Stray: HighView - Viernes 13 de Agosto: Richard Ciertamente no temía por la vida del profesor, de haber sido una amenaza, Cristophe lo habría matado en el momento en que este regresó de la muerte, además de eso, parecía bastante interesado en medir las capacidades físicas del nuevo canalizador de Deadvia. El aullido de Zereth me sacó de mis propios pensamientos y el movimiento dentro de la arena comenzó. Ambos se movían lentamente, uno alrededor del otro. Zereth incluso se había molestado en levantar una barrera para el combate, la barrera tenía el propósito de negar a Stanley el apoyo de la manda, todos los canalizadores de Zereth aumentaban considerablemente su poder al pertenecer y estar con un grupo, una manada. Sin embargo, aislar a uno del resto significaba que dependería de su propio poder. El profesor no mostraba ninguna destreza real en ámbitos de combate, aún así sus capacidades físicas eran totalmente superiores a las de Stan, Deadvia había conseguido un canalizador realm
Stray District: HighView - Sábado 14 de Agosto: Iván Las preguntas fueron aceptadas esta ocasión pero, tan pronto Alexa terminó de explicarme la superficie de la situación actual, Richard llegó para recogerla. Me quedé sólo en una habitación de hotel desconocida. En algún punto de la noche la laptop de mi estudiante llamó mi atención, una pantalla llena de códigos, pestañas y herramientas que algunas veces había observado dentro la Universidad me hizo hacerme una idea del entorno de desarrollo que estaba utilizando. La programación no había sido mi fuerte durante mis años de estudiante, podría haber sido bueno en ello, pero nunca me sentí con ganas de aplicarla realmente. Comencé a scrollear a través de su código durante las siguientes dos horas, intentando entender lo que estaba allí escrito. El teléfono de la habitación recibió una llamada, el silencio de la noche hacía que el sonido fuera estruendoso a mi punto de vista y me ví obligado a contestas. - ¿Hola? - pregunté al teléfon
Y entonces cada noche, yo bajaba media escalera y caía rendido ante los escalones, porque mi cama ya no era lugar suficiente para refugiarme, porque mi hermana ya había tenido suficiente de mis dramas, aunque fuera yo, aquel que creía que era impredecible, aquel que creía ser espontáneo, el que había caído en una rutina, en una larga y vergonzosa rutina. Cada aproximadamente ocho meses venía a refugiarme con mi familia, si no era con mi madre era con mi hermana, y ahora… ya sólo puedo refugiarme con mi hermana. Todo comenzó cuando renuncié a mi trabajo, por enésima vez yo creo, como siempre corrí con la cola entre las patas a ver a mi hermana, no importaba si era mañana, tarde o noche; ella siempre abría esa puerta para mí, su pequeño hermano menor, que no tenía amigos, pareja o hijos que lo mantuvieran estable ante una crisis, era noche, (cerca de las doce imagino) cuando toqué a su puerta para molestarla, tardó un par de intentos el hacer que se leva
Un sonido familiar me hizo recobrar el sentido, era algo conocido, pero no lograba reconocerlo del todo. Lenta, y torpemente, abrí mis ojos de uno de uno, mientras mis pupilas se adaptaban a la luz que las reflectaba, ese maldito sonido, era algo que no escuchaba desde mis días de secundaria. Un pequeño despertador viejo que utilizaba para levantarme en días de escuela, sacudí un poco la cabeza, me enderecé todo lo posible, procedí a apagar el despertador y solamente en el momento en que el sonido se extinguió fue que noté que algo andaba mal. Miré rápidamente la habitación, unos rayos de luz la iluminaban por completo, después de entrar por una ventana a la derecha del todo. Mi mente comenzó a entrar en pánico inmediatamente puesto a que no creía lo que mis ojos me mostraban en ese preciso momento, estaba de regreso a mi habitación en la casa de mis padres, y todo seguía exactamente igual a como lo recordaba, lo que era completamente imposible, ya que no veía esa habitación desde l
Desperté nuevamente, mi cabeza daba vueltas y estaba algo confundido. Toqué todas las partes de mi cuerpo examinando desesperadamente. Pero… La habitación, nuevamente en esa maldita copia de mi niñez… Mi cuerpo seguía en shock, aunque por mi mente sólo había una cosa; Había fracasado. Aprendí mucho del primer intento, y… del segundo, también del tercero. Aunque cada vez que lo intentaba parecía haber menos retroalimentación para mí mismo. Mi cuenta marcaba 12 días en total, y sólo 5 reinicios. Éstos 5 intentos me habían demostrado alguna que otra cosa, y de ellas podía estar seguro: Cada vez que estaba próximo a una muerte inminente: el ciclo se reiniciaba. Las circunstancias que causaban mi escenario de muerte podían llegar a ser totalmente extremas, llegando incluso a escenarios casi imposibles. El comportamiento de las personas a mi alrededor no variaba a menos de que yo actuara de manera diferente.
