Estimadas lectoras y lectores La mente de Annalena ya comenzó a maquilar un plan, ¿Será que si podrá separar a Ana de Dominik?
--- Mauro Jiménez ---Al llegar al restaurante, mi hermana ya estaba ahí, solo que preferí avisarle a Annalena que ella iba a llegar. En el poco tiempo que llevo tratándola, es una mujer de viejas costumbres y sé que le incomoda cuando le cambian los planes de momento.Elena y yo ya hemos hablado mucho tiempo sobre esto. Si mi hermana logra llamar la atención de Dominik, técnicamente nos volveríamos parte de la familia Müller y eso, vaya, ¡Eso sería extraordinario!Sé que sueno demasiado aprovechado, pero, estoy completamente seguro de que Dominik, por la amistad que compartimos de años, mil veces va a preferir a mi hermana, que, a la insípida de Ana, además, si por alguna razón no funcionara el matrimonio, por nuestra amistad, no se atrevería a separarse de mi hermana.Hasta hace una hora no sabía quién era la mujer que robaba los pensamientos de mi amigo. Ahora que sé quién es, vaya, pienso que será demasiado fácil quitarla del camino. Ana se queda corta, comparada con Elena, solo
--- Ana Teyssier ---Luego de un largo día, finalmente llegamos a casa. Después de salir a comer con Lorelei las cosas se calmaron. Dominik al lado de aquella mujer, realmente luce feliz, puedo ver cómo existe una gran conexión entre ambos.Él le ofreció venir a quedarse aquí en casa con nosotros, pero ella se negó. Dijo que la compañía había pagado para que viniera y se hospedara en un gran hotel, así que ella iba a utilizar ese lujo.Pienso en aquella pequeña, pero gran charla que tuve con Lorelei, mientras lleno la tina para bañarnos. Esta vez, Dominik y yo, realmente necesitábamos un largo baño caliente y relajante.El día había estado plagado de varios momentos incómodos, bueno, al menos hasta que Lorelei rescato el día.Tengo mucho en qué pensar, ella me dijo cosas que realmente se me quedaron grabadas.--- Unas horas antes ---Dominik, Lorelei y yo, llegamos a un restaurante no muy lujoso, pero que servían deliciosa comida asiática.Normalmente, no comemos esto, de hecho, se me
--- Ana Teyssier ---Tienes muchas cosas que pensar, Ana, lo único que puedo decirte corazón, es que Dominik es un buen hombre y si aceptas que él entre en tu vida, porque es claro que aún no lo aceptas, lo puedo ver en tu semblante. Si lo llegas a aceptar, él te va a amar para toda la vida.Pero si por alguna razón, tu pasado y su pasado pesan más que lo bueno que haya aquí, preferiría que te alejes de él.Háganlo en buenos términos, pero no se lastimen. Obviamente, yo hablo por él, pero sé que tú también puedes salir lastimada, por lo que es mejor que aclaren bien las cosas y a dónde van con esta relación.- ¡Gracias, Lorelei! - Digo ante la sinceridad de la mujer.- ¡De nada, corazón! ¡De nada! Y cada vez que quieras que alguien te escuche, también aquí estoy, bueno, estoy un poco lejos, pero sí estoy.--- De regreso, en la habitación ---- ¿Ana? – Escucho y una mano pasa frente a mis ojos.- ¡Perdón! ¡Perdón! No me asustes así… - Digo saliendo de mi ensueño.- ¡Cielo…! Llevó 5 minu
--- Ana Teyssier ---Entre la visita de Lorelei, que por alguna extraña razón, es la única que me hace sentir como en casa, la mudanza a lo que será nuestro hogar y adornar la casa para Navidad, la semana se pasó rapidísimo.Lorelei muy a su pesar, tuvo que regresar a Alemania. Ella nos ayudó con la mudanza, nos ayudó con la decoración de la casa, incluso adelantamos una pequeña cena navideña para los 3.Convivir con Lorelei, me mostró muchas cosas que no conocía de Dominik, incluso delante de ella, el parecía un niño, solo un niño que se dejaba mimar por su madre.Estos días me han dejado mucho que pensar, la plática con Lorelei, en sí, me había dejado mucho que pensar.El Dominik que yo conocí, era completamente diferente al que veía frente a mí, a veces pienso que estoy siendo muy dura con él. Todos cometemos errores, todos hemos hecho una que otra estupidez, yo soy un vivo ejemplo de ello.Sé que conocí una parte escabrosa de Dominik, pero este lado, que es más humano, me deja clar
