Capítulo 7
Todos los presentes se levantaron, unos indignados y furibundos y otros sorprendidos y escamados, sospechando de la presencia de ese hombre allí.En efecto, quien se apareció, repentinamente, no era bienvenido por los Masaharu ni los Sánchez, que ya lo habían conocido tiempo atrás en las peores circunstancias.El imponente ojīsan, el abuelo de Azaki y Ran, Kane Masaharu, se hizo presente en la sala con su enorme pundonor y dignidad, que ocupó todo el espacio.—¿Qué haces tú aquí? —dijo Azaki entre dientes, apretando la mandíbula y deseando fulminarlo ahí mismo.No olvidaba. No podía olvidar cómo unos años antes, ese hombre le había sometido a un cruel castigo frente a su prometida Rous, abusando de su poder para ponerlo de rodillas y golpearlo con las varas de madera, y casi matando a su chica que se entrometió para defenderlo. De aquella vez, ella casi muere y él nunca más lo quiso ver ni tratar como familia. De hecho, ningCapítulo 8—¡NO, NO Y MIL VECES NO, PADRE!Efectivamente, los gritos se escuchaban en toda la mansión y la señora Watanabe pensaba que posiblemente en varias calles del barrio. Cuando su esposo fue a comunicar la “buena nueva”, léase con toda la ironía, no pensó, la buena señora, que su hija podría gritar tanto. Nunca se había enfadado así.—Aiko, no pude evitarlo hija. Está en juego el honor del clan entero. Incluso de nuestros antepasados. —El señor Watanabe miraba apenado a la niña. Le enseñó aquel papelote con el antiguo acuerdo para que entendiera. —Pero papá, entonces estoy condenada. —Se dejó caer sobre el tatami. No se podía hacer nada. Era esta una jugarreta del destino, pues había descubierto el valor de luchar por sí misma, para ser libre de elegir y no seguir viviendo según un antiguo código de conducta traído desde los tiempos de Confucio, y que ya se ha quedado obsoleto, y al final debía doblegarse a un acuerdo regido por
Capítulo 9Al terminar el almuerzo de celebración, se abrió una zona con barra libre y música, para los que aún no estaban cansados. Ran dejó a su novia libre un momento mientras iba a hablar con su traidora familia.Al fondo del salón estaban los conspiradores. Azaki y su mujer, Aron y Alexa y los padres de ambas familias estaban juntos y parecía que esperaban a que él se acercara, porque se sentía la tensión. Los más tranquilos eran la señora Makoto y su marido, ambos estoicos e inexpresivos como solo los orientales pueden serlo.—¿Y esa repentina decisión sin consultarme a que se debe? —fue al grano Ran. Todos resoplaron como si hubieran estado guardando el aire. No pensaba armar un escándalo al menos ahí frente a todos. —Nos pareció lo correcto, hijo —respondió su madre.—No le has dado opción a elegir y no has respetado su deseo de romper el compromiso, cosa que no te honra. Tú que eres el primero en erigirte como abogado del diablo
Capítulo 10Ran siguió a la chica cuando la vio ir a los baños del hotel, que estaban en la zona exterior del gran salón de eventos. Habló con sus suegros al pasar para comunicarles que iba a llevar a Aiko a cenar con él para acordar algunas cosas sobre el compromiso y los mayores, renuentes, aceptaron.Lo dijo para dejarlos tranquilos y que no la buscaran. El iba a ajustar algunas cuentas con ella y no quería interrupciones molestas. Se apoyó en una pared frente al aseo, enviando un mensaje a Azaki diciendo que había surgido algo y se iba y Esperó por fuera a que la chica saliera. En cuanto asomó la cabeza, le tapó la boca y la arrastró con él hasta el ascensor privado que llevaba directo las plantas altas y al ático de Ran.Solo los VIPS tienen acceso a ese ascensor y eran muy pocas personas las que se podían permitir ese lujo, de modo que él sabía que era poco probable que nadie los viera. La renacuaja se resistía como una jabata, pero no había color. R
Capítulo 11A Aiko le dolía todo, menos las pestañas. No tenía idea de que esto podía ser así. Ran no le dio tregua en toda la noche y ahora no sabía ni la hora que era, pero imaginaba que no sería temprano. Sus padres quizá estarían preocupados y quiso levantarse para llamarlos y explicarles que… que… ¿Podía decirles a sus padres que Ran…?. Mejor no. No es que sus padres tomaran a mal que su novio la hubiera hecho mujer, puesto que se iban a casar, pero francamente a ella le daba pudor que lo supieran. Ya inventaría algo.De todos modos, él la tenía apretada entre los brazos, con las piernas por encima y no había manera de moverse ni de irse de la cama. Él pesaba el doble que ella casi. No le quedaba sino esperar a que despertara. Y como estuvo quietecita tanto rato, se durmió de nuevo. Ran despertó y la volvió a desear. Así que la fue despertando suavemente a besitos y caricias y la pequeña se quejaba molesta pero no despertaba. Ran volvió a c