Desperté aún más exaltado que las veces anteriores, estaba ansioso por intentarlo una vez más. Pero tan pronto presté atención a mi entorno me pude dar cuenta que no había reiniciado como siempre. Ésta vez me encontraba en el bosque, parado justo frente a aquel animal, retrocedí algunos pasos y me preparé para encararlo.No te confundas – interrumpió aquella cosa – ésta vez no moriste, no en realidad.¿Y qué tan real es esto?Touché – exclamó – pero esto en realidad fue una ilusión, todo lo que “viviste” en los últimos minutos fue manipulado por mí, sólo viste lo que yo quise que vieras.¿Qué sentido tiene eso?Deadvia no es el único que tiene poder aquí. Tal como dijiste, Deadvia de mantiene vivo por alguna razón. Mis motivos
Desperté inquieto en una habitación oscura, no hubo sobresalto, simplemente una extraña sensación de nostalgia, como cuando sueñas algo realmente malo o sinceramente triste. Algunas lágrimas escaparon de mis ojos hasta que me derrumbé por completo, comencé a llorar completamente y mis fosas nasales comenzaron a taparse. Me incorporé sobre la cama, recargando mi espalda en la cabecera de la cama, recogí mis piernas y hundí mi cara entre mis rodillas. Me desahogué por completo durante los próximos 3 o 4 minutos hasta que mi mente comenzó a aclararse. Levanté un poco la cabeza y miré alrededor lentamente, mis ojos ya se hallaban adaptados a la oscuridad, pero apenas y logré vislumbrar las siluetas de los muebles que me acompañaban. La habitación estaba completamente a oscuras y aun así podía distinguir mi cuarto entre las sombras. Mi mirada se detuvo unos centímetros antes de la puerta centrándose en un viejo reclinable. Extrañamente la luz nocturna que entraba por la ventana n
La joven, de nombre Alexa, condujo aproximadamente 40 minutos hasta un pequeño restaurante a las afueras de Nest Heat, nos detuvimos allí y tomamos una de las cenas más incómodas que he tenido. Yo intentaba obtener respuestas de vez en cuando lo que culminaba la conversación al instante. Sus ojos me parecían demasiado llamativos, en realidad tenía una o dos preguntas al respecto, yo en realidad quería saber, pero ella realmente parecía estresada y aunque parecía ser amable no tenía intenciones de poner a prueba su temperamento. Terminamos de cenar cerca de las ocho de la noche y ella realmente parecía inquieta en la mesa. Quise pedir la cuente en alguna ocasión, pero ella insistía en que esperáramos un poco más. Después de un par de tazas de café dieron las diez de la noche y fue entonces que la mesera nos pidió irnos, pagué la cuenta y seguí a Alexa a la camioneta. Tenía la intención de ir de copiloto, pero ella se dirigió hacia ese lado del auto lo que me sugirió que yo manejaría es