Al mismo tiempo, Harvey York ya había comenzado su investigación.

Le pidió información a las conexiones que tenía con algunos gánsteres y estaba básicamente seguro de que Simón Zimmer no estaba haciendo trampa desde el principio y que ganó mucho al principio por pura suerte y ni siquiera fue intencional.

Solo había perdido dinero más tarde porque conoció a un jugador hábil en dicho juego.

Era seguro asumir que el incidente había sido planeado por un extraño, pero todo fue perfecto, no pudo encontrar nada sobre la situación.

Por supuesto, sería mucho más fácil para la policía averiguar qué sucedió realmente si la llamaran.

Pero si eso sucediera, Simón Zimmer tendría que vivir tras las rejas durante bastante tiempo.

Si ese fuera el caso, Mandy Zimmer estaría desconsolada.

Y Harvey definitivamente no quería verla de esa manera.

Honestamente, solo eran catorce millones de dólares. Con su patrimonio, sería cuestión de minutos antes de que se pudiera devolver el dinero.

Pero todavía