Theo __ ¿Que te dijo exactamente? - cuestioné en cuanto Blanca puso un pie en el dormitorio, luego de dejar a Sammy en el suyo. Se quitó la blusa, ignorándome, entró al baño poniéndole seguro a la puerta. Su molestia podía olerse. Su enojo era justificado, algo tuvo que haberle dicho Melissa o como se llamara. No pude preguntar ya que desde que salió de la empresa no se detuvo y no quería perderla de vista. Miré el juego de llaves en mis manos, pero no la iba a forzar ni pasar los límites. Me quité la camisa, colocándola sobre la cómoda, miré el celular queriendo tener a alguien a quien preguntarle, que demonios se hacía en esos casos. Como debía actuar para no arruinar más las cosas o algo que decir que nos hiciera volver a hablar sin esos gestos mordaces. Sin embargo, estaba solo. Como siempre la solución dependía de mí. Salió del baño con una toalla alrededor de su cuerpo y su cabello goteando sobre su hombro.Ni siquiera me miró de nuevo, solo avanzó hasta la cajonera para bu
Theo__ Ya realicé los cambios que sugirió, señor. - dijo la recién contratada. Elevé la ceja al verla entrar sin tocar la puerta, como si decirle las reglas que había impuesto desde el principio hubiera servido de nada. Mi molestia fue muy notable. Se lo hice ver y se dió cuenta de su error. no quería mezclar cosas personales con lo profesional pero me estaba dando motivos. __ Lo lamento. Se aseguro que no fue mi intención entrar asi, solo vi que no habia nadie y...__ Porque Blanca está en un asunto de su trabajo, eso no quiere decir que puedes entrar sin tocar. Si dije que me gustan las cosas de una forma, es porque asi es. __ Le juro que no...__ Muéstrame los cambios. - la corté. No quería escucharla excusarse por todo. Odiaba eso. Señaló los puntos que tenía marcados con grafito. Repasé lo que habia hecho y pellizqué el puente de mi nariz, al parecer debia repetir las cosas mas de una vez. __ Estas medidas con estas no concuerdan. - señalé con el dedo a lo que me refería.
Blanca.Ver caer a Rick al piso con la nariz reventada, goteando la sangre que manchó el piso detuvo mi pecho, no por él sino por ver a un Theo que se le fue encima, furioso, decidido a no detenerse. Su puño impactó una y otra vez contra su cara, en lo que no supe que hacer, cargaba a Sammy en brazos, no podía acercarme porque ella podría salir lastimada, siendo lo último que querría. __ Theo, detente. - pedí con los nervios disparados al ver a Theo levantar el puño para estrellarlo de forma continúa en el rostro de Rick, quien deseó quitarlo de encima, más la determinación y fuerza superada por la de Theo no logró mucho. - Theo. __ Sabes que tengo razón...es una pu...- no terminó de hablar con él puñetazo que le inundó la boca. __ Rick...suéltelo. - rogó Helsy con temor al ver como estaba quedando su hermano en manos de mi esposo. Dos guardias de seguridad llegaron queriendo detenerlo, pero la furia de Theo no tenía pensado mermar. __ Sostenga a mi hija. - le pedí a uno de los
Theo.__ Pase. - elevé la voz para confirmar la entrada de Ignacio, el mensajero que se quedó en la puerta logrando que lo viera. - Entra, no hay problema. Seguí con los trazos que estaba haciendo.__ No puedo, señor. Solo vine a avisar que la señora Blanca tiene problemas. Dejé todo de lado. Solté el grafito y esperé su respuesta.__ Disculpe que me meta, pero solo escuché que era de servicios infantiles. Vinieron con una orden. - antes de terminar de decirme eso, ya estaba cruzando la puerta. A toda prisa crucé el pasillo, llegando al sitio donde la niñera de mi hija cuidaba que la bebé no se despertara, mientras Blanca discutía en voz alta con el tipo que intentaba explicar no sé qué. __ ¿Que ocurre? - pregunté mirando a mi mujer con su mirada aterrada. __ Se la quieren llevar, Theo. Se quieren llevar a nuestra hija. - sollozó dándome el papel que leí, donde específicamente se pedía llevar a la niña a un sitio donde pudiera estar a salvo de "alguien violento" - No dejes que me
