-Supongo que el Alfa Supremo y tú tienen gustos diferentes en hembras. -Quizá. - Dijo asintiendo antes de levantarse de la silla y caminar lentamente hacia mí. - Ven conmigo. No es como si tuviera opción cuando tomó mis cadenas y me sacó del lugar No fue una gran caminata, simplemente cruzamos un par de pasillos en los siguientes diez minutos y nos detuvimos en la cámara más grande que había visto hasta el momento.En ella varios lobos se encontraban echados o peleándose por restos de comida. Lo que más llamó mi atención fue ver que conforme pasábamos algunos se quedaban mortalmente quietos.¿Tanto le temían al lobo?Nos dirigimos al fondo y él se sentó en una silla parecida a la de la anterior cámara. Me hizo un gesto para que girara y mientras lo hacía, el tipo me presentaba.-Aquí, esta es la hembra que ha sido la unica en poder entrar entre las filas de la manada de nuestro enemigo. ¿Creen que es bonita?Me tensé al sentir la mirada de todos en mi cuerpo. No eran un númer
Cuando salí de entre los arbustos y vi a Iris estar al punto del desmayo debido a la extensión de sus heridas y aún así intentó proteger la entrada de la cueva que llevaba hacia la cima de la montaña... ese día yo pense que estaba furioso. Cuando la hembra decidió que debía de hacer una escapada para comprar ropa en una manada cercana a sabiendas de que los Renegados iban por mí... yo pensé que estaba furioso. Una, dos, tres veces más de sus jodidas y dementes ideas me hicieron pensar que estaba furioso. ¿Jugar con los osos? ¿Vestirse como Renegado? ¿Hacer colapsar un jodido túnel ella sola? Mi diccionario debía de estar mal porque esa hembra de alguna forma hacía que la palabra perdiera su significado más constantemente de lo que me gustaría. ¿Ahora mismo? Ahora mismo "furioso" no era como me sentía. Quizá "homicida" fuera una descripción mejor. -Por el río. - Dijo Ti con rostro inexpresivo. - Llegaron y se fueron por ahí. Asentí. -¿Cómo se encuentra Fe? -Ef sigue tratando l
El lobo se sentó y me miró con fijeza. -¿Qué tipo de favor? - preguntó con voz dura. A nuestro al rededor, el aire comenzó a volverse frío de repente. El bosque silencioso repentinamente comenzó a moverse con incomodiad, como si el humor del lobo influyera en la naturaleza. Volví a bajar la cabeza. -Del tipo en el que no me importaría suplicar. - Dije en voz baja. - No creo que esté interesado en los problemas del Alfa Supremo, así que no te daré la historia larga: Mi manada y yo hemos rescatado recientemente a varios civiles que... -Lo sé. - Elevé la cara con sorpresa. - ¿Cuál es el favor? Parpadeé nuevamente cuando Cleo regresó a posarse sobre la cabeza del lobo y cerró los ojos para... ¿Dormir? Como si el aura del tipo no fuera una clara amenaza para nadie. -Necesito un lugar seguro para llevarlos y que no sea del conocimiento de los Renegados. ¿Podría traerlos hasta aquí? Nuevamente su mirada fija en mí antes de que su cara se inclinara un par de centímetros, c
Calavera se levantó de su asiento (o trono, más propiamente dicho) y caminó hacia donde yo me encontraba jadeando para recuperar energía. Mi cuerpo temblaba no solo del esfuerzo sino del dolor, pero no le daría la satisfacción de hacérselo saber.No apartó su mirada de mí y yo no desvié la mía.A su paso, los lobos le abrían camino para que pudiera llegar hasta mí.-Parece que sabes pelear. - Dijo evaluándome de arriba a abajo. - Eres bastante interesante. ¿Quién te ha enseñado?Me limpié el sudor de la frente sin responderle. A la mierda, no tenía por qué hacerlo. Sobre todo ahora que me encontraba adolorida por culpa de sus lobos y sus estúpidas cadenas.El sonrió cruelmente ante mi falta de respuesta y, en un movimiento que apenas y pude ver, golpeó mi estómago con el puño cerrado sacándome el aire en el proceso.Quizá fue mi imaginación, pero creía haber escuchado alguna especie de "crack".Caí al suelo intentando respirar y sintiendo esa zona en llamas.En algún punto había cerr
