Capítulo 8.

Trevor.

Regreso a la oficina y veo a Rose que está sentada en mi silla.

–¿Está enojada? – me pregunta, mordiendo la punta del lápiz que yo estaba usando.

–Si, está cabreada, cree que tú y yo tenemos algo.

–¿Todavía no lo supera? – rueda los ojos y cruza su pierna derecha sobre la izquierda, haciendo que su falda se levanta ligeramente.

Desvió mis ojos de forma inconsciente a la abertura de la falda negra, pero quito la mirada de sus piernas enseguida.

–Pensé que ya era un tema superado, pero nos vio a los dos solos, aquí, tu haciéndome masajes y se imaginó lo peor – chasqueo la lengua – ¡por un demonio! – le doy un golpe al escritorio y camino alrededor de la oficina – y eso no es lo peor de todo.  

–¿Ah no?

–No, dijo algo sobre mud

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP