12

Alcé la vista buscando a esos ojos verdosos llenos de dulzura.

–Emmet– murmuré su nombre y por un instante olvidé la presencia de Cris y de papá. Éramos sólo él y yo. –Emmet, lamento mucho haberte dejado plantado, yo… No quería que me vieras de ese modo. Te he mostrado mi peor versión desde el primer momento y no te lo has merecido. Eres un buen hombre, amable, dulce, generoso y yo… Yo tengo muchos errores, muchos más de los que cualquier persona tendría –me reí con nerviosismo– Quiero que sepas que planeó cambiarlos, tienes razón y agradezco que me abrieras los ojos con tus palabras.

–Lía, no lo tomes a mal, nunca quise herirte, lo siento, yo– le sonreí a Emmet y él guardó silencio, se veía apenado y volví la vista al resto.

–Quiero decirle a los tres que… Quiero mejorar –alcé la barbilla cuando sentí un impulso de bajarla y desviar la mirada. Era lo suficientemente fuerte para esto y para todo lo que vendría además– Yo… Yo planeo hablar con un psicólogo y…–suspiré– Quiero mejorar.
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP