanca me dieron un gancho directo a mi tórax. El como se preocupaba por el bienestar de la bebé y cada pregunta respecto a que sí estaría bien luego de la prueba. Tenía experiencias con bebés, pero noté que era más que todo dejarse cegar por el amor que tenía por Sammy. __ No le dolerá. ¿que estoy diciendo? - se reprochó ella misma. - Es que estoy nerviosa. La van a pinchar, solo será una aguja. __Puede ser cabello también. Hisopado de la mejilla. - declaré para calmarla un poco. - No necesariamente sangre. __ Es verdad. Sammy estará bien. No será nada. - repitió de nuevo. __ Calma. Prometo que estará bien, no pasa nada con esta prueba. Es solo ese imbécil con sus tonterías, peor será cosa de nada __ ¿Y se mantendrá con nosotros, verdad? __ Siempre estará con nosotros. - aseguré. Busqué en alguna manera de distraerla en tanto salimos del vehículo directo al laboratorio dispuesto por el juez. - ¿Pensaste en casarte con tu jefe, a
Theo.__ Tengo que hablar contigo. - dijo Sonia cuando la encontré en la puerta de la casa. __ ¿Ahora? Vengo cansado. - miré la hora, de seguro Blanca estaría bañando a Sammy para cenar juntos. __ Es algo urgente. - sellé los labios, luego indiqué que siguiera. Era mejor llevar las cosas en paz, por mucho que eso no fuera lo que deseaba en verdad.La llevé hasta mi estudio donde dejé mi maletín y me quité el abrigo.__ Tu dirás. __ Que bien te ha sentado el matrimonio. Te ves más atractivo, diría que levantas más suspiros. __ Al grano, Sonia. - quise ir a cenar con Blanca.__ Uy, que gruñón te has vuelto. - frunció los labios. - Un masaje puede ayudar. Me incorporé cuando quiso ponerme las manos encima. __ Vamos, Theo. ¡Por Dios! Sabemos que no eres de una sola mujer. Te aburre la monotonía, odias tener una pareja fija y te estresa el sexo tranquilo. Tu eres de excesos, locuras de la noche, besos de...__ Sonia, si no dirás nada interesante, te pediré que te vayas. No estoy de h
Blanca.Como podía gustarme que alguien dijera que tenía actitudes muy complicadas..No lo entendí, pero me gustó y aceleró mi pecho sin mayor esfuerzo.Theo se veía tan poco amable que todos le huían, a decir verdad también lo hacía, pero no podia decirle eso a mi jefe, por eso siempre llegué con mi gran sonrisa. Elevé la mirada para verlo decirle a Sammy sobre cómo sería su infancia , cuando la puerta avisó de la presencia de alguien. Pronto apareció la chica del servicio en el comedor entregando un sobre para Theo. Este lo leyó, solo para confirmar lo que ha sabíamos__ Positivo. - esa palabra me heló los huesos pese a saberlo. Pero nunca se trató de saberlo, sino que le daría paso a algo mucho mayor que solo un ADN de mi hija con ese tipo.__ El abogado puede hacer algo ¿verdad? __ Dicen que es el mejor. Lo hará. - aseguró acariciando la cabeza de la bebé en mis brazos. - Ese tipo no va a llevarsela. Primero lo desaparezco.Pensé en que solo lo dijo como una metáfora. Algo dicho
Theo.__ Señor ya quedó. - avisó el hombre a quien ofrecí pagarle cinco veces el valor de su trabajo si lo hacía de noche. Aceptó al saber que no estaba jugando, tomó sus herramientas y me acompañó hasta mi casa con todos los materiales que ya llevaba en una bolsa. Siendo de madrugada, en una noche de frío abrumante yo tuve que pedir que abrieran una tienda, buscar un cerrajero, despertar a algunos de mi equipo de servicio para que sacaran muebles y hacer que los reemplazaran. Mi escritorio que tanto me gustaba tener en mi despacho estaba siendo sacado como si tuviera lepra. Un alboroto, mientras quien lo pidió estaba tranquilamente dormida en mi cama. De la cual también se adueñó.Les di el pago en efectivo a cada uno de los que ayudaron a que todo estuviera como la señora lo pidió. La puerta se cerró y solté un resoplido lleno de agotamiento físico.Estaba amaneciendo, no tenía ni un gramo de ir a trabajar por ello con el nuevo juego de llaves caminé hasta mi habitación, la cual
Blanca.Jamás fui de las románticas que pensaban en un color rosa cada vez que tenían el romance en su vida. Mantenía los pies en el suelo, sin tanto drama porque en verdad me parecía innecesario el dejarse envolver tanto.Con Rick siempre era yo quien dejaba de soñar, evitando de esa forma los dolores de cabeza. Se me daba fatal, además que si le preguntaba sobre su día siempre era el típico "bien". Con esa respuesta me quedaba, así lo lindo de la relación se mantuvo. Luego cuando mi relación terminó me juré que solo tendría una nueva, en el momento que sintiera que tenía mi vida controlada. Pero el descontrol que soy, junto a Theo me hace ver que no pude cumplir esa promesa.__ Solo estoy practicando para cuando esto se termine. - dije enmedio del beso. Gruñó en tanto me hizo separar las piernas. __ ¿Ah sí? - me mordió con suavidad sacando un jadeo que se tragó apretando mis caderas a su gusto. - ¿Lo besarás así? Me derretía esa habilidad de dejarme en blanco. __ ¿También lo fol