El tipo se dirigió hacia el cuerpo del rincón.Pude ver que lo que había tomado de la mesa no era un cuchillo o alguna mierda de arma sino un sucio trapo de color indeterminado que puso directamente en la cara del cuerpo.El chillido que lanzó el cuerpo fue tan agudo que sospeché que era una mujer. Mierda, aún nos faltaba una civil por sacar de aquí.-Hora de despertar, quiero que te unas a un interesante interrogatorio. - Dijo Calavera descuidadamente. - Empieza a sangrar.Permanecí justo donde me dejó durante su intercambio así que vi cómo el tipo regresaba a la mesa y tomaba un par de máscaras mientras que la chica luchaba por levantarse temblorosamente.Cuando por fin la chica se sostuvo en pie, miró directamente en mi dirección. El par de ojos más claros del mundo me sostuvo la mirada. Ojos vacíos, ojos sin vida... ella no podía ver.Y aún así caminó lastimosamente en mi dirección.Su cuerpo era tan delgado debajo de los harapos que vestía que pensé que en cualquier momento su
Me dejó caer sin más cuando entramos a una habitación conocida. Caí sobre mi hombro y el impacto hizo algo con mi hombro. Algo malo. -¿Estás lista para decir tu nombre y de dónde te ha sacado el Supremo? No podría contestarle aunque quisiera. Quizá estaba a segundos de perder la consciencia debido al dolor. El tipo bufó y lo escuché ir hacia alguna parte lejos de mí. Tristemente regresó en un par de segundos y me tomó por las cadenas para atarlas a otras cadenas. No parecía ser algo bueno. Volvió a alejarse y enseguida mis cadenas se tensaron. Algo me estaba arrastrando hacia adelante y arriba rápidamente; eso solo podía significar un par de cosas. Quedé suspendida en el aire a unos tres metros de los peces que ya comenzaban a amontonarse debajo de mí como atraídos simplemente por verme. Cerré los ojos con fuerza mientras mi hombro y costillas protestaban por el movimiento. Bueno, realmente a estas alturas todo me dolía. Lo que me parecía extraño fue toda la debili
Volví a ser arrojada al suelo, solo que esta vez no tenía fuerza para protestar.No estoy seguro de cómo es que sabes sobre los experimentos. - Dijo pausadamente, no es que me importe que se sepa, solo soy curioso.-Alfa Supremo... interrogatorio... muchos renegados. - Jadeé.-Supongo que alguno sabía más de la cuenta. - Dijo asintiendo. - Esa fuerza... debe de ser resultado de un largo tiempo de exposición a la sangre del Supremo. - Comenzó a acercarse. - No tengo datos suficientes... ¿Cuántas veces y en qué cantidad has bebido su sangre?-En el útlimo año... dejé de contar.- Murmuré cerrando los ojos. Lo sentí rodearme para mirarme como un fenómeno o como algo sumamente interesante.-No me explico cómo una raza inferior pudo soportar la sangre del Supremo sin morir o tener alteraciones visibles. - Dijo con un gruñido. - Debe haber algo más en ti.Entonces lo sentí comenzar a arrancarme la ropa.Protesté debilmente, pero él me ignoró.Cuando terminó, con la punta del pie me hizo gir
La cabeza del Alfa Ayax rodó por la alfombra ante los ojos atónitos de todos. -Mató... ¡Mató a su padre! - Gritó una de las lobas de mi manada que sostenía mi velo. -¡Corre! ¡El yer... yerno mató a su suegro! Los invitados corrían en todas direcciones, los gritos resonaban por toda la sala. Me sorprendió ver a mi nueva pareja sacudiendo sus garras para limpiar los restos sangrientos de ellas, por lo que me quedé quieta en un primer momento. A mí lado, mi hermana menor tembló de miedo. -¡¿POR QUÉ?! ¡¿POR QUÉ MATÓ A MI PAPÁ, POR QUÉ?! -Grité en cuanto me recuperé de la impresión. El me miró con una sonrisa siniestra. -¿Por qué? No hay razón, lo maté porque quise. Jeremías se lamió la sangre de sus garras sin apartar la vista de mis ojos. -Ahora te toca a ti, mi querida Luna. Di un tembloroso paso atrás, pero no había hacia dónde correr. -¡Guardias! ¡Guardias! Grité y apreté con fuerza la mano de mi hermana. Pero nadie me contestó, todo se volvió en caos. Mi