Sin poder resistir un solo minuto más, Anna corrió hacia su compañero, y, de un salto, rodeó su cintura con sus piernas y se abrazó a su cuello, mientras que él, la sujetaba firmemente de sus muslos.―De verdad no tienes idea de lo mucho que te he extrañado ―masculló Anna antes de besarlo con profundidadSintiendo como la ansiedad de aquel día abandonaba su cuerpo, Anna se aferró más fuerte a su compañero, el cual, no tardó en apretar sus muslos con suavidad antes de separarse ligeramente de ella.―La que no tiene idea eres tú ―le dijo en un susurro ―He esperado más de un año para tenerte entre mis brazos ―Con sumo cuidado, Dante bajó a Anna antes de apresurarse a sujetar su rostro con ambas manos.―Eres mía pequeña alfa, sólo mía y por fin puedo gritarlo ―dijo elevando la voz ligeramente antes de volver a besarla―Lamento mucho interrumpir el hermoso rencuentro ―dijo Elizabeth tras aclararse la garganta ―Pero, querido hermano, ¿no se suponía que ibas a esperar hasta mañana? ―Dispue
Inclinando su rostro hacia su tacto, Anna cerró los ojos unos instantes.―Me alegra que por fin estés aquí, pero tu llegada solo significa que…――Tranquila nena, el alfa ha estado trabajando duro desde casa con toda la información que le hemos estado enviando, así que yo en tu lugar, estaría tranquila, pues seguramente, con toda la información que tiene, su viaje no durará mucho y volverá enseguida, yo, por mi parte, aunque él regrese, no me moveré de aquí, me quedaré a tu lado ―Sonriéndole, Anna se abrazó a su cintura y permitió que el aroma de su compañero la relajase, por lo que, tras asentir, la joven se separó de él y dio unos cuantos pasos al interior del bosque para poder transformarse.―Eres mucho más hermosa en persona ―dijo Dante sonriendo cuando la hermosa y delicada figura de Amara se presentó ante élAnte sus palabras, la loba meneó la cola y se acercó a él para poder frotar su cabeza contra él.―Realmente hermosa ―dijo riendo cuando la loba le dio un rápido lengüetazoC
Ante las palabras de Dante, Anna sonrió y se aferró más fuerte a los brazos de su compañero en un intento de relajarse contra él, sin embargo, pronto emergió cierta duda que había estado rondando en su cabeza durante los últimos días.―Dante… ¿Puedo hacerte una pregunta? ――Claro, ¿qué sucede nena? ――Bueno, quería saber… Ya sabes, cuando papá se marche, ¿cómo harás para comunicarte con los miembros de esta manada? ¿Te unirás a Loto de Luna? ――No mi amor, aún no es necesario que lo haga, de momento, mi presencia aquí es una mera pantalla, la cual, sirve para protegerlos ante la ausencia del alfa ya que, si alguna manada enemiga se llegase a enterar de su ausencia, ustedes podrían ser fácilmente atacados ――Sin embargo, al ser mi compañero y tener ya veintiuno, la gente podría pensar que, de hecho, sí que estás a cargo ――Así es ―dijo Dante antes de besar su sien ―Aunque la verdad, el que realmente estará al frente de Loto de Luna, será el beta Neilan, básicamente, para ustedes no hab
―Gael, de verdad no sabes lo que le sucederá al alfa en…――Oye Gael ―lo llamó Elizabeth, por lo que Chloe, guardó silencio al instante ―Acabas de jurarle lealtad a nuestra Annita, pero ¿qué hay de mi hermano? ¿Acaso le harás la vida miserable? ――Claro que no, ¿por quién me tomas Eli? ―preguntó Gael con tono ofendido ―A mi futuro alfa le debo respeto, en cuanto al otro, bueno, a ese sí que planeo hacerle la vida miserable, mira que amenazarme con no permitirme ir a visitar a mi hermanita ――Dijo que si no te arreglabas con La…――No digas ese nombre Eli ―gruñó Gael ―No en mi presencia ――No empieces cariño ―le regañó Emmet― ¿Cómo te sientes con respecto al tema de ser Luna, Chloe? ―le preguntó Dante, quien, en ese momento, escondía la cerveza de Anna detrás de él, pues al parecer, a la joven le había desagradado el sabor―Yo… Aún me siento insegura ―masculló la joven ―Después de todo, soy una híbrida…―― ¿Qué tiene eso que ver? ―preguntó Anna arqueando una ceja―Bueno… Que una Luna se
