——Eres tan astuto...—— dijo entre sollozos, mirando el anillo de diamantes en su mano, que nunca había pensado que podría ponerse en esta vida, y las lágrimas seguían cayendo sin cesar.

——Si... Si solo... si me hubieras dicho esto antes de que sucedieran todas estas cosas, ¿cuánto más feliz habría sido...—— murmuró entre lágrimas. 

Había soñado con esta escena muchas veces antes, pero ahora, después de todo lo que había sucedido, ¿podría el espejo roto ser reparado?

Ella miró al hombre arrodillado a sus pies. Sí, estaba encadenada de nuevo. 

Y él, ¿no lo estaba también? Un hombre que había salido de una familia fallida, con la firme convicción de no querer formar una familia nunca, pero ahora, estaba casándose bajo esas circunstancia