Capítulo 12Ran se ocupaba con destreza de los asuntos pendientes de ese día. Lo más que quería era salir pronto y recoger a Watanabe. Su secretaria le dio aviso de que tenía una visita sin agendar, pero que el hombre insistía en verlo. Al preguntar quien era, la mujer le dijo que se llamaba Raúl Sánchez. El hermano de Alexa entró un poco tímido en el gran despacho, pero se tranquilizó al ver la gran sonrisa con que lo recibía el que alguna vez fue su cuñado. —¡Raúl! ¿Qué te trae por aquí? ¿Quieres tomar algo? —ofreció como si recibiera a alguno de sus importantes socios.Cierto que nunca habían tenido mucha relación, y ni siquiera lo conoció mientras con su hermana, pero después habían coincidido muchas veces en festejos familiares y aunque el chico era joven y no muy hablador, se llevaban bien.—No, Ran, gracias. Solo querría hablar contigo de algo y… bueno. Sé que no somos tan cercanos, pero quisiera pedirte algo —le expresó, con tranquilida
Capítulo 13—Cuando dije que no quería casarme, me refería justo a ese momentito, no dije que no quisiera ser tu esposa algún día —afirmó con contundencia.Ran la miraba creyendo creerla, pero eso no era lo que él recordaba y frunció las cejas. Le llegó el recuerdo de hace unos años, el día que fue ilusionado y decidido a pedir la mano de la chica, a la mansión de los padres de ella. Al entrar fue recibido por Aiko como siempre que iba a la casa. Llevaban tiempo saliendo a citas y hablando por las noches largo y tendido.Se llevaban bien y habían conectado, aparte de que ella parecía encantada con sus atenciones y con el descaro del hombre, bastante más mayor y experimentado que ella, y que a la hora de seducirla no se refrenaba.—Hola, Ran. ¿Cómo es que has venido hoy?. No te esperaba —sonrió feliz Watanabe. Era para ella una alegría cada vez que lo veía. Ran era un hombre muy especial y la decisión de cambiar de prometido, al final resultó un ac
Capítulo 13—Cuando dije que no quería casarme, me refería justo a ese momentito, no dije que no quisiera ser tu esposa algún día —afirmó con contundencia.Ran la miraba creyendo creerla, pero eso no era lo que él recordaba y frunció las cejas. Le llegó el recuerdo de hace unos años, el día que fue ilusionado y decidido a pedir la mano de la chica, a la mansión de los padres de ella. Al entrar fue recibido por Aiko como siempre que iba a la casa. Llevaban tiempo saliendo a citas y hablando por las noches largo y tendido.Se llevaban bien y habían conectado, aparte de que ella parecía encantada con sus atenciones y con el descaro del hombre, bastante más mayor y experimentado que ella, y que a la hora de seducirla no se refrenaba.—Hola, Ran. ¿Cómo es que has venido hoy?. No te esperaba —sonrió feliz Watanabe. Era para ella una alegría cada vez que lo veía. Ran era un hombre muy especial y la decisión de cambiar de prometido, al final resultó un ac
Capítulo 15Las separaciones son cada vez más largas, pues Aiko tiene mucho trabajo con su carrera. No ha elegido una titulación sencilla y cada semestre es cada vez más agotador por las exigencias de las materias y los profesores. Realmente está tan saturada que cada noche llega y se tumba en la cama deseando la muerte.Intenta contestar a todas las llamadas de Ran, pero se le hace literalmente imposible y además él se enfada cada vez más por no obtener respuesta sin entender que la niña no puede estar todo el tiempo pendiente de su teléfono. En su corazón empieza a sentir demasiada presión de parte de su novio y eso no la hace sentir bien, al contrario, empieza a sentir algo de rechazo porque una vez más la necesidad de control sobre ella es agobiante. No ha llegado hasta aquí´para seguir viviendo igual que antes y eso su novio tiene que entenderlo por las bunas o por las malas. Así que deja de contestar a sus llamadas.Por su parte, Ran cada vez menos p