Arion sentía una profunda tristeza en su corazón que solo se lo demostró a Sasha, había dejado partir a su hija, había cedido a esa petición a la que tanto se hacía negado aceptar.

Ahora estaba con Sasha, en ese lugar que solo era su refugio, y era como haber perdido nuevamente, sentía el mismo dolor en su alma.

—Señor Sibelius. ¿Porque me dice todo esto?

—Porque Desde que.....bueno después de ella, solo tu has venido aquí. Ahora también Skarlett se marchó, crecerá, y no se si algún día regresa, y sino hará su vida lejos de aquí

—¿Dónde está ella? ¿Que sucedió con ella? —preguntó Sasha pa ver las perspectivas de Arion hacia ella.

—Ella...ella me traicionó de la peor forma posible, talvez fueron celos, ni yo mismo lo entiendo por qué lo hizo, pero ella me causó un dolor tan grande, que si estuviera aquí....

—¿Si estuviera aquí que?

—La hubiera obligado a decir la verdad.

—¿La verdad? ¿Dónde está ahora?

—En el caudal, ella prefirió el caudal antes de aceptar mi ayuda.

—¿Qué ayuda le dar