--- Ana Teyssier ---La mañana fue una locura, luego de una “tranquila noche”, Dominik y yo vamos rumbo al aeropuerto, apenas y alcanzamos a llegar. Estoy un poco desvelada, pero ahora en el avión podré dormir un poco, son 5 horas, las cuales son perfectas para descansar y recuperar las pilas.En menos de lo que imaginamos, llegamos al aeropuerto de la ciudad de México. No puedo negar que me siento un poco nerviosa. En los dos años que fui asistente de Dominik, nunca vine a México, de hecho Dominik, venía, pero en compañía de Bruno.Ahora, tan pronto como veo que debemos bajar del avión, mis manos comienzan a sudar, yo comienzo a temblar. Montones de recuerdos llegan a mi mente, montones de imágenes aparecen frente a mí, Dominik, tal como si me sintiera, toma mi mano fuertemente y me ayuda a bajar del avión.- ¡Tranquila! Todo estará bien, solo serán unos días y luego regresaremos a casa… - Dice y me sonríe, yo inequívocamente le devuelvo la sonrisa.Pareciera ser otro, apenas hace u
--- Ana Teyssier ---La frase con la que mi madre recibe a Dominik me sorprende. Ambos entramos a casa y ella cierra la puerta, pareciera ser como si ella ya supiera algo.Cosa que seguramente es cortesía de Romina, no la culpo, ella está feliz de que esté rehaciendo mi vida.Jamás, en el tiempo que llevamos hablando por teléfono o en sus visitas a Nueva York, ella me ha hablado algo sobre Diego. Simplemente, hablamos de lo mucho que nos extrañamos, de lo que quiere ser cuando sea más grande y casi siempre en nuestras videollamadas, salía a relucir el nombre de Dominik.Cuando le platiqué en forma secreta de que él y yo vivíamos juntos, ella gritó de emoción, casi olvidando que le había dicho que era secreto.- ¡Mucho gusto, señora…! - Dijo Dom extendiendo su mano cortésmente.- El gusto es mío, Dominik, Marlene Martínez para servirte, pasen, pasen… - Dijo mi madre con una amabilidad que me extraña.- ¿Y los demás? – Pregunto un tanto extrañada.- Todos andan desperdigados por la casa
--- Ana Teyssier ---Efectivamente, cuando salimos al jardín, en una larga mesa, ya tenían todo listo. Mis hermanas platicaban con Luc, mamá y la abuela entraban y salían de la cocina llevando la comida a la mesa en el jardín.Algo o alguien llamó mi atención, Héctor iba saliendo de la cocina con Jude en brazos. En ese preciso momento, sentí un sudor frío recorriendo mi espalda, el venía jugueteando con la beba, que de bebe ya no tenía nada, era una hermosa niñita de ojos azules y cabellos negros largos.- ¡Ana! – Dijo Héctor con sorpresa y una sonrisa que se le borró al ver quién sostenía mi mano.- Hola, Héctor… - Dije con un poco de timidez al sentir cómo la mano de Dominik, apretaba un poco la mía.- ¡Hola, Ana! ¿Cómo estás? – Dijo Héctor sin inmutarse o controlarse ante la presencia de Dominik, quien en ningún momento soltó mi mano mientras Héctor me abrazaba junto con Jude.- Hola, Héctor… ¡Bien, todo bien…! Te presento a Dominik Müller… Él es…- Soy su novio y ya tenemos el gust
--- Ana Teyssier ---Aquello me hace sentir mejor por lo que resto de la noche, después de una amena comida en familia, la cual fue curiosa, ya que por primera vez la mesa estaba llena. Todos platicaban, bromeaban y reían.Esto era lo que realmente extrañaba de casa de mamá, estas comidas, platicas de trivialidades, platicas de cosas que pocas veces se hablan.Luego de una larga sobremesa, llegó el momento de irnos a abrigar, ir a misa e ir a las posadas. Yo busco una mochila en mi closet y la subo a la camioneta, sé que la necesitaremos para los dulces, aunque no sé bien por qué, si realmente no necesito tantos dulces.Al final todos terminamos yendo en la camioneta de Dominik. Es un poco raro, pero Luc es muy buen mediador, sabe cómo mantener a raya a mi querido Dominik y, a Héctor, aunque siendo sincera, el segundo se enfoca más a su hija y el primero solo observa que se mantenga a cierta distancia de mí.Cuando llegamos a la iglesia, varias personas nos vieron como bichos raros. Er