Tras horas y horas de risas, charlas y glotonería, Anna y Dante decidieron que era hora de volver, pues el joven, había acordado reunirse con Alastor temprano al día siguiente, por lo que, entre silbidos y comentarios burlescos, ambos regresaron a casa tomados de la mano.Al llegar, ambos se dirigieron directamente a la habitación de Anna, donde, complacidos, notaron que alguien ya había llevado la única mochila que Dante llevaba con él a la habitación, por lo que, tras intercambiar un par de besos más, Anna se dirigió a su armario, mientras que Dante, se dirigió directamente al baño.―Por fin…―le susurró Anna al espejo tras ponerse la pijama, un pants negro con cuadros grises y una blusa de manga larga de color gris ―Después de un largo año de espera, por fin estamos juntos…―“¿Quieres salir de una buena vez? Lo echo de menos…” ―gruñó Amara―Amara, no han pasado ni diez minutos desde que nos separamos de él ―dijo Anna riendo“¿Vas a decirme que no lo extrañas?” ―gruñó indignada la lo
Tras lo que Anna consideró la mejor noche de descanso de su vida, su despertar fue completamente lo opuesto, pues lejos de despertarse en los brazos de su compañero, la joven se despertó con un sobresalto, pues alguien había comenzado a brincar encima de ella dando gritos.― ¡Ya es hora Anna! ¡Despierta! ―― ¡Ares! ―exclamó asustada la joven― ¡Feliz cumpleaños hermanita! ―exclamó el lobato sin dejar de brincar encima de Anna―G-Gracias…―masculló la joven dirigiendo su mirada hacia el espacio donde Dante había dormidoJusto en ese momento, aquel espacio estaba siendo ocupado por la almohada que el joven había usado aquella noche.―Mamá dice que debes bajar ya, es muy tarde y aún debemos planear tu fiesta ―dijo el joven dejando de brincar para acurrucarse junto a ella― ¿Tarde? ¿Qué hora es Ares? ――Son las doce y treinta del medio día ―dijo el lobato aferrándose a su hermana― ¿¡Doce treinta!? ―exclamó asustada―Mamá estaba preocupada porque siempre te levantas temprano ――Rayos… Es q
Ante la sugerencia de su madre, Anna se revolvió nerviosa y evitó el contacto visual con los demás, por lo que Iva, soltó un suspiro y comenzó a acariciar su espalda, lo que relajó ligeramente a Anna.―Vale mi niña, lo siento, ¿prefieres hacer algo en Wolfsong? ――Yo… No estoy segura mamá, estaba pensando algo más tranquilo aquí, en casa ―masculló la joven tomando la rebanada que Dona le extendía ―Aunque… La verdad es que hoy me gustaría ver a mi familia ――Lo sé mi niña, pero sabes que tu abuela no pisará el territorio, si bien ahora nos acepta, tampoco es que le entusiasme estar rodeada por hombres lobo ――Dulzura, no deberías dejar que la sombra de ese horrible ser te atormente ―dijo Melba, quien le acercaba un vaso con leche a Ares, cuyos ojos, estaban fijos en su hermana―Así es cariño, el alfa se encargó de que ese ser no volviera a lastimar a nadie más ―dijo Dona acercándole su rebanada de pastel a Ares, quien pasó olímpicamente de ella para sujetar la mano de su hermana―Ademá
Ante la seguridad de su hija, Iva sonrió complacida y acarició su mejilla suavemente.―Tú puedes mi niña ―susurró la mujer con dulzura por lo que Anna la abrazó brevemente antes de ceder a su transformaciónApenas Amara apareció, esta se acercó a Ares y le dio un lengüetazo, lo que hizo reír al cachorro, quien no tardó en acariciar la cabeza de la loba.―Eres la más bonita ―dijo Ares alegremente ―Después de Ivory, claro ―agregó cuando su madre se aclaró la garganta ruidosamente―Buen intento cachorro ―dijo Iva con una sonrisa antes de ayudarlo a subir al lomo de Amara, quien ronroneó suavemente cuando el cachorro acarició su pelaje ―Recuerda sujetarte suavemente, no vayas a lastimarla ――No lo haré mamá ――Y tú ―dijo Iva apresurándose a sujetar el rostro de la loba ―No corras, no quiero que tires a tu hermano por intentar alardear de tu velocidad ¿me escuchaste? ―Ante la pregunta y la severidad en el tono usado por su madre, Amara asintió torpemente, lo que hizo reír a Alastor, quien