Duramos minutos abrazados sin decir nada, por ese momento olvidé que mi hermano estaba arriba y podría bajar en cualquier momento. Cuando al fin quise deshacerme de su abrazo, noté algo.
—¿Ian?
—¿Ian?
Hay no, se había quedado dormido parado —Borracho— susurré, genial ¿ahora que haré? pesa como 30 kilos más que yo y mide como 1000 metros.
A como pude lo lleve hasta la sala y lo deje caer en ella, un gruñido salió de su boca, pero no parecía tener intenciones de despertarse.
Subí rápido por una sábana y lo tapé, me acerqué a él y le di un beso en la mejilla.
—Me amas ¿cierto?
Abrí los ojos al ver que estaba con un ojo abierto.
—¡Estuviste fingiendo! — Dije picándole la panza, me tomó de la mano y me sentó a un lado de
Las llamadas de Ian no cesaban, pero no planeaba contestarle. Llegué a la casa y hablé con mamá sobre la escuela.—¿Cómo te fue? — preguntó Jason cuando vio que subí las escaleras.—Bien, desde que vi la información me pareció la mejor de todas y ya con la información que me brindaron quedó comprobado que es la correcta.—¿Dónde está Ian? ¿No llegaste con él?—No, me tuve que venir sola— él sólo asintió y entró
Ya habían pasado 3 semanas desde que Ian y yo comenzamos a salir “oficialmente” y la verdad me la he pasado muy bien con él, nuestra mayor dificultad es hacer todo lo posible por que Jason no se entere de lo nuestro, o al menos no por ahora. La maña de Ian de salir de su cuarto en las madrugadas para ir al mío ya se le hizo costumbre y no puedo quejarme, regularmente se acuesta conmigo y se queda hasta que me duerma, después vuelve a su habitación cuando Jason está profundamente dormido. En otras ocasiones nos hemos dormido juntos cuando Jason no pasa la noche aquí, e Ian le inventa lo de siempre que saldrá y no volverá tampoco. (FlashBack) Recuerdo que la semana pasada tuvimos una pequeña pelea, debido que vino a la casa una chica de
Rápido pregunté por el vuelo que Henna me había dicho que Jack abordaría.Sentí gran impotencia cuando me dijeron que Jack había adelantado su vuelo y había partido a las 6 am, sentí un vacío dentro, de cierta forma tenía la esperanza de verlo y aclarar muchas cosas, me sentí mal por él y pensé en marcarle pero ahora él estaba a miles de km en el cielo y no tenía caso, también pensé en mandarle algún mensaje para que cuando pudiera me contactara pero, creo que esta vez era yo la que tenía que hablarle ya que él intentó comunicarse mil veces y yo lo desprecie, bueno esperaré un día en lo que llega y después le marcaré.
Después de caminar hasta la tienda, entré y busqué a Ian, pero no lo vi, llegué a donde estaba el cuadro y no sabía qué hacer ¿qué seguía?“Puedo estar detrás del cuadro” repetí en mi mente la nota que traía en mi mano.Me acerque al cuadro y lo levante un poco, vaya que si pesaba, cuidé que no se desprendiera de la pared y cayera al suelo, vi un papel color rosa, batallando con una mano levanté el cuadro y con la otra tomé el papel.Bien, lleva este cuadro a la caja registradora, ahora es tuyo. Ahora ve donde siempre comemos y pide una pizza fa
No sé, a pesar de lo poco que llevamos saliendo, Ian tiene algo que me gusta, sé que no es bueno comparar, pero Jack, siempre fue el novio "perfecto" el tipo de chico que todas quieren, el que te comprende y te respeta, el que te daba esa paz y esa estabilidad que toda chica quiere, el chico con el que posiblemente te cases, si la relación marcha como desde un principio. Pero Ian era todo lo contrario, a pesar de que era un mujeriego, que andaba por la vida sin importarle nadie, me sentía tan augusto estando con él, él tenía esa chispa, Ian me hace sentir protegida y a la vez que me hace sentir que no sé qué pasará el día de mañana, y hace que disfrute más el momento día con día. Caminábamos por el centro comercial, el con su brazo derecho lo
Movimos los sillones creando un gran espacio y nos sentamos uno frente al otro, Ian llenó los caballitos y al terminar me mira con una gran sonrisa. —Oh si, hoy sabré muchas cosas sobre ti nena.—No creó tener información tan relevante como tú — le regresé la sonrisa.—Bien ¿quién comienza?—¿Piedra, papel o tijera? —sugerí.—Bien— me miró de manera retadora.—Un, dos, tre
Bajé corriendo las escaleras esperando que Ian estuviera bien, pero no lo vi por ningún lado, salí de la casa y ya no se escuchaba nada, estaba muy asustada.—¿Ian?De repente sentí como dos manos me tapaban la boca y me hacían para atrás, saqué toda la fuerza para golpear a quien tratara de hacerme algo, rápido volteé y vi que era Ian riéndose a carcajada abierta.—¡Eres un maldito imbécil! — dije enojada, que digo enojada, emputada, furiosa. Entré rápido a la casa.
Las clases comenzaban a las 7 así que tenía exactamente 1 hora para arreglarme, agregando el tiempo que hacía de camino, me levanté y ya tenía listo que ponerme, un pantalón negro roto de las rodillas, una blusa de resaque color blanca con letras negras, y mis flats negras. Me di una ducha rápido, al salir Jason tocó la puerta apurándome.—Dame 10 minutos y bajo a desayunar — puse mis ojos en blanco, que costumbre de apurarme.El día de hoy opté por un labial color vino y mucho rímel en las pestañas, mi cabello era lacio por naturaleza, cosa que me facilitó la rutina, sólo lo tuve que desenredar y esperar a que se secara.Tan pronto como bajé las escaleras vi a un eminente chico de espaldas, alto, sentado en la barra, camisa color roja que le dejaba ver lo ancho de su espalda, el cabello alborotado, guapísimo y a su lado estaba