Blanca.El enojo me tenía sin poder respirar, la noche la pasé en vela y cada una de las horas que pasaban solo torturaron mucho más mi corazón adolorido, necesitaba sentir que estaba respirando y no solo esa pesadez en el pecho que me atosigó incluso en la mañana. No quise desayunar, tenía prisa por ello salí luego de unos minutos rumbo al lugar donde tenían a mi bebé. __ La niña aún está dormida, pero si quiere entrar a verla puede hacerlo un par de minutos. - ofreció la mujer con gafas transparentes. Asentí aún sabiendo que solo sería por poco tiempo, todo lo que pudiera sería un respiro para mí. No dormir sabiendo que la vería dos veces durante la noche, y de nuevo en la mañana me dolió y causó ese desbalance que en mi cabeza dio vueltas. Por ello desde que entré a la habitación donde habían seis cunas, rápidamente busqué la suya dándome pena por los demás bebés que aún no tenían un hogar, pero ver a Sammy me devolvió esa paz instantánea que llenó mi ser. Las lagrimas quisier
Blanca __ Ya pasó el tiempo de visita. - avisó la mujer de lentes transparentes. Rick y Theo dejaron de verse con ganas de querer matarse, mi esposo se volteó para cargar a la bebé unos momentos, repitiendo en su oído que la amaba más que a su vida y la iba a recuperar. Deseé que esa promesa si la cumpliera. No me importaba como, solo quería que lo hiciera. Deposité besos en su rostro, con ese resquemor en la parte superior de la garganta doliendo, no se iba y odié no poder decirle que ya nos íbamos, pero no podía llevármela así como así. Tenía que repetirme eso, porque mi mente creaba ideas al por mayor, no era común, pero sabía que la causa era el inmenso amor al cual me le ponían trabas. __ Te amo. - repetí en su frente antes de entregarla a la mujer de lentes. - Cuidela, por favor. - supliqué y asintió. - Pase lo que pase, no dude en llamarme. Lo que sea, a la hora que sea.__ Así lo haré. - comprendiendo el porqué de mi actitud, la mujer afirmó que lo haría. Quizás era mad
Theo.__ Con el abogado pudimos hacer que el juez reconsidere la opción de devolvernos a Sammy. - dije y la mirada de Blanca se iluminó. - Logramos hacer que el testimonio de Rick no tenga nada de credibilidad ya que los asuntos personales no deben interferir de ninguna forma con su trabajo. __ Entonces, ¿la traeremos de regreso? - se ilusionó. __ Dije que iba a lograrlo, Blanca. Es mi hija, jamás me quedaría de brazos cruzados al ver que me la quitan sin saber que la traeré de regreso. - aseguré y bajó la mirada.__ Lamento lo que...__ Lo entiendo. Entiendo tu dolor, lo que me molestó en realidad es que no confíes en mí. - admití. - Odio que desconfíes de mí como si me quedara grande el mantener a mi familia unida. - recalqué, la vergüenza coloreó sus mejillas. - Sé que no me quieres de la forma en que...__ Es que sí lo hago. - me interrumpió. - Te quiero. ¡Te amo, Theo! No sé desde cuándo realmente, ni como pero sé lo que siento y es un inmenso amor por tí. - el golpeteo en mi c
Blanca.La emoción no me dejó pensar en nada más que ver a mi hija, ni siquiera me importó el que Rick viniera con su escándalo. No quería hacer preguntas, mucho menos saber más de ese asunto. No me interesó en absoluto. Un cero a la izquierda que no pretendía cambiar ya que se me hizo entender que no podía desear jamás hacerle daño a las demás personas, si ellos si lo querían hacer conmigo. Mucho me tardé en entender que siempre debía ser yo o los que amaba antes de aquellos a quienes traté de hacer a un lado de forma sutil. Eso no podía ser real, no si ellos no pensaban de la misma forma que yo. Por eso junto a Dylan, Marcia y Billy, quien viajó con ellos dos para hacerme compañía también. Tenía Lo ojos fijos en ambos teléfonos a cada nada. Siguiendo con mi trabajo, pero pendiente de las llamadas que llegaran. La tensión era palpable, los nervios me carcomían y solo pude dar un respiro, recordando que Theo se haría cargo. Él jamás fallaría, lo prometió y si algo sabía de mi espos